EL CORAZÓN
EXPLORANDO LA VOLUNTAD DE NUESTRO ESPÍRITU
©
Carlos Padilla, Marzo 2008
En este tiempo, en el que más personas
que nunca son tratadas de depresión, y habiéndose publicado por
la comunidad científica que los antidepresivos son poco, o nada
efectivos, es cuando se pone de manifiesto, más si cabe, el
desconocimiento que el hombre tiene de si mismo, como individuo
y como comunidad. El corazón afligido es además la principal
causa de la mayoría de las enfermedades, no solo de las
emocionales. Como dice el Proverbio 14:10 ...El
corazón conoce la
amargura de su alma; y extraño no se entremeterá en su alegría...
Necesitamos una vida interior en armonía entre nuestro espíritu
y nuestra alma porque nuestro intelecto discierne lo espiritual
y lo sentimental. El Maestro y doctor espiritual de nuestras
almas, el Señor Jesucristo enseña en Mateo 5:8 ...Bienaventurados
los de limpio corazón, porque ellos
verán a Dios...
Dios nos ama, aunque la humanidad viva un
proyecto de vida separado de Él en su conjunto; ¡y así nos va!.
La puerta de nuestro corazón se la tenemos que abrir nosotros a
Dios, algo que está mejor expresado en la Biblia cuando habla de
la circuncisión del corazón, la cual deja nuestro corazón al
descubierto impidiendo que lo escondamos de amar tanto a Dios
como al prójimo. Dios llama a nuestra puerta y envía a Su Hijo
Jesucristo abriéndonos Él a nosotros la puerta de Su corazón; si
queremos recibirle.
El hombre ha evolucionado
mentalmente, pero su corazón no ha cambiado, ni cambiará. Dios
conoce y pesa nuestros corazones desde antes de la
creación del mundo. El corazón del hombre sigue siendo el mismo
que al principio, es así como Dios lo ha diseñado, por este motivo el Señor nos
habla al corazón, esto es, a nuestro espíritu, con un mensaje
por el que no pasa el tiempo,
el Evangelio, la buena nueva para
el corazón. Ninguna otra Palabra tiene el poder de
transformar al hombre en su corazón como la Cruz de Cristo y el
Reino de Dios.
TENEMOS ACCESO AL
CORAZÓN DE DIOS
Cuando el Señor rasgó el velo en el Lugar Santo
al morir en la Cruz, el velo que realmente estaba quitando fue
el de Su corazón. Aquella obra que nosotros conocemos por el
relato Bíblico, en lugar y fecha, es en realidad la primera
acción que Dios hizo de su propia voluntad cuando nos amó en
Cristo eternamente; una obra eterna hecha en los cielos eternos,
para vida eterna. Dios Padre al sufrir la muerte de su amado
Hijo, rasgaba su corazón, circuncidaba su corazón y lo dejaba
accesible a la oración en el nombre de Su Hijo Jesucristo y al
arrepentimiento del hombre, de cualquier hombre que invitándole,
también rasgase el suyo en amor, al amar eternamente al Mesías,
el Hijo, el Señor, desde la Cruz. Aunque en el Nuevo Testamento
la palabra griega "Kardia" se suele identificar en muchos Textos
con la vida psíquica, sin embargo el corazón espiritualmente
simboliza nuestro espíritu, y es en realidad algo mucho más
complejo, como lo es también el sistema cardiovascular, que
veremos también, mas adelante, de forma sencilla como
paralelismo espiritual.
Aunque la Ley pone el velo a la presencia de
Dios y debe por ello cumplirse para acceder, a través del
sacerdote y por la sangre del "sacrificio"; bajo la gracia, sin
embargo y por la Sangre de Cristo, tenemos ...libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de
Jesucristo, 20por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a
través del velo, esto es, de su carne, 21y teniendo un gran
sacerdote sobre la casa de Dios, 22acerquémonos con
corazón
sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los
corazones
de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. Hebreos
10.
La relación de Dios con nosotros es de una
profundidad emocional tan grande que no es posible entenderla.
Del mismo modo, y hablo como hombre, cuando estamos enamoramos
vivimos una experiencia que gobierna los sentidos de nuestro
ser, a lo que llamamos pasión; La Pasión de Cristo, por su
"esposa" bien se podría reflejar en el Cantar de los Cantares;
aquella Pasión le llevaría directamente a la Cruz, la cual el
miró desde lo alto, y desde antes de la fundación del mundo
1Pedro 1:20, habiendo bebido la copa de la amargura, llena de
aquel vinagre de la esponja del soldado romano, "para que la
Escritura se cumpliese", la mirra que le ofrendaron cuando vino
a este mundo.
Esta historia de amor entre Dios y el hombre es
el centro de atención de la vida celestial, además de la
terrenal, y es tan profunda que cuando uno se enamora del
Espíritu de Dios, ya no se puede vivir sin Él, ya no se puede
concebir la vida sin Aquel Príncipe de Paz de Isaías 9:6,
Príncipe Azul que dio Su vida por nuestra alma en el Espíritu
Eterno y nos ha ido a preparar moradas para llevarnos con Él,
tras las Bodas del Cordero. Sí, también usted está invitado a
esas bodas, pero a esas bodas se participa en el altar, como
novia, como Iglesia, para casarse eternamente con Aquel Príncipe
del Espíritu y del alma; la dote, nuestros pecados, y por la fe,
nuestros frutos del corazón, y buenas obras que no cuentan para
la salvación sino que nos mantienen en el Camino.
Cuando el Señor habla, lo hace al corazón; lo
hizo desde la Cruz a través de Su obra, de este modo vemos que
el habla espiritual no es solamente el audible, sino el que toca
el corazón por Su Espíritu, por Su presencia, por sueños, etc.
El Señor habla con autoridad porque ha dado su corazón para
ganar el nuestro. Un ejemplo de hombre que habló al corazón fue
José, en Egipto, Génesis 50:21, cuando habló a sus hermanos que
le habían vendido como esclavo, ahora salvándoles del hambre.
Los Textos Bíblicos de mayor profundidad
espiritual sobre este tema se encuentran en el Evangelio de
Juan, Cáp. 13:31 al Cáp. 17 inclusive. En ellos se narra la entrega
del Señor por nosotros, la entrega de Su corazón. La obra de
Cristo transforma nuestro corazón, que tras recibirle puede
emanar amor de Dios para otros como nos lo enseña en Juan 13:34
...Un mandamiento nuevo os doy; que os améis los unos a los
otros como yo os he amado...
ENSEÑANZA EN LA
ANATOMÍA CARDIOVASCULAR
La anatomía del corazón nos muestra un
paralelismo espiritual en su composición y en su funcionamiento,
como casi toda la estructura del hombre, ya que el diseño es de
Dios. El corazón es fundamentalmente una bomba que bombea la
sangre. La vida del cuerpo es
La Sangre y según el ritmo del
corazón, bombea mas deprisa o más despacio. Espiritualmente, el
sistema cardiovascular compuesto de tres partes, el corazón, el
conjunto de venas y arterias, y la sangre, actúan como una misma
cosa. Del mismo modo el Señor trata con nosotros mediante
las tres Personas de la Trinidad, el Padre, el Hijo y el
Espíritu Santo, siendo uno. Del mismo modo que el corazón late
según el ritmo de vida que llevemos, nuestro espíritu emanará el
amor de Dios según su ánimo, de ese, nuestro corazón espiritual,
nuestro espíritu. Ahora bien, ese ánimo depende estrechamente de
la relación que tenemos con Dios y de como está nuestro corazón,
si nuestra conciencia está en paz, en la paz de Cristo, si
nuestra vida es una vida dirigida a los frutos del amor a Dios y
nuestro prójimo. La depresión es el estado opuesto al
entusiasmo, por lo tanto si vivimos para Cristo no cabe la
depresión.
Terminando con el corazón físico y en una
explicación sencilla, nuestro espíritu es el que bombea nuestra
vida espiritual, el fruto del corazón Cristiano que es el amor
de Dios; me refiero a un espíritu que ha nacido de nuevo del
Espíritu Santo, Juan 3:3. Para bombear amor de Dios tenemos dos
ventrículos, uno al que entra la sangre con oxígeno,
simbólicamente el Espíritu Santo, y otro que recoge la sangre de
vuelta de nuestro cuerpo, nuestra propia esencia que hemos de
purificar en el oxígeno que nos trae el Señor por la
respiración, la oración, la adoración y la alabanza.
Curiosamente tenemos unas válvulas llamadas sigmoideas que son
triples y permiten la comunicación entre las aurículas y los
ventrículos de cada lado del corazón. Estas válvulas triples,
espiritualmente son precisamente la oración la adoración y la
alabanza a nuestro Dios, que nos da la vida. Sin ellas no
funciona el paso de la sangre, si ellas no funciona nuestra
relación con Dios y no generamos vida, esto es amor de Dios para
darlo a otros.
El corazón simboliza nuestro
espíritu en acción, del mismo modo que nuestro cerebro simboliza
nuestra mente, y nuestro cuerpo nuestra alma. Aunque la vida nos
la da Dios, y ahora me refiero a la vida física, mientras Él
quiere, en el sentido espiritual, podemos palpitar vida de la
carne, del mundo, o del Espíritu. Todo depende de si hemos
nacido de nuevo, de si hemos recibido el Espíritu Santo y su
fuego purificador del corazón. Como por sus frutos los
conoceréis, los frutos del corazón Cristiano son: El amor
llamado Caridad, "amor de
Dios" según el diccionario, la santificación, la justicia, y las bunas obras además
del arrepentimiento. Gálatas 5:22 nos revela los frutos del
Espíritu: ...amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
mansedumbre, templanza. Por otro lado vemos la esencia del
corazón de Cristo: ...misericordia quiero y no sacrificio...
Mateo 9:13 o ...la misericordia
triunfa sobre el juicio... Santiago 2:13b. Jesús enseña que lo
más importante de la Ley es: La justicia, la misericordia y la
fe. Mateo 23:23. El corazón que busca la justicia es una fuente
de ánimo y de valor para el hombre. El corazón Cristiano es un
corazón de justicia y un corazón valiente.
En los siguientes doce Textos Bíblicos
comentados veremos más profundamente la esencia del corazón que
sigue a Dios.
TEXTOS BÍBLICOS
GÉNESIS 6
5Y vio Yahweh que la maldad de
los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo
solamente el mal. 6Y se arrepintió Yahweh de haber hecho hombre
en la tierra, y le dolió en su corazón. 7Y dijo Yahweh:
Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado,
desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves
del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho. 8Pero Noé halló
gracia a los ojos de Yahweh.
Si hermanos, la naturaleza del corazón humano es
maligna, porque el hombre cree que sólo, sin Dios, puede vivir
felizmente bajo el libre albedrío. La salvación de Dios, aunque
va dirigida al alma, que recibirá un nuevo cuerpo en la
resurrección, debe comenzar en el corazón que es el timón de
nuestras vidas, para que el hombre ceda su gobierno al autor de
la vida, nuestro amoroso Padre. Si vivimos como Noé hallamos
gracia ante Sus ojos y somos bendecidos, esto es si recibimos Su
plan de salvación, Su Hijo Jesucristo.
1SAMUEL 10
6Entonces el Espíritu de
Yahweh vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y
serás mudado en otro hombre... ...9Aconteció luego, que al volver él la espalda para apartarse de
Samuel, le mudó Dios su
corazón; y todas estas señales
acontecieron en aquel día.
El Espíritu Santo viene sobre nosotros, una vez
hemos nacido de nuevo y nos muda en otro hombre, cambia nuestro
espíritu, nuestro corazón y somos contados con los profetas del
Altísimo, pues somos una nación de reyes y sacerdotes para Dios
su Padre, y Él es el Rey de reyes. Apocalipsis 1:6.
SALMO 141
3Pon guarda a mi boca, oh
Yahweh; Guarda la puerta de mis labios. 4 No dejes que se
incline mi corazón a cosa mala,
a hacer obras impías con
los que hacen iniquidad; Y no coma yo de sus deleites.
El Salmo nos muestra la intención de un corazón
que ama a Dios, la petición de que nuestra voluntad y
pensamiento sean guardados, que nuestro corazón no sea llevado
por la carne ni por el mundo. ...no nos dejes caer en la
tentación, mas líbranos del mal...
PROVERBIO 4
23Sobre toda cosa guardada, guarda tu
corazón; Porque de él mana la
vida.
Espíritu y fuerza motivadora del hombre. En una
visión de hoy en el plano de la informática podríamos decir que
somos iguales a un programa y su programador al mismo tiempo,
tenemos un objetivo, hemos de descubrirlo, Dios nos lo revela al
cambiar nuestro corazón, si no el enemigo puede usar nuestro
programa para usos viles. El corazón es como un
arca donde se guardan
los sentimientos y el conocimiento.
JEREMÍAS 17
9Engañoso es el corazón
más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? 10Yo
Yahweh, que escudriño el corazón, que pruebo los riñones,
para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus
obras.
Corazón engañoso y perverso si no se ha nacido
de nuevo. Prueba el corazón para hacerlo sujeto a Dios. El Señor
nos advierte que si no vamos de Su mano, nuestro propio corazón
nos traicionará engañándonos para buscar los fines de la carne.
Nuestro corazón, siendo nuestro espíritu debe alimentarse del
Espíritu Santo. Cada día, hemos de orar al Señor para que sea Su
Santo Espíritu quien nos guíe, y cada una de las decisiones del
día las pongamos en Sus manos.
DANIEL 10
12Entonces me dijo: Daniel, no
temas; porque desde el primer día que dispusiste tu
corazón
a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron
oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido.
Daniel es un fiel ejemplo de discípulo que vive
en amistad personal con Dios, en el amor y honra de Su Dios y
Padre. Si de esta forma imitamos a Daniel, el Señor nos hará
entender Su pensamiento y lo compartirá con nosotros.
MATEO 6
19No os hagáis tesoros en la
tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones
minan y hurtan; 20sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la
polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni
hurtan. 21Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también
vuestro corazón.
Nuestras ideas y proyectos debemos siempre
traerlos ante Dios, no dejarlos en nuestro corazón escondidos,
sino preguntarle a Dios en el nombre de Jesús si son de Él o no,
y si no lo son debemos desecharlos. Haga la prueba, sea como
Gedeón, Jueces 6, que pidió a Dios señales para saber si le
bendeciría antes de ir a la guerra contra los madianitas.
Nosotros debemos pedir señales ante grandes decisiones de
nuestra vida. Dios siempre nos habla, pero debemos buscarle en
oración, y una vez recibida la respuesta, obedecerla.
MATEO 15
16Jesús dijo: ¿También vosotros sois aún sin entendimiento?
17¿No entendéis que todo lo que entra en la boca va al vientre,
y es echado en la letrina? 18Pero lo que sale de la boca, del
corazón sale; y esto contamina al hombre. 19Porque
del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios,
los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos
testimonios, las blasfemias. 20Estas cosas son las que
contaminan al hombre; pero el comer con las manos sin lavar no
contamina al hombre.
Este es un Texto revelador, porque nos muestra
como podemos conocer a las personas con las que hablamos. De sus
bocas sale lo que hay en sus corazones, solo hay que escuchar,
por cierto una acción que no muchos saben ni quieren hacer.
Dicen que por eso tenemos dos orejas y una boca, para escuchar
el doble de lo que hablamos. Santiago 3 nos recuerda que debemos
ser prudentes porque la lengua es un arma de doble filo.
HECHOS 4
32Y la multitud de los que habían
creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser
suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las
cosas en común. 33Y con gran poder los apóstoles daban
testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante
gracia era sobre todos ellos.
He aquí la petición: que todos los hermanos
seamos de un corazón "Espíritu" y de una misma alma. Creo que la
Cristiandad con tantas denominaciones deberá dar cuentas a Dios
de porqué tiene que haber tantos grupos distintos. Si asemejamos
la religión manipulada por el hombre para someter a otros, para
obtener lucro y para dominar las almas, lo cual vemos, además de
en otras religiones, en gran parte de la Cristiandad, esta es la
apostasía, 2Tesalonicenses 2:3, que había de venir, esta es la
religión llamada Babilonia, esta tiene fecha de caducidad,
Apocalipsis 18. A los discípulos les debemos dar a conocer a
Jesucristo vivo y a establecer una relación personal con Dios en
la que dependan de la Palabra, que es el Verbo de Vida y del
Espíritu Santo, para que sus corazones sean confortados y no
dependan de la estructura humana, sino que entiendan todos los
de buena voluntad que la Iglesia somos todos los que hemos
creído en el Hijo de Dios y le esperamos, habiendo transformado
nuestros corazones y trabajando en ellos cada día para que
emanemos el Amor de Dios entre nosotros, donde se encuentra el
Reino de Dios hasta que Él venga.
ROMANOS 2
28Pues no es judío el que
lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace
exteriormente en la carne; 29sino que es judío el que lo es en
lo interior, y la circuncisión es la del
corazón, en
espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los
hombres, sino de Dios.
Más claro, agua. La palabra Judío, si con ella
se entiende a un miembro del pueblo de Dios, es aquél que ha
quitado su carne de su corazón, esto es que ha descubierto su
espíritu para amar, como hace Yahshua con nosotros, de forma
fraternal y verdadera. Según leemos a Pablo, ser Judío o
Cristiano, si ambos han recibido al Mesías Jesucristo, es lo
mismo. Los Mesiánicos deben tener este punto claro, así como
todas las denominaciones Cristianas, sean estas Católicas en sus
muchas ramas, o Protestantes en las muchas de ellas.
1PEDRO 1
22Habiendo purificado vuestras
almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para
el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros
entrañablemente, de corazón puro; 23siendo renacidos, no
de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra
de Dios que vive y permanece para siempre.
Siendo renacidos del Espíritu, nos muestra
Pedro, como hemos venido viendo, de esta forma nuestra alma es
purificada y nuestro corazón puede amar entrañablemente. Esta es
la actitud que yo espero de un hermano/a, que sea mi amigo, no
un orden jerárquico de sometimiento, de acusación y de
condenación, como vengo escuchando y me viene escribiendo de
todo el mundo los hermanos, con respecto a sus iglesias, una
vergüenza. Si sus hermanos, sean ancianos, obispos, diáconos,
todos se consideran a todos sacerdotes del Señor, y amigos
verdaderos, den gracias a Dios y trabajen para no perder esa
relación de amistad espiritual. Si por el contrario viven dentro
de un sistema babilónico, huyan no sea que cayendo el castigo
del Señor les pille dentro. ...Y oí otra voz del cielo, que
decía: Salid de ella pueblo mío, para que no seáis partícipes de
sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados
han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus
maldades... Apocalipsis 18.4.
1JUAN 3
17Pero el que tiene bienes de
este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él
su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? 18Hijitos
míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en
verdad. 19Y en esto conocemos que somos de la verdad, y
aseguraremos nuestros corazones delante de él; 20pues si
nuestro corazón nos reprende,
mayor que nuestro corazón es Dios, y él sabe todas las cosas. 21Amados, si
nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en
Dios; 22y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él,
porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son
agradables delante de él.
Este es el último de los doce Textos, pero creo
que no necesita ningún comentario.
CONCLUSIÓN
El corazón de
Dios y Su Presencia están en el Arca de la Alianza que es
Jesucristo. Ahora tenemos acceso a Su corazón, a Su presencia
porque nos amó, si Le recibimos en nuestros corazones.
El velo ha sido
rasgado para que podamos venir a Él sin temor en Cristo.
El hombre de doble ánimo es inconstante en todos
sus caminos... ...Y vosotros los de doble ánimo, purificad
vuestros corazones... Santiago
1:8 y 4:8. Así que si usted es inconstante en sus caminos y es
de doble ánimo, purifique su corazón a través de las válvulas
triples espirituales:
la oración, la
adoración y la
alabanza.
Corazón:
Bienaventurados los de limpio corazón... Mateo 5 ...y les dará un corazón de
carne... Ezequiel 11:19. En realidad
se refiere a nuestro
espíritu, aunque a veces pueda parecer que
se refiere a nuestra alma,
se refiere a nuestros sentimientos
espirituales,
y según el Texto, al discernimiento
espiritual, aunque pudiera parecer que se
refiere a la mente. La
fuerza de vida y la voluntad, el sentimiento de
querer y amar a Dios y a nuestro prójimo. El corazón
es el lugar de inicio de la obra de
salvación de Jesucristo, por eso el
Evangelio es Palabra específica para el
corazón, donde radica la conciencia. El corazón de Dios es
infinitamente más espiritual y lleno de amor que el nuestro, pero Él
nos lo cambia por uno como el suyo, por el nuevo nacimiento del Espíritu.
En realidad al igual que
nuestro corazón es nuestro espíritu, en el
Señor su corazón es el Espíritu Santo en
persona. ..De la
abundancia del corazón habla la boca...
Mateo 12:34. Así que no nos podemos
esconder de nuestros sentimientos verdaderos. Hablas de Cristo,
tienes a Cristo, hablas del mundo, tienes al mundo que es muerte. Génesis 6:5, 1Samuel
10:9 Salmos 7:9, Mateo 15:19, Apocalipsis 2.23.
Tomado del
Diccionario Espiritual.
Pare terminar, las palabras
de Jesucristo en Juan 14 me han parecido las
que mejor hablan a nuestro corazón en la
esperanza de Su venida: ...1No se turbe vuestro corazón;
creéis en Dios, creed también en mí. 2En la casa de mi Padre
muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho;
voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3Y si me fuere y os
preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para
que donde yo estoy, vosotros también estéis. AleluYah,
Maranatha. Amén, sí, ven Señor Jesucristo. |