JESUCRISTO   LA RESURRECCIÓN VIENE. HE AQUÍ QUE VIENE CON LAS NUBES Y TODO OJO LE VERÁ, Y LOS QUE LE TRASPASARON. Apocalipsis 1:7.

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SALMOS

LIBROS POÉTICOS DE LA BIBLIA

 © Carlos Padilla, Mayo 2014

 

La obra del Espíritu Santo a lo largo de la Biblia y su composición, inspiración y orden canónico, parte de una estructura, la cual tiene dos Testamentos, y es en el primero de ellos donde se encuadra el libro, o libros, de Los Salmos. Salmos forma parte de los Libros Poéticos de Israel que sirven para la vida espiritual, y la inspiración para el reino de Dios y de Jesucristo, y por lo tanto para la Iglesia.

Los Salmos siguen la premisa de “La Adoración del Justo”. Es más, Salmos está considerado como el “Himnario inspirado por Dios”, no hay más que leerlos para darse cuenta de esta afirmación. Es toda una colección de himnos, alabanzas y cánticos espirituales que parten del corazón de la vida de Israel, y que son aplicables a la vida del creyente. Existen varios tipos de Salmos, algunos dedicados a la adoración, otros a la alabanza, de lamentación, a la acción de gracias y otros a la didáctica. De ellos tenemos varios himnos famosos. La historia que refleja en mayor parte la riqueza de los Salmos es la vida espiritual del rey David, su adoración a Dios, su devoción por su Dios, la manera en que refleja su corazón puesto en la total confianza y grade fe que tuvo en Él. Historias como la victoria contra el filisteo Goliat, las conquistas de las guerras contra los enemigos de Israel, la unificación del reino de Judá y de Israel, las conquistas de la tierra y la paz y prosperidad obtenida bajo la dirección de Dios, muestran cuan importante es un corazón que ama a Dios.

Toda esta narración histórica que incluye Salmos, ha ayudado a creyentes durante la historia, y nos ayuda en nuestros días a mirar a Dios en alabanza y adoración, en todas nuestras circunstancias, sean favorables o adversas, siempre que confiemos en Dios. Y es que Salmos nos consuela, inspira y alienta en toda circunstancia de la vida, de nuestros sentimientos en cada una de esas vivencias, desde el pecado y el arrepentimiento a la salvación y el servicio a Dios. Nos vemos reflejados en las derrotas y victorias, en las dudas y en la confianza en Dios. Uno de los Salmos que mejor refleja lo refleja dice así:

“Bendice, alma mía, a Yahweh, y bendiga todo mi ser Su santo nombre. Bendice, alma mía, a Yahweh, y no olvides ninguno de Sus beneficios” Salmo 103:1-2.

Además de los varios autores de los cinco libros de los Salmos que expondremos, podremos comprobar como, en su conjunto se trata de uno de los libros más venerados, por judíos y cristianos, independientemente de la denominación. Cada uno de los cinco libros está vinculado a cada uno de los cinco libros del Pentateuco. En el canon hebreo tienen una gran importancia, siendo una de las tres partes en las que se dividía lo que para los cristianos es el Antiguo Testamento.

Jesucristo mismo hace referencia en muchas ocasiones a los Salmos. Pero lo más relevante es como cita Salmos en el período tan importante como Su Pasión durante la Pascua en que entregó Su vida. En el propósito cristológico, Salmos nos expone la vida entera de Jesucristo, desde Su nacimiento, Pasión y hasta el Reino. Posteriormente los apóstoles citarían los Salmos para demostrar que todo estaba escrito y que el Cristo debía padecer y resucitar según estaba escrito de Él en la Ley, en los Profetas y en los Salmos[1].

 

Los Salmos. Título – Autores – Época

Los ciento cincuenta Salmos, divididos en cinco libros, forman parte de los libros poéticos de Israel, y de la Iglesia. Se trata del “Himnario inspirado por Dios” con el propósito divino de proveer al hombre de una expresión espiritual guiada por el Espíritu Santo para la relación personal con Dios en toda circunstancia de la vida.

El nombre “Salmos” se traduce así de la palabra hebrea “Tehillim[2]” que significa “Alabanzas”, como en la Biblia de Ferrara[3] traducida al español del hebreo. En el orden de la Biblia hebrea, Salmos es parte de los Escritos o “Ketubim”. En la Biblia griega “Septuaginta” encontramos que la palabra Salmos viene de “Psalmói”, tomado del hebreo “Mizmoi” que es pulsación o tañido, en referencia al instrumento de cuerda; nada más adecuado para la alabanza, sobre todo si recordamos el harpa del rey David. De igual manera encontramos “Psalmói” en el Nuevo Testamento griego.[4]

Los autores de los Salmos, aunque se suele pensar popularmente que fue solo David su autor, fueron David, Asaf, los Hijos de Coré, Salomón, Hemán Ezraíta, Etán Ezraíta, Moises, y un número de unos cincuenta salmos que son anónimos. David “Amado de Yahweh” de oficio rey, pastor, músico y guerrero (1Samuel 16:18) se le atribuyen setenta y tres Salmos, según los eruditos: 3-9, 11-32, 34-41, 51-65, 68-70, 86, 101, 103, 108-110, 122, 124, 131, 133 (sobre la unción con óleo para la consagración de los sacerdotes en Éxodo y Levítico[5]) , 138-145. Por su parte a Asaf “Colector” de oficio profeta, sacerdote, director del servicio de canto en el tabernáculo en tiempos del rey David (1Crónicas 6:39; 2Crónicas 29:30), se le atribuyen doce Salmos: 50, 73-83. A los Hijos de Coré “Calvo” de oficio sacerdotes, cantantes y músicos, se le atribuyen diez Salmos: 42, 44-49, 84-85, 87. Al rey Salomón “Pacífico” de oficio rey de Israel y sabio, se le atribuyen dos Salmos: 72[6] y 127. A Hemán Ezraíta “Fiel” de oficio sabio (1Reyes 4:31), se le atribuye el Salmo 88. A Etán Ezraíta “Aguante”, de oficio sabio (1Reyes 4:31), se le atribuye el Salmo 89. Y a Moisés “Hijo del Agua” de oficio príncipe, pastor y libertador, se le atribuye el Salmo 90. Los restantes cincuenta Salmos son anónimos: 1-2, 10, 33, 43, 66-67, 71, 91-100, 102, 104-107, 111-121, 123, 125-126, 128-130, 132, 134-137, 146-150.

La época en la que fueron escritos los Salmos abarca aproximadamente mil años, aunque la mayoría de Salmos proceden de los reinados de David y Salomón. Moisés, sobre el 1.400 a.C. escribiría su Salmo 90, y David sobre el 1.000 a.C. Salomón sobre el 950 a.C. Los profetas del exilio y el retorno entre el 722 y el 450 a. C. Lo cual llama la atención porque son todas fechas en las que Israel ha tenido una vivencia intensa de su vida. Con Moisés, el Éxodo, la Ley, la Tierra Prometida. Con los reyes David y Salomón es esplendor de la nación. Y con los profetas del exilio y retorno, entre la tristeza de aquellos que lloraban el esplendor anterior, el Templo, la nación y sobre todo la bendición de Dios, y la alegría por la orden de Dios de bendecir el regreso para edificar los muros y la ciudad de Jerusalén, culminando con la reconstrucción del Templo[7] del Señor. Es en esos Salmos que sentimos el clamor de quienes aman a Dios y a la Tierra Prometida, y en especial a Jerusalén.

 

Tema y Propósito de Los Salmos

Los Salmos tratan de principalmente sobre la adoración del justo de forma íntegra, como seguidor de Dios. Nos muestra cómo adorar a Dios en las distintas circunstancias de la vida, bendiciendo siempre a Dios y buscando Su bendición. Dan ánimo al creyente para sostenerle en las alabanzas a Dios. Los Salmos son la muestra ideal de adoración a Dios desde el alma, el acto mismo de alabar a Dios, sea de forma privada o íntima por la oración, o públicamente con música.

Los Salmos centran la alabanza en el carácter y en las obras de Dios, pero además en una nueva vida de relación personal con Dios. Se trata, de expresar a Dios nuestro agradecimiento por las bendiciones y la comunión con Él en nuestra vida, como en el “Canto de Victoria” del Salmo 18:

Te amo, oh Yahweh, fortaleza mía. Yahweh, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío fortaleza mía, en Él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio. Invocaré a Yahweh, quien es digno de ser alabado, y seré salvo de mis enemigos.” Salmo 18:1-3[8].

 

Tipos de Salmos

Los Salmos del primer libro tienden a ser personales del 1-41. Los del libro II y III del 42-89 son nacionales, y los de los libros IV y V, del 90-150 litúrgicos para la congregación. Esta es la clasificación que hace K.F. Kirkpatrick en su “Cambridge Bible for Schools and Colleages” que a su vez se cita en “Psalms 73-150 del Tyndale Old Testament Commentaries, D.J. Wiseman” como cita Pablo Hoff en sus “Libros Poéticos”[9].

Por grupos, podríamos presentar los Salmos de la siguiente forma: Tipo “Aleluya” sobre Himnos de Adoración, los 106, 111-117, 135, 146-150. Tipo “Todáh” sobre Acción de Gracias, los 16, 18, 100 y 119. Tipo “Didáctico” sobre Enseñanza, los 1, 5, 7, 15, 17, 50, 73, 94 y 101. Tipo “Histórico” sobre Repaso de las Obras de Dios, los 78, 81, 105-106 y 136. Tipo “Penitencial” sobre el Penitente (Arrepentido), los 6, 32, 38, 51, 102, 130 y 143. Tipo “Súplica” sobre Oración, los 86, 90 y 102. Tipo “Mesiánico” Proféticos, los 2, 22-24, 41, 45, 68, 72, 110 y 118. Tipo “Naturaleza” sobre la Creación, los 8, 19, 29, 33, 65 y 104. Tipo “Imprecatorio” sobre Venganza, los 35, 52, 58-59, 69, 83, 94, 109, 137, 139 y 140. Tipo “Teocrático” sobre Himnos al Rey de reyes, los 95 al 100. Tipo “Hal-lel” sobre Alabanza e Himnos para la Pascua, los 113 al 118. Y los tipo “Cánticos Graduales” sobre Peregrinaje, los 120 al 134. De entre ellos el Salmo 114, como Himno de Pascua comienza así:

"Cuando salió Israel de Egipto, la casa de Jacob del pueblo extranjero, 2Judá vino a ser su santuario, e Israel su señorío. 3El mar lo vio, y huyó, el Jordán se volvió atrás."

El Salmo es una poesía que expresa una imagen, ya que así piensan los poetas. El poeta bíblico trata de evitar lo abstracto y que el tipo de verso de paralelismo, típico en la Biblia, nos haga experimentar sensaciones en la relación con Dios, y en el significado emocional con Él. A través de metáforas, palabra griega que significa “transportar” nos presentan la figura de Dios como, por ejemplo, el sol y escudo nuestro, es entonces cuando debemos vivirlo para asimilarlo y sentirlo en nuestra alma.

 

Los Cinco Libros de Los Salmos

El Libro de Los Salmos, se subdivide en cinco libros que podemos clasificar siguiendo la temática del Pentateuco, los cinco primeros libros de La Biblia, atribuidos a Moisés. El libro I (Salmos 1-41 (41)) hace referencia al Génesis, y al ser enfocado desde la persona, comparte el enfoque en el “Hombre”. Trata la Creación y la Caída. Casi todos son de David. El libro II (42-72 (31)), hace referencia a Éxodo y se centra en “Israel”. Trata de la Ruina y la Redención. Compuestos por David y los hijos de Coré.  El libro III (73-89 (17)), hace referencia a Levítico por el “Santuario”. Trata de la Adoración y el Templo. Casi todos son autoría de Asaf. El libro IV (90-106 (17)), hace referencia a Números por el Desierto. Trata del Peligro y la Protección de Dios. Su autoría es casi toda anónima. Y finalmente el libro V (107-150 (44)), hace referencia a Deuteronomio por la “Ley”. Trata de la Alabanza y la Palabra. Casi todos los Salmos aquí son de David.

Finalmente, y en base a la estructura de los cinco libros podemos tratar el tema principal de los Salmos: “La Adoración del Justo” en cada libro con respecto al Pentateuco. El libro I, con base en Génesis nos presenta los Salmos de Adoración de Estima. El libro II con base en Éxodo, nos presenta los Salmos de Adoración de Asombro. El libro III, con base en Levítico, nos presenta los Salmos de Adoración de Ceremonia. El libro IV, con base en Números, nos presenta los Salmos de Adoración de Sumisión. Y, el libro V, con base en Deuteronomio, nos presenta los Salmos de Adoración de Alabanza, la mayoría los llamados Aleluyas y Hal-leles, así como los Cánticos Graduales. Estos, en particular, como dice C.S. Lewis reflejan la perspectiva de que los Salmos han sido compuestos para ser cantados.

           

Profecía de la Pasión de Cristo en Los Salmos

La profecía mesiánica cumplida en la persona de Jesucristo durante Su pasión en la crucifixión en la cruz del Gólgota, aporta además la doctrina de la expiación por el pecado, la redención, y la justicia de Dios ejecutada, y por consiguiente la doctrina de la salvación. Y es, que, el rey David, además de guerrero y fiel siervo de Dios, es conocido por recibir profecía de Dios, la cual vemos en algunos Salmos, es el caso del Salmo 22 sobre el Mesías esperado. Pero no sólo nos presenta la pasión de Cristo, sino Su gloria, por el triunfo de Su obra en la Cruz, la cual nos catapulta al fin de los días y al esperado reino de Dios y de Cristo.

El Salmo 22 comienza con las famosas palabras de Jesús crucificado y clamando al Padre, mencionando la salvación, y la santidad de Dios en el tercer versículo, una doctrina fundamental, pues Dios es santo y ha de ser adorado exclusivamente por el hombre, dejando de lado toda idolatría, viviendo una vida en obediencia a Su santa Palabra, la cual incluye la Ley y la Gracia.

Un resumen de los versículos del Salmo 22, además de la Pasión de Cristo, desarrolla las doctrinas fundamentales de la Biblia: Versículos 1y2: Justicia de Dios que castiga el pecado. En Su Hijo carga el pecado de todos. Esta doctrina es fundamental, pues un Dios justo ha de hacer pagar el pago del pecado, y es en el sacrificio de Su Hijo Jesucristo donde nos fijamos, ya el propio Señor, estando en la Cruz, menciona estas palabras.

...1Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor? 2Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y de noche, y no hay para mí reposo. 3Pero tú eres santo, tú que habitas entre las alabanzas de Israel…

Versículos del 6-10: Profecía cumplida en Cristo, sobre Su abandono y desprecio sufridos, siendo que ni el pueblo de Israel ni los gentiles le recibieron inicialmente. Pero hay más dentro de la doctrina profética, y es que una Palabra que es verdadera profecía de parte de Dios creador del cielo y de la tierra, es la mejor evidencia para demostrar que lo es. El versículo 10 trata sobre el nacimiento virginal de Cristo por obra del Espíritu Santo, como proyecto de Dios para enviar a Su Hijo al mundo para salvarnos. Versículos 14y15: Profecía sobre la pasión, crucifixión y muerte del Mesías anunciado casi un milenio antes de que sucediese. Enlaza en el primer versículo. Versículo 21: La victoria de Cristo sobre el pecado tras Su resurrección augura Su segunda venida para reinar. La doctrina de la segunda venida. Versículo 22 trata sobre la doctrina de la Gran Comisión para proclamar el Evangelio a las naciones y la alabanza de la Iglesia en comunidad.

 

10Sobre ti fui echado desde antes de nacer; desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios… …14He sido derramado como aguas, y todos mis huesos se descoyuntaron; mi corazón fue como cera, derritiéndose en medio de mis entrañas. 15Como un tiesto se secó mi vigor, y mi lengua se pegó a mi paladar, y me has puesto en el polvo de la muerte. 16Porque perros me han rodeado; me ha cercado cuadrilla de malignos; horadaron mis manos y mis pies. 17 Contar puedo todos mis huesos; entre tanto, ellos me miran y me observan. 18Repartieron entre sí mis vestidos, y sobre mi ropa echaron suertes… …22Anunciaré tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregación te alabaré.

 

Versículo 25: Habla el Espíritu Santo –doctrina de la Trinidad– sobre las glorias del reino. Como vemos el proyecto de Dios se lleva a cabo por medio de las tres personas de la Trinidad. El versículo 26 trata de la caridad cristiana y de la esperanza de los que confían en Dios. Además trata del tema de vivir para siempre, la doctrina de la salvación para vida eterna. El 27 trata de la doctrina de la universalidad del Evangelio, pues de todas las naciones vendrán y le adorarán. Porque, como dice el versículo 28 de Yahweh es el Reino y de Su Hijo Jesucristo. En el Reino caben las doctrinas del Reino eterno y del Reino milenario de Cristo, y no hay contradicción en ello. Versículo 31: El Salmo 22 cierra con la séptima palabra de Cristo en la Cruz: “consumado es” o lo que es lo mismo, que “Él hizo todo” todo lo narrado en el Salmo y más, lo cual nos presenta la divinidad del Hijo, como Creador.

  

...26Comerán los humildes, y serán saciados; Alabarán a Yahweh los que le buscan; vivirá vuestro corazón para siempre. 27Se acordarán, y se volverán a Yahweh todos los confines de la tierra, y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti. 28Porque de Yahweh es el reino, y él regirá las naciones.[10]

Realmente el Salmo 22 es muy completo doctrinalmente, proféticamente y el Espíritu Santo, pero en el Nuevo Testamento se habla de bautismo, de inmersión en el Espíritu de Dios.

 

Conclusión

El “Salterio” o colección de Salmos que hemos disfrutado durante esta exposición sobre su origen, propósito, autoría, temática e historia, son el mejor reflejo Bíblico de cómo Dios trata con Su Creación, desde el Hombre hasta lo más insignificante. Esta perspectiva cautiva el corazón del creyente y lo encamina a convertirse en un discípulo, en parte de la esposa del Esposo para las bodas del Cordero, Apocalipsis 19:9 y 22:17.

Salmos muestra los atributos de Dios en todo Su esplendor, su omnipotencia, omnipresencia, omnisciencia, misericordia y gran amor por el hombre. Muestra la relación de Dios con la Creación, y el propósito sublime de la naturaleza para reflejar la grandeza y la gloria del Creador. Muestra la relación de Dios con el hombre y el espíritu inmortal que Dios nos ha dado, y cómo Dios elije a los que ama en Su soberanía. Aunque pecadores Dios nos puede redimir y salvar para la eternidad y hacernos a Su imagen y semejanza espiritualmente, también. Las naciones vendrán y Le alabarán. El Salmo 67:5 y 6 habla de que Dios es Padre de huérfanos y de viudas, que hace habitar en familia a los desamparados y saca a los cautivos a prosperidad. Salmos, muestra la vida de ultratumba, la esperanza de la resurrección y la gloria del Mesías que vendrá a salvar a los que aman a Dios para el reino venidero. Además, Salmos trata el problema doctrinal del mal, la caída del hombre en pecado y las consecuencias de vivir apartados de Dios.

Finalmente hay que destacar que Salmos tiene tres propósitos: El Histórico por servir de himnario de adoración en el Templo judío en el calendario anual. El Doctrinal incluyendo todas y cada una de las doctrinas Bíblicas, primeramente Dios y las que son para la vida del creyente. Y el Propósito Cristológico que hemos visto desarrollado, en especial, en el Salmo 22 sobre la Pasión de Cristo. Pero no sólo se expone la Pasión en los Salmos, sino el nacimiento en el 104:4; la humillación en el 8:4; la Deidad en el 45:6; el ministerio en el 69:9; el rechazo en el 118:22; la traición en el 41:19; la crucifixión en el 22; la resurrección en el 22:16; la ascensión en el 68:18 y finalmente el reino en el 102:26. El grupo de doctrinas que encontramos en los Salmos y que hemos visto que comienza con la muerte expiatoria del Mesías prometido, por los pecados de la humanidad, continúa, a través de la propia vida del Hijo de Dios,[11] con las doctrinas de: Dios, La Biblia, Jesucristo, Espíritu Santo, Amor de Dios, Salvación, Pecado, Evangelio, Iglesia, Santidad, Israel, Vuelta de Cristo, Juicio Final, Cielo e Infierno, Vida Eterna, Reino de Dios.

Ciertamente Salmos es una verdadera joya celestial revelada al hombre que ama a Dios y Le alaba con todo su corazón, con toda su alma, con toda su mente, y con todas sus fuerzas. Sea el Salmo 23 el que nos sirva de referencia y cierre:

"1Yahweh es mi pastor; nada me faltará.

2En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará.

3Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicias por amor de Su Nombre.

5Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque Tú estarás conmigo; Tu vara y Tu cayado me infundirán aliento.

5Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.

6Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Yahweh moraré por largos días. Amén"

 


 


 

REFERENCIAS

 

[1]Santa Biblia. Versión Reina-Valera 1960. Salmos.

[2] Archer, Gleason L. Reseña Crítica de una Introducción al Antiguo Testamento.

Michigan. EE.UU., Editorial Portavoz, 1981. Pág. 483.

[3]Biblia de Ferrara (hebrea traducida al español). Madrid. Fundación José Antonio Castro, 2004. Pág. 925.

[4]Lacueva, Francisco. Nuevo Testamento Interlineal Griego-Español. Viladecavals, Barcelona. Editorial Clie, 1984. Lucas 24:44. Pág. 354.

[5]Hoff, Pablo. El Pentateuco. Editorial Vida, 1978. Pág. 182.

[6]Keil, Carl Frederich, y Franz Delitzsch. Comentario al Texto Hebreo del Antiguo Testamento. (Viladecavalls, Barelona. Editorial Clie, 2008). Pág. 938.

[7]Vila Ventura, Samuel. S. Escuain. Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado. (Terrasa. Barcelona. Editorial Clie, 1985). 1124.

[8]Santa Biblia. Versión Reina-Valera 1960. Salmo 18.

[9]Hoff, Pablo. Libros Poéticos. Miami, EE.UU. Editorial Vida, 1998. Pag. 139.

[10]Santa Biblia. Versión Reina-Valera 1960. Salmo 22.

[11]MacDonald, William. Comentario Bíblico del Antiguo Testamento. Barcelona, España. Clie, 2004. Pag. 246.

 

 

BIBLIOGRAFÍA 

Santa Biblia. Versión Reina-Valera 1960. Sociedades Bíblicas Unidas

Biblia de Ferrara (hebrea traducida al español). Madrid. Fundación José Antonio Castro, 2004

MacDonald, William. Comentario Bíblico del Antiguo Testamento. Barcelona, España. Clie, 2004

Hoff, Pablo. Libros Poéticos. Miami, EE.UU. Editorial Vida, 1998

Lacueva, Francisco. Nuevo Testamento Interlineal Griego-Español. Viladecavals, Barcelona. Editorial Clie, 1984

Vila Ventura, Samuel. S. Escuain. Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado. Terrasa. Barcelona. Editorial Clie, 1985

Archer, Gleason L. Reseña Crítica de una Introducción al Antiguo Testamento. Michigan. EE.UU., Editorial Portavoz, 1981

Hoff, Pablo. El Pentateuco. Editorial Vida, 1978

Keil, Carl Frederich, y Franz Delitzsch. Comentario al Texto Hebreo del Antiguo Testamento. Viladecavalls, Barelona. Editorial Clie, 2008

 

 

 

  • Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y llamárase su nombre: Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz. Profecía de Isaías 9:6.


  • Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi. Palabras de Jesucristo. Evangelio de Juan 14:6.
  • Ud. quiere conocer a Dios, pero sabe que el camino no es por las religiones, ni por las sectas, ni por la sociedad. El mundo, sin Dios, ha fracasado. ...Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son... Juan 17:9. Oración de Jesús.


  • Si de verdad busca Ud. a Dios, comience hoy una nueva vida, de la verdadera mano de Dios. El Evangelio es el mensaje para todas las naciones, sin importar la raza, la procedencia ni la cultura. Dios es el Salvador de aquellas personas que le abren su corazón y se arrepienten de vivir sin El.


  • ...Así que hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. 1Corintios 15:58.

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