EL EVANGELIO DIGITAL

Y LA LUCHA POR LA VERDAD

© Carlos Padilla – Enero 2022 

En estos días, tras 25 años de andadura escribiendo esta web – Jesucristo.net – estaba pensando en lo rápido que podemos comunicar cualquier noticia. Hoy es tan sencillo como enviar un mensaje y comunicar cualquier noticia en una red social, páginas web, periódicos digitales, radio, o TV, y queda informado en tiempo real. Sin embargo, cuando en la antigüedad había que comunicar algo, un correo era una persona andando, a caballo o en barco, que debía recorrer largas distancias, muchas veces durante días, o semanas y esperar que fuese creído el comunicado, y en su caso, esperar a recibir una respuesta y volver a entregarla. El problema es que hoy la verdad está tan manipulada que el mensaje llega, pero tenemos que hacer un análisis de inteligencia antes de aceptarlo. El mundo de la comunicación de toda índole, noticias, escuelas y medios se ha convertido en el último campo de batalla por dominar la mente y el pensamiento del mundo, se ha convertido en la lucha por la verdad.

EVANGELIO DIGITAL

La sinagoga, la iglesia, el areópago, la plaza del pueblo, eran lugares de comunicación. Pero llevar un mensaje era difícil, hasta que el siglo XX tras la invención de la radio por Marconi, y posteriormente la TV. La imprenta de Gutenberg en el siglo XVI hacía que los mensajes llegaran a más gente, y de forma más ordenada, pero todavía no con rapidez. En tiempos de Moisés y de Israel en las doce tribus, si había un mensaje urgente, o una emergencia, tenían que correr o cabalgar a la otra tribu para pedir ayuda, y a veces llegaban demasiado tarde. Los viajes al mundo conocido existían, pero eran lentos e incómodos, y no fue hasta Roma que se hicieron las calzadas, que junto a los barcos ayudaron a la comunicación. Hoy, desde Internet a finales del siglo XX comunicamos en tiempo real, y lo puede hacer cualquier persona, no es necesario esperar a que un medio reconocido lo haga. El problema es la fidelidad de la verdad de una noticia, que hoy ni está garantizada ni por los medios de reputación, cada vez más polarizados. Por ello, no hay nada como que nos cuenten de primera mano, que nos muestren en tiempo real lo que está ocurriendo.

Nada sustituye a la comunicación presencial, personas hablando unas con otras. Y también sabemos que nada sustituye la inmediatez y amplitud de información que provee Internet y las redes sociales. En el cristianismo de las dos últimas décadas, muchos anulaban el Evangelio por Internet, incluso los seminarios teológicos que antes criticaban Internet, si quieren sobrevivir, hoy ofrecen las clases online, al igual que ofrece cualquier universidad, salvo aquellos estudios que necesitan de práctica presencial.

La cuestión es que el mensaje se ha de transmitir aunque sea en medios no habituales, y un magnífico ejemplo fueron los apóstoles. La clave es que el mensaje sea fidedigno. El apóstol Pablo, como leemos en Hechos 9:20 se esfuerza por convencer de su cambio de fe a los que le temían. Cambia su mensaje radicalmente, al convertirse desde ser perseguidor de cristianos, a ser el apóstol de Jesucristo a los gentiles. En Hechos 11, Pedro da un informe a la iglesia de Jerusalén de que fue a los gentiles y que estos también recibían al Señor, se esforzaba porque creyeran este cambio, esta noticia sorprendente para los «de la circuncisión».

Otra cuestión muy relevante era, ¿Cómo sabían los hermanos dónde estaba Pablo u otros hermanos en aquellos tiempos? ¿Informaban Pablo y otros a los de las sinagogas y casas iglesias, a dónde iban, para poder ser encontrados? Hechos 18:5. Hoy no hace falta porque enviamos un mensaje desde el móvil, un e-mail o una llamada, y basta para organizarse, comunicar una noticia o coordinar una misión, así como también hace el mundo secular, y de qué forma.

LUCHANDO POR LA VERDAD

Como cristianos, no solo somos responsables de que el mensaje, la noticia, el Evangelio que predicamos llegue, sino de que lo hagamos con fidelidad a las Escrituras, a la Palabra de Dios. El medio que usemos no es lo que importa, sino que sea el mensaje de Jesucristo, porque solo ese Mensaje cambia vidas para salvación y vida eterna.

El Evangelio es el evangelio. Sea por vía personal, en la Biblia o por internet, es la Palabra de Dios y tiene el poder de salvar a quien lo cree. También se puede tergiversar de forma personal o digital, y por libros, incluso alguna secta ha modificado su propia biblia para quitar, cambiar o añadir lo que quieren adoctrinar. Ya sabemos qué personaje engañador maligno hay detrás. El mundo, al igual que empezó con el engaño de la serpiente a Adán y Eva, está llegando a su fin con el engaño de la sociedad por todos los medios de comunicación. Esto viene desde el principio en el árbol de Edén, “Génesis 3”, porque el diablo miente desde el principio, manipula y esconde la verdad, o la utiliza de forma parcial para engañar. Así, hoy, vemos como hacen lo mismo en muchas de las noticias, incluso se está cambiado el significado de las palabras a propósito.

La película reciente “Don´t Look Up” (No Mires Arriba) expone a la perfección como los medios distorsionan la verdad, y cómo la sociedad ha perdido el norte y el sentido común, anteponiendo vanidades a lo que verdaderamente importa, pero a la película le falta el mensaje de esperanza cristiano: la resurrección y el reino de Dios. Se habla en estos tiempos de un conglomerado que controla más del 90% de los medios de comunicación influye a nivel ideológico y geopolítico, creando confusión de conceptos y significados en el lenguaje, cambiando lo que el mundo percibe; una estrategia que unida a lo que hoy enseñan a nuestros hijos sobre historia, de forma muy distorsionada, consigue una confusión plena. Se trata de hacer un uso partidario de la verdad en algunos casos, similar a la historia del Huerto de Edén, o directamente de inventar o engañar en beneficio propio. Otro de sus actuales empujes es el ataque directo a todo el que no está en el bando evolucionista, mofándose de quien estudia los distintos modelos científicos de los orígenes: naturalismo, creacionismo y diseño inteligente, aunque quienes los estudien o enseñen sean reputados científicos. Cada vez cuesta más encontrar medios libres y no influidos, en todos los ámbitos de la información, sean noticias, historia, ciencia, religión, vida social, etc.

Podríamos terminar esta exposición recordando que la Biblia, en sus profecías nos alerta de un tiempo final, que entre otras, destaca por estas características: el engaño del hombre, y la oposición a Dios en todas las esferas sociales, algo que el Texto Bíblico nos expone con claridad:

“Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios. ¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía con vosotros, os decía esto? Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se manifieste. Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; solo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, 10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.” 2 Tesalonicenses 2:3-10.

 

CONCLUSIÓN

Muchos han intentado tergiversar el evangelio entre personas, por medio de libros y medios impresos o digitales, como internet. Algunos grupos cristianos, incluso lo hacen sin ser conscientes, debido a que anteponen sus tradiciones a la verdad de la Biblia, lo cual ya denunció el propio Señor Jesucristo a los escribas y fariseos en Mateo 15:6b:  “Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición”. Pero el espíritu de la Reforma, “Sola Escritura” nos guía a no tener otra autoridad en materia de fe que las Sagradas Escrituras. La Biblia y su correcta interpretación desde el prisma del Nuevo Testamento de nuestro Señor Jesucristo es la garantía de la Verdad, la de Dios, porque por Su Espíritu nos mantiene en la Verdad. La Verdad es la Buena Noticia.

La buena noticia, la gran noticia sigue siendo Jesucristo, Su obra salvadora, la resurrección y Su venida en Su reino, es decir, El Evangelio, ya sea digital, impreso o predicado en persona. Podemos usar cualquier medio, pero es fundamental hablar a la persona que tenemos a nuestro lado. Los medios a nuestro alcance nos permiten llegar al mundo de todas las maneras posibles en que cada uno puede recibir el mensaje, ese que podemos resumir en las palabras del apóstol Pablo a los atenienses en su discurso en el Areópago de Atenas, ante los filósofos griegos en Hechos 17:26-31:

“Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación; para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos. Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres. Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.”

El Evangelio digital es solo un medio más de transmitir la Verdad. Lo que realmente importa es que sea la Verdad, que luchemos por transmitir la Verdad de nuestro Señor Jesucristo, porque Jesucristo es la Verdad “Juan 14:6”, y la Verdad nos hará libres, “Juan 8:31-38”. Amén.