JESUCRISTO   LA RESURRECCIÓN VIENE. HE AQUÍ QUE VIENE CON LAS NUBES Y TODO OJO LE VERÁ, Y LOS QUE LE TRASPASARON. Apocalipsis 1:7.

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EZEQUIEL

EL SACERDOTE PROFETA - PRIMERA PARTE

JUICIOS Y ESPERANZA DE RESTAURACIÓN PARA JUDÍOS Y GENTILES

Ezequiel, nuestro hermano, sacerdote del Señor Yahweh, nuestro Dios. Llamado para ser profeta, uno de los cuatro profetas mayores, a través de una visión de la gloria de Dios, algo que es común a todos aquellos que han de servir al pueblo del Israel de Dios, ese pueblo que incluye a Judíos y a Gentiles de todas las naciones, los que se bautizan, sumergiéndose en un proceso de arrepentimiento o cambio de mente en el Mesías Yahshua, para redirigir el camino de sus vidas, y caminar de la mano de Dios para que nos sumerja o bautice Él en su Espíritu Santo.

El hecho de que haya cuatro profetas mayores es al A.T. lo que los cuatro Evangelios al N.T. son los cuatro puntos cardinales y los cuatro vientos, espirituales y también los cuatro seres vivientes, los cuatro querubines, las cuatro ruedas de la gloria de Dios. Cuatro, simboliza la estabilidad de un proyecto, en este caso la estabilidad de Dios, de su proyecto triunfal para con el hombre, y para con Su creación.

Del mismo modo que Ezequiel, cada Cristiano que nace de nuevo de lo alto, cada alma que recibe la fe y el amor de Dios y cambia su vida, se convierte en sacerdote y en profeta. En sacerdote porque Cristo compra con su propia sangre una nación de reyes y sacerdotes para Dios su Padre, ofreciendo sus vidas por los hermanos, Gálatas 6:2 y 1Juan 3:16, y de profetas porque no hay mayor profecía que el Evangelio de Cristo que vino del Padre, murió en la cruz por todos, resucitó venciendo a la muerte y otorgándonos resurrección de vida eterna a todos los que creen que es el Hijo de Dios, que ahora vive de nuevo en el trono del Padre en el cielo y en nuestra alma, del cual todos los discípulos de Cristo damos testimonio, de que vive, que vendrá y establecerá Su reino eterno y todo ojo Le verá.

La labor de Ezequiel es una labor común a todos los demás profetas, como su contemporáneo Jeremías. Su ministerio está marcado por la muerte de su esposa, que simboliza la Iglesia de Cristo, el pueblo de Israel cuando no sigue a Dios, aunque Él la ama y la reconquista, porque Dios es el Esposo, pero un esposo especial, el esposo espiritual y eterno del alma humana.

Este libro del profeta Ezequiel se basa en cuatro pilares fundamentales: el llamamiento de Ezequiel desde su sacerdocio para dejarlo y convertirse en profeta; el juicio sobre Judá anticipado con señales y mensajes antes, y durante el cautiverio en Babilonia, del mismo modo que Jeremías advierte a Israel antes del asedio Asirio, ya que esta época era cuando Israel se hallaba dividida en dos reinos: Judá e Israel; seguido del juicio de siete naciones gentiles, Ammón, Moab, Edom, Filistea, Tiro, Sidón y Egipto, todas ellas con las que ha tratado Israel durante la historia; naciones de la época que simbolizan todas las naciones del mundo, cada una de ellas simboliza una cualidad de la civilización gentil, el mundo, del mismo modo que hoy vemos el G7; antes también había un G7, por decirlo en términos de nuestro tiempo.

Finalmente como cuarto pilar encontramos la restauración de Israel como anuncio de la reunión de los dos reinos, de nuevo en uno, simbolizada en la parábola del valle de los huesos secos, y posteriormente el regreso a la tierra de Israel, lo cual se cumplió ya la primera vez antes de Cristo, y en 1948 en nuestra era, y el regreso a Jerusalén con la construcción del templo y sus ordenanzas, que también se cumplió con el templo de Herodes; pero ésta es una cuestión que habría de ser espiritual, en el alma del hombre, lo cual vino a anunciar el Mesías, pero el pueblo Judío sigue en la esperanza de la construcción del templo y sus ordenanzas descrito desde el Cap. 40. En esta ultima parte de Ezequiel donde se describe el templo encontramos muchas coincidencias con la descripción narrada en Apocalipsis, que veremos comparada en la ultima parte de este estudio sobre este fascinante libro del Señor, que en este estudio Bíblico es presentado en tres partes: esta primera parte engloba el llamamiento de Ezequiel y su primera labor de profeta sobre Judá en el cautiverio babilónico, símbolo de la esclavitud al culto mundano, del cual Dios quiere librar a cada hombre para que libremente pueda tener una relación de amistad y amor personal con su Salvador Jesucristo, el Camino al Padre.

 

EZEQUIEL CAPÍTULO 1

Ezequiel ve la gloria de Dios

1Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios. 2En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes, 3vino palabra de Yahweh al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Yahweh.

Ezequiel ve visiones de Dios. Viene sobre él la mano de Yahweh para  mostrarle en espíritu Sus cualidades. Esto le ocurre a Ezequiel estando en medio de los cautivos, donde siempre el Señor envía un siervo suyo para que sea luz a Su pueblo. En este punto conviene hacer una advertencia a la mente del lector, algo que sin duda le costará, y es que procure no hacerse una imagen de Dios con la descripción, sino de entender las cualidades descritas, las cuales trataré de mostrar en este texto espiritual para la edificación de la Iglesia.

4Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un fuego envolvente, y alrededor de él un resplandor, y en medio del fuego algo que parecía como bronce refulgente, 5y en medio de ella la figura de cuatro seres vivientes. Y esta era su apariencia: había en ellos semejanza de hombre. 6Cada uno tenía cuatro caras y cuatro alas.

Venía del norte, lo cual al igual que es el punto cardinal de referencia, simboliza que viene de la referencia y el poder y el gobierno de Dios. Una gran nube como la presencia de Dios en el desierto, con un fuego envolvente, el fuego es el Espíritu de Dios que todo lo envuelve y quema aquello que es inmundo en el hombre. Un resplandor a Su alrededor, debido a la luz que emana el Señor cuando viene a nuestras vidas, las cuales de las tinieblas y la incertidumbre, pasan a la luz y la verdad. En medio bronce refulgente, metal brillante y santo usado en los utensilios del templo, simboliza el Lugar Santo, la intimidad con Dios donde encontramos al igual que en Apocalipsis 4 y 19 a cuatro seres vivientes en la intimidad de Dios, los cuatro puntos cardinales espirituales del alma. Semejantes a hombre, pues son ángeles y espíritus, cada uno tiene cuatro caras pues han de controlar no solo su posición sino la de los otros tres, todos dependen de todos y su equilibrio y acción es conjunta y parte del proyecto de Dios. Además tienen cada uno cuatro alas para volar en los cuatro vientos espirituales que son las ordenes de Dios que domina los tiempos y los acontecimientos en el cielo y en la tierra.

7Y los pies de ellos eran derechos, y la planta de sus pies como planta de pie de becerro; y centelleaban a manera de bronce muy bruñido. 8Debajo de sus alas, a sus cuatro lados, tenían manos de hombre; y sus caras y sus alas por los cuatro lados. 9Con las alas se juntaban el uno al otro. No se volvían cuando andaban, sino que cada uno caminaba derecho hacia adelante. 10Y el aspecto de sus caras era cara de hombre, y cara de león al lado derecho de los cuatro, y cara de buey a la izquierda en los cuatro; asimismo había en los cuatro cara de águila. 11Así eran sus caras. Y tenían sus alas extendidas por encima, cada uno dos, las cuales se juntaban; y las otras dos cubrían sus cuerpos. 12Y cada uno caminaba derecho hacia adelante; hacia donde el espíritu les movía que anduviesen, andaban; y cuando andaban, no se volvían. 13Cuanto a la semejanza de los seres vivientes, su aspecto era como de carbones de fuego encendidos, como visión de hachones encendidos que andaba entre los seres vivientes; y el fuego resplandecía, y del fuego salían relámpagos. 14Y los seres vivientes corrían y volvían a semejanza de relámpagos.

Sus pies eran derechos, esto significa que pisan en firme que el camino que camina Dios es un camino de poder, de autoridad y de verdad. La planta de sus pies como planta de pie de becerro, el cual se usaba en el sacrificio de santificación del templo, esto es que Dios santifica todo lo que desarrolla y sus caminos son santidad, donde Él está es tierra santa, lo cual dijo a Moisés; pies brillantes como bronce reluciente de nuevo una mención a que lo que emprende en Su camino es comparable a la santidad del sacrificio por el pecado, lo cual significa la misericordia en la obra de Su Hijo Jesucristo. El andar de Dios es un andar de amor hacia sus criaturas, su proyecto es uno que culmina en un reino nuevo de paz y amor de Dios. El relámpago desde su punto de salida emana luz hasta su punto de llegada, pero no deja de haber luz en todo el trayecto y en ambos puntos, el del origen y el de llegada: es una corriente continua.

15Mientras yo miraba los seres vivientes, he aquí una rueda sobre la tierra junto a los seres vivientes, a los cuatro lados. 16El aspecto de las ruedas y su obra era semejante al color del crisólito. Y las cuatro tenían una misma semejanza; su apariencia y su obra eran como rueda en medio de rueda. 17Cuando andaban, se movían hacia sus cuatro costados; no se volvían cuando andaban. 18Y sus aros eran altos y espantosos, y llenos de ojos alrededor en las cuatro. 19Y cuando los seres vivientes andaban, las ruedas andaban junto a ellos; y cuando los seres vivientes se levantaban de la tierra, las ruedas se levantaban. 20Hacia donde el espíritu les movía que anduviesen, andaban; hacia donde les movía el espíritu que anduviesen, las ruedas también se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los seres vivientes estaba en las ruedas. 21Cuando ellos andaban, andaban ellas, y cuando ellos se paraban, se paraban ellas; asimismo cuando se levantaban de la tierra, las ruedas se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los seres vivientes estaba en las ruedas. 22Y sobre las cabezas de los seres vivientes aparecía una expansión a manera de cristal maravilloso, extendido encima sobre sus cabezas.

Las ruedas junto a cada uno de los cuatro seres vivientes, una a cada lado y parecían como rueda en medio de rueda, es el movimiento de la historia, el tiempo dentro del cual Dios ha limitado a su creación. Estas ruedas van en las cuatro direcciones, para que todo lo que acontece afecte por igual a todo lo que existe; es un equilibrio universal. Rueda dentro de rueda es tiempos dentro del tiempo, los tiempos espirituales de cada persona, de cada época, los cuales se entrelazan unos con otros. Al levantarse de la tierra, nos muestra que en el aire, en el cielo o región espiritual, lo que ocurre está vinculado a lo que ocurre en la tierra y viceversa. Y lo que yo hago y a mi me afecta, le afecta a Ud. y viceversa. Todo tiene una consecuencia. En el campo espiritual, las oraciones suyas me afectan a mi, y viceversa, sus obras espirituales me afectan a mi, a mis hermanos, a mi iglesia y viceversa. Sus aros altos denotan la grandeza del movimiento y los muchos ojos, reflejan que Dios todo lo ve, que está en todas partes haciendo gala de uno de sus dones, la ubicuidad.

23Y debajo de la expansión las alas de ellos estaban derechas, extendiéndose la una hacia la otra; y cada uno tenía dos alas que cubrían su cuerpo. 24Y oí el sonido de sus alas cuando andaban, como sonido de muchas aguas, como la voz del Omnipotente, como ruido de muchedumbre, como el ruido de un ejército. Cuando se paraban, bajaban sus alas. 25Y cuando se paraban y bajaban sus alas, se oía una voz de arriba de la expansión que había sobre sus cabezas. 26Y sobre la expansión que había sobre sus cabezas se veía la figura de un trono que parecía de piedra de zafiro; y sobre la figura del trono había una semejanza que parecía de hombre sentado sobre él. 27Y vi apariencia como de bronce refulgente, como apariencia de fuego dentro de ella en derredor, desde el aspecto de sus lomos para arriba; y desde sus lomos para abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor. 28Como parece el arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el parecer del resplandor alrededor. Esta fue la visión de la semejanza de la gloria de Yahweh. Y cuando yo la vi, me postré sobre mi rostro, y oí la voz de uno que hablaba.

La expansión sobre sus cabezas es la diferenciación entre estos cuatro seres vivientes y el trono de Dios, que aunque ésta sea la gloria de Dios, la que nos describe Él mismo, hay diferencia entre Su gloria y Él mismo. Debajo los cuatro seres cubren sus cuerpos con dos alas, lo cual claramente es un reflejo de cuerpo de ángeles, y con otras dos se mantienen en el aire, esto es en la presencia de Dios. El sonido de sus alas está ligado a la voz del Omnipotente, y según se paren o anden se oye la voz que viene de arriba de la expansión, del trono de zafiro, procedente del Hombre sentado en el trono, lo que nos muestra que todo lo que hemos visto descrito está gobernado por Dios desde Su trono. Su apariencia, descrita por muchos profetas es como fuego, luz que emana, brillante con resplandor alrededor de un arco iris, esto es que Él es la luz, como Cristo dice: ...Yo soy la luz... y el arco iris representa los siete espíritus de Dios de los que está compuesta la luz, igual que el arco iris está compuesto de siete colores. Cada color representa un tiempo espiritual de la relación de Dios con el hombre. Siete es el número completo de la perfección en las obras de Dios, por lo que Él mismo se describe y existe completo.

Recuerde que el propósito de Dios cuando da una descripción no es el de hacernos imagen del diseño que nos ha dado, sino el de aprender Sus cualidades, que sepamos que en todo lo que existe, todo lo que ocurre, todo lo que se desarrolla, en el cielo y en la tierra, en la vida de cada uno de nosotros, y fuera de nosotros, lo que vemos y lo que no vemos, lo que pasa en el universo, o a miles de Km. de nosotros, todo está controlado por la gloria de Dios omnipotente.

 

CAPÍTULO 2

MINISTERIO DE EZEQUIEL

1Me dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y hablaré contigo. 2Y luego que me habló, entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y oí al que me hablaba. 3Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día. 4Yo, pues, te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así ha dicho Yahweh el Señor. 5Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre conocerán que hubo profeta entre ellos. 6Y tú, hijo de hombre, no les temas, ni tengas miedo de sus palabras, aunque te hallas entre zarzas y espinos, y moras con escorpiones; no tengas miedo de sus palabras, ni temas delante de ellos, porque son casa rebelde. 7Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy rebeldes.

Enviado por la Palabra de Dios a Israel. El Señor le habla a Ezequiel y el Espíritu de Dios entró en él, acción esta la cual ocurre a los profetas antes de ver u oír el mensaje del Señor, sin embargo en el tiempo del N.T. el Espíritu Santo bautiza, sumerge al creyente en Su esencia, por la fe y el conocimiento de Cristo.

8Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy. 9Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro. 10Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito por delante y por detrás; y había escritas en él endechas y lamentaciones y ayes.

El ministerio que se le encarga a Ezequiel es un ministerio poco agradable de cumplir, el de ir a los hijos de Israel, a "gentes rebeldes que se rebelaron contra mí", escuchen o no el mensaje, de modo que no tengan excusa de que Dios no les advirtió nunca. El mismo caso veremos en otra sección del libro con los gentiles de todas las naciones. Esta dureza, es una mala cualidad del hombre sin Dios. Instruye el Señor a Ezequiel a comer lo que Dios le da; lo que recuerda las palabras de Jesús cuando sus discípulos le instaban a comer y contestó que Él tenía otra comida que comer, todo lo que sale de la boca de Dios.

 

CAPÍTULO 3

1Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa de Israel. 2Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo. 3Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel. 4Luego me dijo: Hijo de hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras. 5Porque no eres enviado a pueblo de habla profunda ni de lengua difícil, sino a la casa de Israel. 6No a muchos pueblos de habla profunda ni de lengua difícil, cuyas palabras no entiendas; y si a ellos te enviara, ellos te oyeran. 7Mas la casa de Israel no te querrá oír, porque no me quiere oír a mí; porque toda la casa de Israel es dura de frente y obstinada de corazón.

Instrucciones de su ministerio. Come lo que hallas en este rollo, este libro; comer es asimilar con nuestra mente y grabar la orden en nuestro espíritu para cumplirla. A continuación Dios le explica a Ezequiel y hoy a cualquiera de nosotros, que la casa de Israel entonces y la Iglesia hoy, son pueblo de fácil habla, pero que si nos enviase a naciones de difícil habla ellos oirían la Palabra, pero no lo hace Israel, ni tampoco lo hace la Iglesia tantas veces, ni el creyente individualmente, obedece lo que Dios dice, tantas otras.

8He aquí yo he hecho tu rostro fuerte contra los rostros de ellos, y tu frente fuerte contra sus frentes. 9Como diamante, más fuerte que pedernal he hecho tu frente; no los temas, ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa rebelde. 10Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras que yo te hablaré, y oye con tus oídos. 11Y ve y entra a los cautivos, a los hijos de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor; escuchen, o dejen de escuchar.

La fortaleza de la frente de Ezequiel a la que el Señor se refiere, es al don de la mente de Cristo que recibe el creyente, una mente que ya no duda en su camino, que conoce al Padre y confía en Él, dura como el diamante es una cualidad de pureza inamovible en la fe, además de la obediencia y la creencia en el Evangelio, el mensaje del Señor para todos, o de las instrucciones de un ministerio como es el caso de Ezequiel.

12Y me levantó el Espíritu, y oí detrás de mí una voz de gran estruendo, que decía: Bendita sea la gloria de Yahweh desde su lugar. 13Oí también el sonido de las alas de los seres vivientes que se juntaban la una con la otra, y el sonido de las ruedas delante de ellos, y sonido de gran estruendo. 14Me levantó, pues, el Espíritu, y me tomó; y fui en amargura, en la indignación de mi espíritu, pero la mano de Yahweh era fuerte sobre mí. 15Y vine a los cautivos en Tel-abib, que moraban junto al río Quebar, y me senté donde ellos estaban sentados, y allí permanecí siete días atónito entre ellos.

A continuación el Espíritu le levanta y oye la voz de la presencia de la gloria de Dios que va con Él, esta es la confirmación de que cuando vamos de parte del Señor, como embajadores, apóstoles o enviados, el Señor mismo nos acompaña y nos pide que pongamos en nuestros corazones todas las palabras que nos hable y que escuchemos con nuestros oídos, oídos del espíritu, no de la carne que olvidan, y que grabemos en nuestra alma, por la mente sus palabras, porque la Palabra de Dios es Cristo.

Ezequiel entra en amargura e indignación por la situación de rebeldía del pueblo, sus hermanos, y porque debe traer noticias de juicio para ellos.


El atalaya de Israel

16Y aconteció que al cabo de los siete días vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 17Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. 18Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. 19Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma. 20Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y sus justicias que había hecho no vendrán en memoria; pero su sangre demandaré de tu mano. 21Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma.

Tras siete días de estar atónito, un periodo de perfección que hemos de pasar para asimilar el mensaje de Dios, vuelve la Palabra del Señor para enseñarle que él oirá la Palabra de Su boca, todo un privilegio. Es enviado como atalaya, por lo cual ha de amonestar al impío en su impiedad para que se convierta de su mal camino, al justo en su justo camino para advertirle que no deje el camino recto pues la consecuencia es la condenación. Si lo hace libra su alma de la sangre de ellos, escuchen o no el mensaje, pero si no lo hace ellos morirán, pero la sangre de ellos sería reclamada de su mano. Terrible obra, la de anunciar la ira de Dios sobre muchos que sabemos o vemos que no cambian sus vidas, que no escuchan la Palabra, que no hacen caso a Dios, pero querido hermano, hermana, merece la pena intentarlo, pues no sabemos quienes son de Dios y hay gran gozo cuando alguno que era del Señor recibe con fe el mensaje. Sí, en nuestro tiempo nos toca hacer de atalayas también con el Evangelio de Cristo, pues anunciamos Su muerte a las personas, su salvación, ser librados de la muerte eterna, de la traición del diablo que engaña a todos. Insto a la oración para ser capacitados, ungidos, enviados por el Señor para que aquellos a quienes predicamos nazcan de nuevo de lo alto.


El profeta mudo

22Vino allí la mano de Yahweh sobre mí, y me dijo: Levántate, y sal al campo, y allí hablaré contigo. 23Y me levanté y salí al campo; y he aquí que allí estaba la gloria de Yahweh, como la gloria que había visto junto al río Quebar; y me postré sobre mi rostro. 24Entonces entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y me habló, y me dijo: Entra, y enciérrate dentro de tu casa. 25Y tú, oh hijo de hombre, he aquí que pondrán sobre ti cuerdas, y con ellas te ligarán, y no saldrás entre ellos. 26Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y no serás a ellos varón que reprende; porque son casa rebelde. 27Mas cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Yahweh el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son.

El profeta mudo es una metáfora en Ezequiel que nos da luz sobre como el Señor quiere que actuemos ante las personas. Comienza por llamarle para que salga al campo; hay que salir al campo, a la naturaleza, o en casa buscar intimidad con Dios, esto es una buena práctica para oír Su voz. Entonces vio Su gloria de nuevo, sintió Su presencia, como la podemos sentir cada uno de nosotros. Estar mudo, no hablar a aquellos que ya se les ha amonestado y no hacen caso a Dios, hasta que sea el tiempo de Dios, porque es Él quien hace la obra con cada uno en particular, o con iglesias enteras. Debemos comprender esto, que la obra es de Dios, no nuestra, y que cuando servimos en la obra es como colaboradores suyos, cuando predicamos, es Cristo quien toca a la persona con Su Espíritu, por eso dice que si reciben nuestra palabra, recibirán la Suya.

 

CAPÍTULO 4

JERUSALÉN ES RODEADA

1Tú, hijo de hombre, tómate un adobe, y ponlo delante de ti, y diseña sobre él la ciudad de Jerusalén. 2Y pondrás contra ella sitio, y edificarás contra ella fortaleza, y sacarás contra ella baluarte, y pondrás delante de ella campamento, y colocarás contra ella arietes alrededor. 3Tómate también una plancha de hierro, y ponla en lugar de muro de hierro entre ti y la ciudad; afirmarás luego tu rostro contra ella, y será en lugar de cerco, y la sitiarás. Es señal a la casa de Israel.

Cuatro señales del juicio que viene: La tabla o adobe de barro, simboliza la fragilidad sobre la cual está fundada la ciudad-alma del hombre cuando no tiene a Dios, es donde debe hacer un plano de la ciudad de Jerusalén, la cual es el alma de la persona, además de la ciudad física. Ésta es sitiada para ser amenazada y destruida por su obstinación de vivir apartada de Dios. Plancha de hierro por muro entre el profeta y la ciudad, es la división que hay entre el profeta y aquellos que no aman a Dios. 390 años de ¿cautiverio? por la maldad de Israel, Ezequiel duerme sobre su lado izquierdo esa cantidad en días, y la maldad de la casa de Judá, 40 días sobre su lado derecho por los 40 años del desierto. Recibe pues orden de afirmar su rostro, esto es, de no cambiar su parecer, de ser firme en la ejecución porque está determinado por el Señor, por tanto no ha de dudar de su actitud. Con su brazo descubierto en señal de poder, profetiza contra Jerusalén.

4Y tú te acostarás sobre tu lado izquierdo y pondrás sobre él la maldad de la casa de Israel. El número de los días que duermas sobre él, llevarás sobre ti la maldad de ellos. 5Yo te he dado los años de su maldad por el número de los días, trescientos noventa días; y así llevarás tú la maldad de la casa de Israel. 6Cumplidos éstos, te acostarás sobre tu lado derecho segunda vez, y llevarás la maldad de la casa de Judá cuarenta días; día por año, día por año te lo he dado. 7Al asedio de Jerusalén afirmarás tu rostro, y descubierto tu brazo, profetizarás contra ella. 8Y he aquí he puesto sobre ti ataduras, y no te volverás de un lado a otro, hasta que hayas cumplido los días de tu asedio. 9Y tú toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, millo y avena, y ponlos en una vasija, y hazte pan de ellos el número de los días que te acuestes sobre tu lado; trescientos noventa días comerás de él. 10La comida que comerás será de peso de veinte siclos al día; de tiempo en tiempo la comerás. 11Y beberás el agua por medida, la sexta parte de un hin; de tiempo en tiempo la beberás. 12Y comerás pan de cebada cocido debajo de la ceniza; y lo cocerás a vista de ellos al fuego de excremento humano. 13Y dijo Yahweh: Así comerán los hijos de Israel su pan inmundo, entre las naciones a donde los arrojaré yo. 14Y dije: ¡Ah, Señor Yahweh! he aquí que mi alma no es inmunda, ni nunca desde mi juventud hasta este tiempo comí cosa mortecina ni despedazada, ni nunca en mi boca entró carne inmunda. 15Y me respondió: He aquí te permito usar estiércol de bueyes en lugar de excremento humano para cocer tu pan. 16Me dijo luego: Hijo de hombre, he aquí quebrantaré el sustento del pan en Jerusalén; y comerán el pan por peso y con angustia, y beberán el agua por medida y con espanto, 17para que al faltarles el pan y el agua, se miren unos a otros con espanto, y se consuman en su maldad.
 

Ezequiel durmiendo sobre sus lados recibe ataduras para que no pueda dejar de hacer la obra, y para que no se pueda cambiar de uno a otro lado, lo cual nos sirve de ejemplo para aplicárnoslo y seguir cada una de las obras del Señor hasta que las acabemos, y con diligencia, pues son prioridades Suyas, las cuales son las verdaderamente importantes y verdaderas. No hay que volverse de una a otra, sino hacer cada una a su tiempo.

El pan de trigo y cebada y el cocerlo de forma inmunda, corresponde a que el hombre desestima la Palabra de Dios, verdadero pan del cielo, por ello Dios les da a comer un pan físico de forma inmunda y con angustia, por eso Ezequiel clama al Señor que él si estima Su Palabra, lo cual ya sabe Dios, pero se trata de mostrar al pueblo de Dios la manera de proceder que tienen.

 

CAPÍTULO 5

1Y tú, hijo de hombre, tómate un cuchillo agudo, toma una navaja de barbero, y hazla pasar sobre tu cabeza y tu barba; toma después una balanza de pesar y divide los cabellos. 2Una tercera parte quemarás a fuego en medio de la ciudad, cuando se cumplan los días del asedio; y tomarás una tercera parte y la cortarás con espada alrededor de la ciudad; y una tercera parte esparcirás al viento, y yo desenvainaré espada en pos de ellos. 3Tomarás también de allí unos pocos en número, y los atarás en la falda de tu manto.

La tercera parte de su cabello de su cabeza y barba, esto es de su cobertura y de su ancianidad, será cortado ya que no es considerado por el pueblo como enviado del Señor. Por ello una tercera parte será quemada en medio de la ciudad, que puede ser físicamente, o puede ser la Iglesia, o simbólicamente explicado a una persona individualmente cuando no acepta la Palabra de Dios. Esto se hace cuando se cumplen los días del asedio, cuando se cumple la amenaza del castigo de Dios. Otra tercera parte cortada con espada, que simboliza ser cortada por orden de la Palabra de Dios, la espada, y esparcida alrededor de la ciudad, para rodearla de señal de juicio. La última tercera parte es para ser esparcida al viento, ya que la va a cortar con Su espada el mismo Dios. Unos pocos de los cabellos de la señal se le ordena atarlos en la falda del manto, que es la unción de Dios, para que haya en el discípulo una señal de que hace y cumple justicia, de que él fue quien anunció lo que ocurrió, de parte del Señor.

4Y tomarás otra vez de ellos, y los echarás en medio del fuego, y en el fuego los quemarás; de allí saldrá el fuego a toda la casa de Israel. 5Así ha dicho Yahweh el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las naciones y de las tierras alrededor de ella.

Por última vez es instruido a quemar unos pocos cabellos para que el fuego llegue a todos, de modo que el juicio le sea conocido a todos.

6Y ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella; porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en ellos. 7Por tanto, así ha dicho Yahweh: ¿Por haberos multiplicado más que las naciones que están alrededor de vosotros, no habéis andado en mis mandamientos, ni habéis guardado mis leyes? Ni aun según las leyes de las naciones que están alrededor de vosotros habéis andado. 8Así, pues, ha dicho Yahweh el Señor: He aquí yo estoy contra ti; sí, yo, y haré juicios en medio de ti ante los ojos de las naciones. 9Y haré en ti lo que nunca hice, ni jamás haré cosa semejante, a causa de todas tus abominaciones. 10Por eso los padres comerán a los hijos en medio de ti, y los hijos comerán a sus padres; y haré en ti juicios, y esparciré a todos los vientos todo lo que quedare de ti. 11Por tanto, vivo yo, dice Yahweh el Señor, ciertamente por haber profanado mi santuario con todas tus abominaciones, te quebrantaré yo también; mi ojo no perdonará, ni tampoco tendré yo misericordia.

Esta es Jerusalén, la ciudad geográfica, la ciudad elegida para albergar la Ley de Dios, o también el alma de un creyente, o la Iglesia, elegidas para albergar el Evangelio de salvación. Ubicada en medio de las naciones y tierras alrededor de ella, para que todos vean lo que en ella ocurre, lo que ocurre también en nuestras vidas cuando Cristo viene para reinar en nuestras almas. Sin embargo las personas que no aman a Dios y que han cambiado, o mejor dicho sustituido la Ley de Dios y la mente de Cristo por una ley propia, de la mente humana, fruto del árbol del bien y del mal ubicado en nuestra mente cuando no alberga a Dios, estas personas pues se han multiplicado en gran manera, son los más, y los salvos los menos. Ver 8 dice el Señor que está contra ti, persona que no pone Su ley por obra, Su moral en Cristo, por ello los padres comerán a los hijos y viceversa, lo cual simboliza que los que enseñan comen a sus discípulos y viceversa, porque no hay amor de Dios en los hombres que no aman a Dios, justo lo contrario que el mensaje de advertencia que hallamos en Malaquías 4 sobre la obra que haría el profeta Elías, , espíritu que vino en Juan bautista y que cambia los corazones diciendo: ...Él hará volver el corazón de los padre hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo vena y hiera la tierra con maldición...Malaquías 4:5 y 6.

12Una tercera parte de ti morirá de pestilencia y será consumida de hambre en medio de ti; y una tercera parte caerá a espada alrededor de ti; y una tercera parte esparciré a todos los vientos, y tras ellos desenvainaré espada. 13Y se cumplirá mi furor y saciaré en ellos mi enojo, y tomaré satisfacción; y sabrán que yo Yahweh he hablado en mi celo, cuando cumpla en ellos mi enojo. 14Y te convertiré en soledad y en oprobio entre las naciones que están alrededor de ti, a los ojos de todo transeúnte. 15Y serás oprobio y escarnio y escarmiento y espanto a las naciones que están alrededor de ti, cuando yo haga en ti juicios con furor e indignación, y en reprensiones de ira. Yo Yahweh he hablado. 16Cuando arroje yo sobre ellos las perniciosas saetas del hambre, que serán para destrucción, las cuales enviaré para destruiros, entonces aumentaré el hambre sobre vosotros, y quebrantaré entre vosotros el sustento del pan. 17Enviaré, pues, sobre vosotros hambre, y bestias feroces que te destruyan; y pestilencia y sangre pasarán por en medio de ti, y enviaré sobre ti espada. Yo Yahweh he hablado.

Una tercera parte de los impíos, o del impío en singular, morirá de pestilencia y se consumirá de hambre, de hambre espiritual, porque en su propia religión y ley no hallará la vida, que está sólo en Cristo. Otra tercera parte caerá a espada, esto es, ante la Palabra de Dios mas cortante que una espada de dos filos, pues si el hombre se presenta ante Dios sin fe, sin humildad y sin amor, la Palabra sólo le mostrará la letra, y la letra mata. La última tercera parte será esparcida a todos los vientos, estos vientos son los espíritus y potestades de los aíres de todo tipo de doctrina falsa, de esclavitud de la mente a creencias, miedos, fantasmas del mundo, demonios que esclavizarán al hombre, como pueden ser todo tipo de depresiones, de sometimientos a horóscopos y echadores de cartas, condicionamientos de religiones y sectas suicidas, planteadas para someter al hombre a la esclavitud, dependencia de santos y vírgenes, de idolatría, de drogas, de paranoias y trastornos mentales de todo tipo, los cuales acudirán a los psicólogos que a su vez los someterán a todo tipo de tratamientos; y el hombre se ve muerto y en agonía, todo un matrix del diablo para que el hombre no vea la verdad y viva la mentira. Y concluye con: ...Yo Yahweh he hablado... No obstante el hombre siempre puede dar la vuelta, arrepentirse y venir a Cristo.

 

CAPÍTULO 6


Profecía contra los montes de Israel

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu rostro hacia los montes de Israel, y profetiza contra ellos. 3Y dirás: Montes de Israel, oíd palabra de Yahweh el Señor: Así ha dicho Yahweh el Señor a los montes y a los collados, a los arroyos y a los valles: He aquí que yo, yo haré venir sobre vosotros espada, y destruiré vuestros lugares altos. 4Vuestros altares serán asolados, y vuestras imágenes del sol serán quebradas; y haré que caigan vuestros muertos delante de vuestros ídolos. 5Y pondré los cuerpos muertos de los hijos de Israel delante de sus ídolos, y vuestros huesos esparciré en derredor de vuestros altares. 6Dondequiera que habitéis, serán desiertas las ciudades, y los lugares altos serán asolados, para que sean asolados y se hagan desiertos vuestros altares; y vuestros ídolos serán quebrados y acabarán, vuestras imágenes del sol serán destruidas, y vuestras obras serán deshechas. 7Y los muertos caerán en medio de vosotros; y sabréis que yo soy Yahweh. 8Mas dejaré un resto, de modo que tengáis entre las naciones algunos que escapen de la espada, cuando seáis esparcidos por las tierras. 9Y los que de vosotros escaparen se acordarán de mí entre las naciones en las cuales serán cautivos; porque yo me quebranté a causa de su corazón fornicario que se apartó de mí, y a causa de sus ojos que fornicaron tras sus ídolos; y se avergonzarán de sí mismos, a causa de los males que hicieron en todas sus abominaciones. 10Y sabrán que yo soy Yahweh; no en vano dije que les había de hacer este mal. 11Así ha dicho Yahweh el Señor: Palmotea con tus manos, y golpea con tu pie, y di: ¡Ay, por todas las grandes abominaciones de la casa de Israel! porque con espada y con hambre y con pestilencia caerán. 12El que esté lejos morirá de pestilencia, el que esté cerca caerá a espada, y el que quede y sea asediado morirá de hambre; así cumpliré en ellos mi enojo.

Los montes de Israel son aquellos que presumen de altura espiritual, los que se alzan como líderes y pastores del pueblo, pero no lo son, los collados o colinas los de media estatura en grandeza, los valles son los que están abajo entre la multitud en las iglesias, el las religiones, los ríos son las doctrinas y a su vez la muchedumbre, ríos de naciones a todos estos, a la estructura de la humanidad profetiza el Señor por Ezequiel que sus cuerpos muertos caerán ante sus ídolos, y estos ídolos son ideas del hombre sin Dios. El proyecto de la humanidad. Los altares son las meditaciones sobre estos proyectos, sus congregaciones tanto religiosas como gubernamentales. El mundo no lo pasa bien hoy, los terroristas tienen en jaque a los gobiernos de Occidente, que obviamente no acuden al Señor de los ejércitos para que nos libre, sino a sus ídolos, ideas, proyectos de la llamada civilización. El Señor derribará todo proyecto del hombre que no ama a Su Creador y dador de la vida.

13Y sabréis que yo soy Yahweh, cuando sus muertos estén en medio de sus ídolos, en derredor de sus altares, sobre todo collado alto, en todas las cumbres de los montes, debajo de todo árbol frondoso y debajo de toda encina espesa, lugares donde ofrecieron incienso a todos sus ídolos. 14Y extenderé mi mano contra ellos, y dondequiera que habiten haré la tierra más asolada y devastada que el desierto hacia Diblat; y conocerán que yo soy Yahweh.

Para terminar, el versículo 13 habla de árbol frondoso y encina espesa donde el hombre ofrece su incienso, meditaciones a sus proyectos e ideas. Esta reprensión a la nación de Israel es aplicable dentro de este libro a todas las naciones, pues todas se desviaron en sus propios caminos, el resultado en el mundo ya lo vemos todavía en el siglo XXI: No hay temor de Dios aunque la Biblia ya está en todas las naciones e idiomas de la tierra, culto al consumo y el éxito para el deleite mientras millones de niños mueren de hambre, en las ciudades ricas hay personas que viven en las calles y mueren de frío y de enfermedades y los gobiernos no hacen nada; consumimos los recursos naturales y matamos la tierra, y los gobiernos no hacen nada; la sociedad se degenera y los gobiernos no hacen nada. Muchos gobiernos fomentan la explotación de los recursos naturales de países, léase africanos, mientras sus legítimos dueños, la población es, alimentada con odios étnicos, mueren de hambre, etc.

 

CAPÍTULO 7

El fin viene

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Tú, hijo de hombre, así ha dicho Yahweh el Señor a la tierra de Israel: El fin, el fin viene sobre los cuatro extremos de la tierra. 3Ahora será el fin sobre ti, y enviaré sobre ti mi furor, y te juzgaré según tus caminos; y pondré sobre ti todas tus abominaciones. 4Y mi ojo no te perdonará, ni tendré misericordia; antes pondré sobre ti tus caminos, y en medio de ti estarán tus abominaciones; y sabréis que yo soy Yahweh.

Aunque hay un fin general, en este momento el Señor anuncia el fin a Israel como nación y como tierra. Este mensaje también es aplicable a toda alma que siendo de Dios, abandona su camino, a la cual el fin viene.

5Así ha dicho Yahweh el Señor: Un mal, he aquí que viene un mal. 6Viene el fin, el fin viene; se ha despertado contra ti; he aquí que viene. 7La mañana viene para ti, oh morador de la tierra; el tiempo viene, cercano está el día; día de tumulto, y no de alegría, sobre los montes. 8Ahora pronto derramaré mi ira sobre ti, y cumpliré en ti mi furor, y te juzgaré según tus caminos; y pondré sobre ti tus abominaciones. 9Y mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia; según tus caminos pondré sobre ti, y en medio de ti estarán tus abominaciones; y sabréis que yo Yahweh soy el que castiga. 10He aquí el día, he aquí que viene; ha salido la mañana; ha florecido la vara, ha reverdecido la soberbia. 11La violencia se ha levantado en vara de maldad; ninguno quedará de ellos, ni de su multitud, ni uno de los suyos, ni habrá entre ellos quien se lamente. 12El tiempo ha venido, se acercó el día; el que compra, no se alegre, y el que vende, no llore, porque la ira está sobre toda la multitud. 13Porque el que vende no volverá a lo vendido, aunque queden vivos; porque la visión sobre toda la multitud no se revocará, y a causa de su iniquidad ninguno podrá amparar su vida. 14Tocarán trompeta, y prepararán todas las cosas, y no habrá quien vaya a la batalla; porque mi ira está sobre toda la multitud. 15De fuera espada, de dentro pestilencia y hambre; el que esté en el campo morirá a espada, y al que esté en la ciudad lo consumirá el hambre y la pestilencia. 16Y los que escapen de ellos huirán y estarán sobre los montes como palomas de los valles, gimiendo todos, cada uno por su iniquidad. 17Toda mano se debilitará, y toda rodilla será débil como el agua. 18Se ceñirán también de cilicio, y les cubrirá terror; en todo rostro habrá vergüenza, y todas sus cabezas estarán rapadas.

El fin viene sobre los cuatro extremos de la tierra. Yahweh advierte que Él es quien castiga a la humanidad que Le ignora, que viene el fin, que pondrá en juicio las obras abominables delante del hombre y no habrá misericordia para los que no reciben a Dios, se arrepienten y aceptan Su salvación como único recurso, reconociendo nuestra imposibilidad de salvarnos por nuestras propias justicias, religiones, mentes, proyectos e ideas. Debemos aceptar la idea de Dios, no la nuestra, este es el pecado, error, del hombre. Versículo 11, la violencia se ha levantado en vara de maldad.

19Arrojarán su plata en las calles, y su oro será desechado; ni su plata ni su oro podrá librarlos en el día del furor de Yahweh; no saciarán su alma, ni llenarán sus entrañas, porque ha sido tropiezo para su maldad. 20Por cuanto convirtieron la gloria de su ornamento en soberbia, e hicieron de ello las imágenes de sus abominables ídolos, por eso se lo convertí en cosa repugnante. 21En mano de extraños la entregué para ser saqueada, y será presa de los impíos de la tierra, y la profanarán. 22Y apartaré de ellos mi rostro, y será violado mi lugar secreto; pues entrarán en él invasores y lo profanarán. 23Haz una cadena, porque la tierra está llena de delitos de sangre, y la ciudad está llena de violencia. 24Traeré, por tanto, los más perversos de las naciones, los cuales poseerán las casas de ellos; y haré cesar la soberbia de los poderosos, y sus santuarios serán profanados. 25Destrucción viene; y buscarán la paz, y no la habrá. 26Quebrantamiento vendrá sobre quebrantamiento, y habrá rumor sobre rumor; y buscarán respuesta del profeta, mas la ley se alejará del sacerdote, y de los ancianos el consejo. 27El rey se enlutará, y el príncipe se vestirá de tristeza, y las manos del pueblo de la tierra temblarán; según su camino haré con ellos, y con los juicios de ellos los juzgaré; y sabrán que yo soy Yahweh.

Para los que confían en las riquezas las cuales no le valdrán ante el día del juicio de Dios, ni saciarán su alma espiritualmente. Sería profanado el lugar secreto del Señor, lo cual ocurrió en el asedio del general romano Tito en el 70 d.C. pero también ocurre esta desolación en el corazón del hombre que desprecia a Dios. La humanidad en su historia está llena de delitos de sangre. Hoy día y antes, Dios ha traído a los más perversos de las naciones para poseer las casas de ellos, sus almas y sus mentes. Hará cesar la soberbia de los poderosos que buscarán la paz y no la habrá. Cuando busquen respuesta del profeta, mas la ley se alejará del sacerdote y de los ancianos el consejo, lo cual no necesita interpretación.

En nuestro tiempo Jerusalén sufre violencia, buscan la paz y no la hayan. El conflicto Palestino Israelí no cesa, la franja de Gaza no deja de causarle dolores de cabeza al ejecutivo Israelí, y la retirada se anuncia turbulenta.

 

CAPÍTULO 8

LA GLORIA DE YAHWEH ABANDONA EL TEMPLO POR LAS ABOMINACIONES DE SU PUEBLO

1En el sexto año, en el mes sexto, a los cinco días del mes, aconteció que estaba yo sentado en mi casa, y los ancianos de Judá estaban sentados delante de mí, y allí se posó sobre mí la mano de Yahweh el Señor. 2Y miré, y he aquí una figura que parecía de hombre; desde sus lomos para abajo, fuego; y desde sus lomos para arriba parecía resplandor, el aspecto de bronce refulgente. 3Y aquella figura extendió la mano, y me tomó por las guedejas de mi cabeza; y el Espíritu me alzó entre el cielo y la tierra, y me llevó en visiones de Dios a Jerusalén, a la entrada de la puerta de adentro que mira hacia el norte, donde estaba la habitación de la imagen del celo, la que provoca a celos. 4Y he aquí, allí estaba la gloria del Dios de Israel, como la visión que yo había visto en el campo. 5Y me dijo: Hijo de hombre, alza ahora tus ojos hacia el lado del norte. Y alcé mis ojos hacia el norte, y he aquí al norte, junto a la puerta del altar, aquella imagen del celo en la entrada.

665 es la fecha que el profeta nos da, sexto año, sexto mes, quinto día, en este orden, parece un tiempo anterior de la bestia, y de hecho la narración que sigue es sobre lo que hacen aquellos que abominan. Visión de la gloria de Dios, antes de abrirle el Señor Yahweh la visión de las abominaciones del templo, vuelve a mostrársele para que no dude que el mensaje que está recibiendo es Suyo.

6Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿no ves lo que éstos hacen, las grandes abominaciones que la casa de Israel hace aquí para alejarme de mi santuario? Pero vuélvete aún, y verás abominaciones mayores. 7Y me llevó a la entrada del atrio, y miré, y he aquí en la pared un agujero. 8Y me dijo: Hijo de hombre, cava ahora en la pared. Y cavé en la pared, y he aquí una puerta. 9Me dijo luego: Entra, y ve las malvadas abominaciones que éstos hacen allí.

Imagen que provoca a celos, ya que el Señor es Dios celoso, como Él mismo dice, pero no sólo hay ídolos, le invita a entrar en este viaje espiritual y ver las abominaciones que hacían, y dice Yahweh que es para alejarle de Su santuario; esta es una advertencia a todos los creyentes que mantienen imágenes y ideas de doctrinas de hombres, las cuales apartan al Señor de allí, por lo tanto en los templos donde Ud. encuentre imágenes, sean estos católicos donde abundan, o cristianos o judíos donde pueden abundar en forma de mandamientos de hombre, por lo cual habrá de orar en el Espíritu y filtrar las doctrinas ante la Palabra de Dios, pues en estos lugares no hallará la presencia del Señor.

10Entré, pues, y miré; y he aquí toda forma de reptiles y bestias abominables, y todos los ídolos de la casa de Israel, que estaban pintados en la pared por todo alrededor. 11Y delante de ellos estaban setenta varones de los ancianos de la casa de Israel, y Jaazanías hijo de Safán en medio de ellos, cada uno con su incensario en su mano; y subía una nube espesa de incienso. 12Y me dijo: Hijo de hombre, ¿has visto las cosas que los ancianos de la casa de Israel hacen en tinieblas, cada uno en sus cámaras pintadas de imágenes? Porque dicen ellos: No nos ve Yahweh; Yahweh ha abandonado la tierra.

Con la pintura en la pared de reptiles lo explica muy bien, pues los reptiles y serpientes son morales, mandamientos y ataduras con las cuales se ata al hombre, y se cautiva su mente oponiéndola a la Ley de Dios. Tanto Juan Bautista como el Señor Yahshua, amonestaban a escribas y a fariseos y saduceos, llamándoles "serpientes, generación de víboras, como podéis hablar lo bueno siendo malos, y como escaparéis de la condenación y del infierno". Mateo 12:34 y 23:33. Con la Ley de Dios y los mandamientos de Cristo, el hombre sabe que agrada a Dios, pero estas serpientes o leyes son de hombre, por lo que no son del agrado del Señor, recuerdan a la serpiente de Edén, de donde tiene todo esto su origen, la cual engaña al hombre, y aún hoy lo engaña por la conciencia sujeta a la propia mente del hombre que no tiene a Dios. Todo esto promovido y dirigido por 70 varones, a semejanza de los que eligió Moisés, el mismo número que estuvo cautiva la nación de Israel. Lo mezclan con incienso el cual representa las oraciones abominables, las cuales no escapan a oídos del Señor, que ve el corazón desviado de su pueblo, esto es típica práctica hoy día en casi todas las religiones, incluida la católica.

13Me dijo después: Vuélvete aún, verás abominaciones mayores que hacen éstos. 14Y me llevó a la entrada de la puerta de la casa de Yahweh, que está al norte; y he aquí mujeres que estaban allí sentadas endechando a Tamuz. 15Luego me dijo: ¿No ves, hijo de hombre? Vuélvete aún, verás abominaciones mayores que estas. 16Y me llevó al atrio de adentro de la casa de Yahweh; y he aquí junto a la entrada del templo de Yahweh, entre la entrada y el altar, como veinticinco varones, sus espaldas vueltas al templo de Yahweh y sus rostros hacia el oriente, y adoraban al sol, postrándose hacia el oriente. 17Y me dijo: ¿No has visto, hijo de hombre? ¿Es cosa liviana para la casa de Judá hacer las abominaciones que hacen aquí? Después que han llenado de maldad la tierra, se volvieron a mí para irritarme; he aquí que aplican el ramo a sus narices. 18Pues también yo procederé con furor; no perdonará mi ojo, ni tendré misericordia; y gritarán a mis oídos con gran voz, y no los oiré.

Endechas a Tamuz en la puerta, adoración del sol en el atrio, lo cual unido a lo que hacen en intimidad, no deja lugar a dudas de que cuando el hombre se desvía del Señor, toda esta máquina religiosa, dentro, en medio y a las puertas, en lo íntimo, en lo público y en la congregación, es abominación. Por ello dice el Señor: cuando griten a mis oídos, no los oiré.

 

CAPÍTULO 9

LA DESTRUCCIÓN DE LOS CULPABLES

1Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir. 2Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había un varón vestido de lino, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce. 3Y la gloria del Dios de Israel se elevó de encima del querubín, sobre el cual había estado, al umbral de la casa; y llamó Yahweh al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano, 4y le dijo Yahweh: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.

Visión de la matanza en Jerusalén es una similitud a la marca de la sangre del cordero en los dinteles y los postes de las puertas, cuando el pueblo del Señor estaba en Egipto, o de la señal en Apocalipsis cuando venga la destrucción, y solo los que tengan la señal del Mesías en sus frentes se salvarán, esa señal es la fe y la obediencia al Espíritu Santo. Estos seis ángeles no ejecutan la destrucción hasta que marca en la frente a los que son de Dios, ese varón que está entre ellos, vestido de lino con el tintero en la mano, simboliza a Cristo, vestido de justicia y aquél que marca las mentes de los que le aman con la fe en Su obra, la tinta es Su sangre. Estos que son marcados son los que gimen y claman por las inmundicias que se hacen en el mundo y en la religión. Pero Aquel que clama con gemidos indecibles, el que más clama de todos es nuestro salvador, el Espíritu Santo, de quien se dice en la Biblia que inter-cede por nosotros con gemidos indecibles, porque Él sí que conoce y ve la importancia y la inminencia de que seamos mantenidos en la santidad hasta la venida del Reino de los Cielos.

5Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. 6Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo. 7Y les dijo: Contaminad la casa, y llenad los atrios de muertos; salid. Y salieron, y mataron en la ciudad. 8Aconteció que cuando ellos iban matando y quedé yo solo, me postré sobre mi rostro, y clamé y dije: ¡Ah, Señor Yahweh! ¿destruirás a todo el remanente de Israel derramando tu furor sobre Jerusalén? 9Y me dijo: La maldad de la casa de Israel y de Judá es grande sobremanera, pues la tierra está llena de sangre, y la ciudad está llena de perversidad; porque han dicho: Ha abandonado Yahweh la tierra, y Yahweh no ve. 10Así, pues, haré yo; mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia; haré recaer el camino de ellos sobre sus propias cabezas.

Mandamiento de matar a todos ya que la maldad es sobremanera grande. Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno. Si lo compramos con acontecimientos de la ira de Dios que han ocurrido durante la historia, bien por mano de hombres o por la naturaleza, los juicios vienen y arrasan con todos, de modo que quede la advertencia vigente para aquellos que no aman al Señor. Pide además el Señor que se empiece por Su santuario, el cual ellos no han santificado a Yahweh.

11Y he aquí que el varón vestido de lino, que tenía el tintero a su cintura, respondió una palabra, diciendo: He hecho conforme a todo lo que me mandaste.

Termina este capítulo con una frase que recuerda a las palabras de Cristo: He hecho conforme a todo lo que me mandaste; parecen las mismas que encontramos en Juan 17:4.

 

CAPÍTULO 10


La gloria de Dios abandona el templo

1Miré, y he aquí en la expansión que había sobre la cabeza de los querubines como una piedra de zafiro, que parecía como semejanza de un trono que se mostró sobre ellos. 2Y habló al varón vestido de lino, y le dijo: Entra en medio de las ruedas debajo de los querubines, y llena tus manos de carbones encendidos de entre los querubines, y espárcelos sobre la ciudad. Y entró a vista mía. 3Y los querubines estaban a la mano derecha de la casa cuando este varón entró; y la nube llenaba el atrio de adentro. 4Entonces la gloria de Yahweh se elevó de encima del querubín al umbral de la puerta; y la casa fue llena de la nube, y el atrio se llenó del resplandor de la gloria de Yahweh. 5Y el estruendo de las alas de los querubines se oía hasta el atrio de afuera, como la voz del Dios Omnipotente cuando habla. 6Aconteció, pues, que al mandar al varón vestido de lino, diciendo: Toma fuego de entre las ruedas, de entre los querubines, él entró y se paró entre las ruedas. 7Y un querubín extendió su mano de en medio de los querubines al fuego que estaba entre ellos, y tomó de él y lo puso en las manos del que estaba vestido de lino, el cual lo tomó y salió. 8Y apareció en los querubines la figura de una mano de hombre debajo de sus alas.

Nos describe el profeta la gloria de Dios que vio en la que vemos reflejado a Cristo al cual le dice el Padre que entre en medio de los querubines, que llene sus manos de carbones encendidos, lo cual sucede porque un querubín se los pone en las manos del varón vestido de lino, el cual lo tomó y salió. Ver 7. Esas ascuas del fuego de Dios son el Evangelio enviado al mundo en discípulos de Cristo. Esto lo explica Pablo en Romanos 12:20 cuando habla de cómo poner la otra mejilla, cuando alguien nos trata mal, para no tratarle igual, sino con el amor de Cristo, de forma que acumulamos ascuas de fuego sobre su cabeza, este es el resultado del Evangelio en el comportamiento y la esencia de una persona. La mano en las alas denota la mano del Señor sobre las acciones de lo que ocurre ante el profeta.

9Y miré, y he aquí cuatro ruedas junto a los querubines, junto a cada querubín una rueda; y el aspecto de las ruedas era como de crisólito. 10En cuanto a su apariencia, las cuatro eran de una misma forma, como si estuviera una en medio de otra. 11Cuando andaban, hacia los cuatro frentes andaban; no se volvían cuando andaban, sino que al lugar adonde se volvía la primera, en pos de ella iban; ni se volvían cuando andaban. 12Y todo su cuerpo, sus espaldas, sus manos, sus alas y las ruedas estaban llenos de ojos alrededor en sus cuatro ruedas. 13A las ruedas, oyéndolo yo, se les gritaba: ¡Rueda! 14Y cada uno tenía cuatro caras. La primera era rostro de querubín; la segunda, de hombre; la tercera, cara de león; la cuarta, cara de águila. 15Y se levantaron los querubines; este es el ser viviente que vi en el río Quebar. 16Y cuando andaban los querubines, andaban las ruedas junto con ellos; y cuando los querubines alzaban sus alas para levantarse de la tierra, las ruedas tampoco se apartaban de ellos. 17Cuando se paraban ellos, se paraban ellas, y cuando ellos se alzaban, se alzaban con ellos; porque el espíritu de los seres vivientes estaba en ellas. 18Entonces la gloria de Yahweh se elevó de encima del umbral de la casa, y se puso sobre los querubines. 19Y alzando los querubines sus alas, se levantaron de la tierra delante de mis ojos; cuando ellos salieron, también las ruedas se alzaron al lado de ellos; y se pararon a la entrada de la puerta oriental de la casa de Yahweh, y la gloria del Dios de Israel estaba por encima sobre ellos. 20Estos eran los mismos seres vivientes que vi debajo del Dios de Israel junto al río Quebar; y conocí que eran querubines. 21Cada uno tenía cuatro caras y cada uno cuatro alas, y figuras de manos de hombre debajo de sus alas. 22Y la semejanza de sus rostros era la de los rostros que vi junto al río Quebar, su misma apariencia y su ser; cada uno caminaba derecho hacia adelante.

La gloria de Dios abandona el templo. Recordemos que hay dos templos, el físico y el espiritual. El físico está en Jerusalén, o estaba. Es espiritual se compone a su vez de dos miembros, el Señor y cada uno de nosotros. Si el hombre se aparta de Dios, su gloria le abandona; si el hombre camina de la mano de Dios su templo del alma se llena de la gloria de Dios por el amor de Dios en Espíritu, y esto se hace en las tres componentes humanas, el cuerpo es santificado, el alma discierne la vida en Cristo, y el Espíritu de Dios gobierna nuestro espíritu, que nace de nuevo.

 

CAPÍTULO 11

Reprensión de los príncipes malvados

1El Espíritu me elevó, y me llevó por la puerta oriental de la casa de Yahweh, la cual mira hacia el oriente; y he aquí a la entrada de la puerta veinticinco hombres, entre los cuales vi a Jaazanías hijo de Azur y a Pelatías hijo de Benaía, principales del pueblo. 2Y me dijo: Hijo de hombre, estos son los hombres que maquinan perversidad, y dan en esta ciudad mal consejo; 3los cuales dicen: No será tan pronto; edifiquemos casas; esta será la olla, y nosotros la carne. 4Por tanto profetiza contra ellos; profetiza, hijo de hombre. 5Y vino sobre mí el Espíritu de Yahweh, y me dijo: Di: Así ha dicho Yahweh: Así habéis hablado, oh casa de Israel, y las cosas que suben a vuestro espíritu, yo las he entendido.

Si vemos a Jerusalén como a la humanidad, y vemos que en ella un grupo de 25 países llamados Europa que sólo les interesa lo que dice este texto: ...maquinan perversidad y dicen "edifiquemos casas", gasten, la economía es lo único importante, el culto al Euro, el dios griego. Todo lo demás gira a su alrededor: la seguridad, la sanidad, los servicios, todo para que los ciudadanos sigan invirtiendo sus vidas como esclavos, construyendo el mundo del consumo, como Israel en Egipto pisaba el barrizal para hacer los ladrillos de sus proyectos imperiales, lo mismo hace el hombre de Occidente para el imperio del consumo y el beneficio económico. 25 príncipes malvados como en Europa, los cuales han dado la espalda al Señor, hecho que ha sido ratificado en la constitución Europea ha haber eliminado de forma explicita la mención a los origines Cristianos de Europa. Vea mas sobre este tema en EUROPA TIRO.

6Habéis multiplicado vuestros muertos en esta ciudad, y habéis llenado de muertos sus calles. 7Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Vuestros muertos que habéis puesto en medio de ella, ellos son la carne, y ella es la olla; mas yo os sacaré a vosotros de en medio de ella. 8Espada habéis temido, y espada traeré sobre vosotros, dice Yahweh el Señor.

El siglo XXI ha comenzado para Occidente con espada del terrorismo Islámico, igual que en Jerusalén ha habido el Palestino, por lo tanto ahora todos han padecido lo mismo.

9Y os sacaré de en medio de ella, y os entregaré en manos de extraños, y haré juicios entre vosotros. 10A espada caeréis; en los límites de Israel os juzgaré, y sabréis que yo soy Yahweh. 11La ciudad no os será por olla, ni vosotros seréis en medio de ella la carne; en los límites de Israel os juzgaré.

Armagedón es los límites de Israel.

12Y sabréis que yo soy Yahweh; porque no habéis andado en mis estatutos, ni habéis obedecido mis decretos, sino según las costumbres de las naciones que os rodean habéis hecho. 13Y aconteció que mientras yo profetizaba, aquel Pelatías hijo de Benaía murió. Entonces me postré rostro a tierra y clamé con gran voz, y dije: ¡Ah, Señor Yahweh! ¿Destruirás del todo al remanente de Israel?

Esta es una profecía cumplida por Yahweh, la promesa de restauración del remanente en el ver. 16 aunque Israel en la historia ha sido esparcido por Dios, por las naciones, desde el año 70 d.C., les ha sido devuelta su tierra en el año 1948 con la intervención de la ONU. Del mismo modo el disfrute y control de nuestra propia alma nos es devuelto cuando ponemos al Señor Jesucristo como el centro de nuestras vidas, mientras tanto el hombre es esclavo del sistema de su mundo.


DIOS PROMETE restauración y renovación A SU PUEBLO

14Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 15Hijo de hombre, tus hermanos, tus hermanos, los hombres de tu parentesco y toda la casa de Israel, toda ella son aquellos a quienes dijeron los moradores de Jerusalén: Alejaos de Yahweh; a nosotros es dada la tierra en posesión. 16Por tanto, di: Así ha dicho Yahweh el Señor: Aunque les he arrojado lejos entre las naciones, y les he esparcido por las tierras, con todo eso les seré por un pequeño santuario en las tierras adonde lleguen.

Ya adelanta aquí el Señor que nos sería un pequeño santuario estuvieran donde estuvieran, como lo es a nosotros, estemos donde estemos, lo cual se confirma en Ap. 21cuando se identifica Él y el Cordero como el templo de la nueva Jerusalén, la física y nuestra alma.

17Di, por tanto: Así ha dicho Yahweh el Señor: Yo os recogeré de los pueblos, y os congregaré de las tierras en las cuales estáis esparcidos, y os daré la tierra de Israel. 18Y volverán allá, y quitarán de ella todas sus idolatrías y todas sus abominaciones. 19Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne, 20para que anden en mis ordenanzas, y guarden mis decretos y los cumplan, y me sean por pueblo, y yo sea a ellos por Dios. 21Mas a aquellos cuyo corazón anda tras el deseo de sus idolatrías y de sus abominaciones, yo traigo su camino sobre sus propias cabezas, dice Yahweh el Señor. 22Después alzaron los querubines sus alas, y las ruedas en pos de ellos; y la gloria del Dios de Israel estaba sobre ellos. 23Y la gloria de Yahweh se elevó de en medio de la ciudad, y se puso sobre el monte que está al oriente de la ciudad. 24Luego me levantó el Espíritu y me volvió a llevar en visión del Espíritu de Dios a la tierra de los caldeos, a los cautivos. Y se fue de mí la visión que había visto. 25Y hablé a los cautivos todas las cosas que Yahweh me había mostrado.

Ellos quitarán la idolatría, las ideas que no son de Dios, y pondrán la mente de Cristo.

Termina diciendo el Señor en la segunda parte de la profecía de la restauración de Israel, además de darles la tierra de nuevo, les daría un corazón nuevo y un espíritu nuevo que recibirá al Mesías Yahshua, Jesucristo. Vea un estudio sobre la restauración de Israel en MESIÁNICOS.

La gloria de Dios se puso en el monte que está al oriente de la ciudad, este es Sión, de donde vendrá Cristo.

Habló a los cautivos todas las cosas que Yahweh le había mandado, del mismo modo nosotros debemos hablar a los cautivos del mundo el Evangelio, para que sean liberados de su cautiverio, si es que creen a Dios.

 

CAPÍTULO 12


Salida de Ezequiel en señal de la cautividad

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, tú habitas en medio de casa rebelde, los cuales tienen ojos para ver y no ven, tienen oídos para oír y no oyen, porque son casa rebelde. 3Por tanto tú, hijo de hombre, prepárate enseres de marcha, y parte de día delante de sus ojos; y te pasarás de tu lugar a otro lugar a vista de ellos, por si tal vez atienden, porque son casa rebelde. 4Y sacarás tus enseres de día delante de sus ojos, como enseres de cautiverio; mas tú saldrás por la tarde a vista de ellos, como quien sale en cautiverio. 5Delante de sus ojos te abrirás paso por entre la pared, y saldrás por ella. 6Delante de sus ojos los llevarás sobre tus hombros, de noche los sacarás; cubrirás tu rostro, y no mirarás la tierra; porque por señal te he dado a la casa de Israel. 7Y yo hice así como me fue mandado; saqué mis enseres de día, como enseres de cautiverio, y a la tarde me abrí paso por entre la pared con mi propia mano; salí de noche, y los llevé sobre los hombros a vista de ellos.

Ezequiel obedece al Señor, como todos hemos de obedecerle. Sale en señal de cautividad, y mensajes de juicio, con la señal de abrir con su propia mano la pared simbolizando la debilidad de la protección en la que confían. Del mismo modo el pueblo de Dios que no le obedece saldrá de Su presencia e irá al desierto en cautividad, donde el hombre es llevado en varias etapas de su vida espiritual. Primero para que en su angustia busque a Dios, después, una vez le ha recibido y aceptado como su salvador, es llevado de nuevo para ser probado, a la manera en que Cristo fue llevado, y la Iglesia misma está en un desierto reflejado en Ap. 12 donde recibe sustento de Dios y las alas para escapar del enemigo.

8Y vino a mí palabra de Yahweh por la mañana, diciendo: 9Hijo de hombre, ¿no te ha dicho la casa de Israel, aquella casa rebelde: ¿Qué haces? 10Diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: Esta profecía se refiere al príncipe en Jerusalén, y a toda la casa de Israel que está en medio de ella. 11Diles: Yo soy vuestra señal; como yo hice, así se hará con vosotros; partiréis al destierro, en cautividad. 12Y al príncipe que está en medio de ellos llevarán a cuestas de noche, y saldrán; por la pared abrirán paso para sacarlo por ella; cubrirá su rostro para no ver con sus ojos la tierra. 13Mas yo extenderé mi red sobre él, y caerá preso en mi trampa, y haré llevarlo a Babilonia, a tierra de caldeos, pero no la verá, y allá morirá. 14Y a todos los que estuvieren alrededor de él para ayudarle, y a todas sus tropas, esparciré a todos los vientos, y desenvainaré espada en pos de ellos. 15Y sabrán que yo soy Yahweh, cuando los esparciere entre las naciones, y los dispersare por la tierra. 16Y haré que unos pocos de ellos escapen de la espada, del hambre y de la peste, para que cuenten todas sus abominaciones entre las naciones adonde llegaren; y sabrán que yo soy Yahweh.

El pueblo rebelde es llevado al Babilonia, a la esclavitud religiosa, la gran ramera, la impostora espiritual que engaña a las almas que no cumplen los mandamientos, que no estiman la Palabra de Dios como verdadera, siendo la Palabra el mismo Cristo, Juan 1. Que no quieren dejar su concepción de su mundo, con su dios, o del mundo sin Dios, para aceptar el reino de Dios.

17Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 18Hijo de hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento y con ansiedad. 19Y di al pueblo de la tierra: Así ha dicho Yahweh el Señor sobre los moradores de Jerusalén y sobre la tierra de Israel: Su pan comerán con temor, y con espanto beberán su agua; porque su tierra será despojada de su plenitud, por la maldad de todos los que en ella moran. 20Y las ciudades habitadas quedarán desiertas, y la tierra será asolada; y sabréis que yo soy Yahweh. 21Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 22Hijo de hombre, ¿qué refrán es este que tenéis vosotros en la tierra de Israel, que dice: Se van prolongando los días, y desaparecerá toda visión? 23Diles, por tanto: Así ha dicho Yahweh el Señor: Haré cesar este refrán, y no repetirán más este refrán en Israel. Diles, pues: Se han acercado aquellos días, y el cumplimiento de toda visión. 24Porque no habrá más visión vana, ni habrá adivinación de lisonjeros en medio de la casa de Israel. 25Porque yo Yahweh hablaré, y se cumplirá la palabra que yo hable; no se tardará más, sino que en vuestros días, oh casa rebelde, hablaré palabra y la cumpliré, dice Yahweh el Señor. 26Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 27Hijo de hombre, he aquí que los de la casa de Israel dicen: La visión que éste ve es para de aquí a muchos días, para lejanos tiempos profetiza éste. 28Diles, por tanto: Así ha dicho Yahweh el Señor: No se tardará más ninguna de mis palabras, sino que la palabra que yo hable se cumplirá, dice Yahweh el Señor.

El pueblo obstinado dice que las visiones, la exhortación que reciben, son para muchos días, pero el Señor les dice que no, que cuando alguien recibe exhortación de parte de Dios, por un profeta que sea verdadero, al cual se le identifica por la rectitud y el comportamiento conforme a la Palabra de Dios, entonces el mensaje ha de estimarse inminente y el receptor debe poner diligencia en resolver el asunto con el Señor, si es que a quién se le lleva el mensaje tiene temor de Yahweh. Este es el problema con los que no creen ni obedecen a Dios, se les lleva la Palabra de Dios, no la reciben, y viene el juicio de Dios. Hay otro caso que es dentro del pueblo de Dios, cuando un hermano que peca no recibe la reprensión de parte de Dios.

Existe otra circunstancia dentro del pueblo de Dios, dentro de la congregación, dentro de la Iglesia, que del mismo modo que Pedro y Pablo tuvieron desacuerdo en algunos temas doctrinales y de ministerio, que al final en sus cartas vemos que solucionan dando estabilidad a la Iglesia, los hermanos que exhortan deben ser irreprensibles. Hay muchos casos de batallas espirituales entre hermanos que no miran primero la viga de su ojo pero si la paja del ojo ajeno; el Señor insta a quitar primero la viga de nuestro ojo para ver bien antes de decirle al hermano que quite la paja del suyo, Uds. ya me entienden. El problema es que muchos no reconocen su error, deben pensar que son perfectos, y causan divisiones en el pueblo de Dios que desgraciadamente demasiadas veces son motivo de desánimo para los discípulos, rompiendo la armonía de una congregación y escandalizando a otros que se acercan al Camino, los cuales dudan de si están en la verdadera Iglesia. Por ello desde este medio, instar a todas las congregaciones que leéis regularmente en todo el mundo, que oréis para la unidad y la unanimidad dentro de la Iglesia, y que los pastores y ancianos de la congregación, que en verdad lo sean, pongan orden y enseñen y hagan partícipes a los demás de la construcción de la Iglesia como comunidad que representa nada menos que el Reino de Dios hasta que Él venga: ...allí donde estén dos o tres reunidos en mi nombre, allí estaré yo en medio de ellos... y ...el reino de Dios está entre vosotros... Palabras de Jesús. Mateo 18:20.

 

CAPÍTULO 13

CONDENACIÓN DE LOS FALSOS PROFETAS

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y di a los que profetizan de su propio corazón: Oíd palabra de Yahweh. 3Así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ay de los profetas insensatos, que andan en pos de su propio espíritu, y nada han visto! 4Como zorras en los desiertos fueron tus profetas, oh Israel. 5No habéis subido a las brechas, ni habéis edificado un muro alrededor de la casa de Israel, para que resista firme en la batalla en el día de Yahweh. 6Vieron vanidad y adivinación mentirosa. Dicen: Ha dicho Yahweh, y Yahweh no los envió; con todo, esperan que él confirme la palabra de ellos. 7¿No habéis visto visión vana, y no habéis dicho adivinación mentirosa, pues que decís: Dijo Yahweh, no habiendo yo hablado? 8Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto vosotros habéis hablado vanidad, y habéis visto mentira, por tanto, he aquí yo estoy contra vosotros, dice Yahweh el Señor. 9Estará mi mano contra los profetas que ven vanidad y adivinan mentira; no estarán en la congregación de mi pueblo, ni serán inscritos en el libro de la casa de Israel, ni a la tierra de Israel volverán; y sabréis que yo soy Yahweh el Señor. 10Sí, por cuanto engañaron a mi pueblo, diciendo: Paz, no habiendo paz; y uno edificaba la pared, y he aquí que los otros la recubrían con lodo suelto, 11di a los recubridores con lodo suelto, que caerá; vendrá lluvia torrencial, y enviaré piedras de granizo que la hagan caer, y viento tempestuoso la romperá. 12Y he aquí cuando la pared haya caído, ¿no os dirán: ¿Dónde está la embarradura con que la recubristeis? 13Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Haré que la rompa viento tempestuoso con mi ira, y lluvia torrencial vendrá con mi furor, y piedras de granizo con enojo para consumir. 14Así desbarataré la pared que vosotros recubristeis con lodo suelto, y la echaré a tierra, y será descubierto su cimiento, y caerá, y seréis consumidos en medio de ella; y sabréis que yo soy Yahweh. 15Cumpliré así mi furor en la pared y en los que la recubrieron con lodo suelto; y os diré: No existe la pared, ni los que la recubrieron, 16los profetas de Israel que profetizan acerca de Jerusalén, y ven para ella visión de paz, no habiendo paz, dice Yahweh el Señor.

Condenación de falsos profetas que no temen a Dios y profetizan por su propia visión de las cosas, dice el texto que andan en pos de su propio espíritu, y nada han visto, dicen que ha dicho Yahweh y Él no les ha dicho nada. Esto es lo peor y lo mas bajo que puede llegar cualquier miembro influyente, pastor o anciano del pueblo de Dios, pues no escaparán por engañar a los ovejas del Buen Pastor; por ahí caen muchos de la fe, por su fe ciega en los líderes, ...maldito el varón que confía en el hombre... dice Jeremías 17:5, por ello ¿que son los líderes? no son instrumentos de Dios, no es Dios quien construye la congregación de Su pueblo, por ello el pueblo ha de ser capacitado, todos grandes y pequeños han de ser enseñados en la Palabra de Dios para que nadie les pueda engañar jamás y que reciban el Espíritu del Señor para que el engañador no use la Palabra contra ellos como hizo con Jesús en el desierto, cuando fue entregado para ser tentado y pasar la prueba antes de comenzar Su ministerio. Esos falsos profetas serán echados de la congregación por el Señor; para ellos hay algo peor: ...no serán inscritos en el libro de la casa de Israel... por haber engañado al pueblo diciendo: Paz, no habiendo paz, y unos edifican la pared y otros la cubren con lodo, el lodo de sus pecados, el cual cuando viene el granizo y el viento del Señor cae, no están protegidos por Dios.

17Y tú, hijo de hombre, pon tu rostro contra las hijas de tu pueblo que profetizan de su propio corazón, y profetiza contra ellas, 18y di: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ay de aquellas que cosen vendas mágicas para todas las manos, y hacen velos mágicos para la cabeza de toda edad, para cazar las almas! ¿Habéis de cazar las almas de mi pueblo, para mantener así vuestra propia vida? 19¿Y habéis de profanarme entre mi pueblo por puñados de cebada y por pedazos de pan, matando a las personas que no deben morir, y dando vida a las personas que no deben vivir, mintiendo a mi pueblo que escucha la mentira? 20Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí yo estoy contra vuestras vendas mágicas, con que cazáis las almas al vuelo; yo las libraré de vuestras manos, y soltaré para que vuelen como aves las almas que vosotras cazáis volando. 21Romperé asimismo vuestros velos mágicos, y libraré a mi pueblo de vuestra mano, y no estarán más como presa en vuestra mano; y sabréis que yo soy Yahweh. 22Por cuanto entristecisteis con mentiras el corazón del justo, al cual yo no entristecí, y fortalecisteis las manos del impío, para que no se apartase de su mal camino, infundiéndole ánimo, 23por tanto, no veréis más visión vana, ni practicaréis más adivinación; y libraré mi pueblo de vuestra mano, y sabréis que yo soy Yahweh.
 

Condenación de las hijas que profetizan de su propio corazón: profetiza contra ellas: Ay de aquellas que cosen vendas mágicas para todas las manos, y hacen velos mágicos para la cabeza de toda edad para cazar las almas, para mantener su propia vida. Este engaño hacen las almas de aquellos y aquellas que de su propio corazón desviado, del mismo modo que la Babilonia de Apocalipsis, lo que buscan es las almas para alimentarse de ellas, de someterlas a sus deseos. Las vendas y los velos, son para que todo lo que toquen las manos de aquellos, y piensen sus cabezas, sean mandamientos de estos falsos profetas cazadores de almas. El Señor se considera profanado entre Su pueblo por estos, que matan a los que no han de morir y dejan vivir a los que han de morir, y todo esto no sólo físicamente, sino espiritualmente, y todo por puñados de cebaba y pedazos de pan, la vana gloria de ellos. Advertencia al pueblo de Dios: ...mintiendo a mi pueblo que escucha la mentira... El pueblo de Dios escucha la mentira porque no comprueba la enseñanza, esto por un lado, y por falta de oración por los maestros y pastores por otro, además de por falta de oración por discernimiento espiritual, sabiduría de lo alto e inteligencia, protección de falsos maestros y profetas como advierte nuestro Señor Jesucristo en: Mateo 7:15 y 24:11, nuestro hermano y apóstol Pablo en: 2 Corintios: 11:13 y 26, nuestro hermano y apóstol Pedro en: 2 Pedro 2:1 y nuestro hermano y apóstol Juan en: 1 Juan 4:1.

El Señor dice que las almas serán liberadas de las manos de ellos y soltaré para que vuelen como aves las almas que vosotros cazáis volando. Romperá sus velos y todo instrumento de engaño. Ellos entristecen con mentiras el corazón del justo que Dios no entristeció y fortalecieron al impío, los que no tienen misericordia, los que no ayudan a los hermanos que caen, los que son implacables ante el hermano débil o que pasa por una prueba. Estos impíos han de ser exhortados para que tengan oportunidad de arrepentirse, no se les ha de dar ánimo. El castigo para ellos es no ver mas visión vana. Yahweh librará a Su pueblo de ellos.

 

CAPÍTULO 14

1Vinieron a mí algunos de los ancianos de Israel, y se sentaron delante de mí. 2Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 3Hijo de hombre, estos hombres han puesto sus ídolos en su corazón, y han establecido el tropiezo de su maldad delante de su rostro. ¿Acaso he de ser yo en modo alguno consultado por ellos? 4Háblales, por tanto, y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: Cualquier hombre de la casa de Israel que hubiere puesto sus ídolos en su corazón, y establecido el tropiezo de su maldad delante de su rostro, y viniere al profeta, yo Yahweh responderé al que viniere conforme a la multitud de sus ídolos, 5para tomar a la casa de Israel por el corazón, ya que se han apartado de mí todos ellos por sus ídolos. 6Por tanto, di a la casa de Israel: Así dice Yahweh el Señor: Convertíos, y volveos de vuestros ídolos, y apartad vuestro rostro de todas vuestras abominaciones. 7Porque cualquier hombre de la casa de Israel, y de los extranjeros que moran en Israel, que se hubiere apartado de andar en pos de mí, y hubiere puesto sus ídolos en su corazón, y establecido delante de su rostro el tropiezo de su maldad, y viniere al profeta para preguntarle por mí, yo Yahweh le responderé por mí mismo; 8y pondré mi rostro contra aquel hombre, y le pondré por señal y por escarmiento, y lo cortaré de en medio de mi pueblo; y sabréis que yo soy Yahweh.

Mensajes contra los ancianos que vienen a consultar al Señor cuando han puesto en sus corazones su ídolos, que son sus ideas contrarias a la mente del Señor. Diles: Yahweh le responderá conforme a sus ideas, no conforme a la verdad de Su mente, porque ellos, tanto de Israel como extranjeros si se apartan de andar en pos del Señor han de convertirse de su mal camino. Es curioso que ancianos consulten a Señor por ancianos. Se supone que un anciano conoce al Señor y no necesita de otro anciano para consultar al Señor, sabe como piensa el Señor, y si no lo sabe, no es anciano de la Iglesia, o no tiene el Espíritu Santo. De todos modos hay cuestiones en las que se reúnen los ancianos para entre todos buscar la guía del Espíritu Santo, lo cual debe mostrarse si en todos los que en verdad son de Cristo están en unanimidad. La batalla que hoy hay en la Iglesia, en todas las iglesias, de todas las ramas y congregaciones y denominaciones, es que todos dicen tener el Espíritu Santo, lo cual es mentira, y a la luz de las Escrituras son derribados sus argumentos igual que el muro que vimos antes que construyen con barro suelto de sus pecados. El problema no es otro que haber puesto sus ideas como ídolos, habiendo cerrado sus mentes y sus corazones a la verdad.

9Y cuando el profeta fuere engañado y hablare palabra, yo Yahweh engañé al tal profeta; y extenderé mi mano contra él, y lo destruiré de en medio de mi pueblo Israel. 10Y llevarán ambos el castigo de su maldad; como la maldad del que consultare, así será la maldad del profeta, 11para que la casa de Israel no se desvíe más de en pos de mí, ni se contamine más en todas sus rebeliones; y me sean por pueblo, y yo les sea por Dios, dice Yahweh el Señor.

Por la maldad de sus corazones que con sus ideas preconcebidas vienen a consultar al profeta, el Señor les responderá y les engañará y extenderá Su mano contra ellos. Nada han de temer los que de sincero corazón buscan la voluntad de Dios para hacerla, aunque sea contraria a sus ideas, estos reciben la verdad porque su alma está convertida a Yahweh en Cristo. Igualmente culpable es el que consulta como el profeta que da respuesta al que no es recto, el profeta verdadero no responderá a aquellos que no caminan rectos ante Dios hasta que cambien sus corazones y se conviertan al Señor.


Justicia del castigo de Jerusalén

12Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 13Hijo de hombre, cuando la tierra pecare contra mí rebelándose pérfidamente, y extendiere yo mi mano sobre ella, y le quebrantare el sustento del pan, y enviare en ella hambre, y cortare de ella hombres y bestias, 14si estuviesen en medio de ella estos tres varones, Noé, Daniel y Job, ellos por su justicia librarían únicamente sus propias vidas, dice Yahweh el Señor. 15Y si hiciere pasar bestias feroces por la tierra y la asolaren, y quedare desolada de modo que no haya quien pase a causa de las fieras, 16y estos tres varones estuviesen en medio de ella, vivo yo, dice Yahweh el Señor, ni a sus hijos ni a sus hijas librarían; ellos solos serían librados, y la tierra quedaría desolada. 17O si yo trajere espada sobre la tierra, y dijere: Espada, pasa por la tierra; e hiciere cortar de ella hombres y bestias, 18y estos tres varones estuviesen en medio de ella, vivo yo, dice Yahweh el Señor, no librarían a sus hijos ni a sus hijas; ellos solos serían librados. 19O si enviare pestilencia sobre esa tierra y derramare mi ira sobre ella en sangre, para cortar de ella hombres y bestias, 20y estuviesen en medio de ella Noé, Daniel y Job, vivo yo, dice Yahweh el Señor, no librarían a hijo ni a hija; ellos por su justicia librarían solamente sus propias vidas. 21Por lo cual así ha dicho Yahweh el Señor: ¿Cuánto más cuando yo enviare contra Jerusalén mis cuatro juicios terribles, espada, hambre, fieras y pestilencia, para cortar de ella hombres y bestias? 22Sin embargo, he aquí quedará en ella un remanente, hijos e hijas, que serán llevados fuera; he aquí que ellos vendrán a vosotros, y veréis su camino y sus hechos, y seréis consolados del mal que hice venir sobre Jerusalén, de todas las cosas que traje sobre ella. 23Y os consolarán cuando viereis su camino y sus hechos, y conoceréis que no sin causa hice todo lo que he hecho en ella, dice Yahweh el Señor.

Noé, Daniel y Job representan a aquellos que obedecen al Señor y se esfuerzan en ser justos ante Dios, y nos explica el Señor que cuando Él trae juicios en la tierra, sólo los que son como ellos se salvan. Ni a sus hijos, ni a sus hijas librarían sino que sólo ellos se salvarían; esta es la enseñanza principal de este libro que el alma que pecare, esa morirá, que cada uno responderá de si mismo por sus obras, demostrando si tiene fe en la salvación de Dios, el Mesías. Pero quedará un remanente que será reconocido, aprendan esto, por su camino y por sus hechos, los de los hijos e hijas y serán consolados los que quedaron, y veremos que no sin causa hace Yahweh Su justicia. Desarrollado en el Cáp. 18.

 

CAPÍTULO 15


Jerusalén es como una vid inútil

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, ¿qué es la madera de la vid más que cualquier otra madera? ¿Qué es el sarmiento entre los árboles del bosque? 3¿Tomarán de ella madera para hacer alguna obra? ¿Tomarán de ella una estaca para colgar en ella alguna cosa? 4He aquí, es puesta en el fuego para ser consumida; sus dos extremos consumió el fuego, y la parte de en medio se quemó; ¿servirá para obra alguna? 5He aquí que cuando estaba entera no servía para obra alguna; ¿cuánto menos después que el fuego la hubiere consumido, y fuere quemada? ¿Servirá más para obra alguna? 6Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Como la madera de la vid entre los árboles del bosque, la cual di al fuego para que la consumiese, así haré a los moradores de Jerusalén. 7Y pondré mi rostro contra ellos; aunque del fuego se escaparon, fuego los consumirá; y sabréis que yo soy Yahweh, cuando pusiere mi rostro contra ellos. 8Y convertiré la tierra en asolamiento, por cuanto cometieron prevaricación, dice Yahweh el Señor.

Parábola de la vid inútil de Jerusalén, la cual es el alma del hombre que estando en Jerusalén, en el Israel de Dios, esto es, en la Iglesia de Dios, prevarica y hacer impíamente. Si el hombre no da frutos del espíritu será cortado y echado en el fuego. Por lo tanto analice su vida espiritual, su testimonio a su prójimo, sus oraciones, sus alabanzas, etc. Por la fe se salva el hombre para vida eterna, pero por sus frutos los conoceréis, y por ellos permaneceremos vivos y dando frutos para que cuando venga el Señor nos halle haciendo así.

 

CAPÍTULO 16

Infidelidad de Jerusalén

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, notifica a Jerusalén sus abominaciones, 3y di: Así ha dicho Yahweh el Señor sobre Jerusalén: Tu origen, tu nacimiento, es de la tierra de Canaán; tu padre fue amorreo, y tu madre hetea. 4Y en cuanto a tu nacimiento, el día que naciste no fue cortado tu ombligo, ni fuiste lavada con aguas para limpiarte, ni salada con sal, ni fuiste envuelta con fajas. 5No hubo ojo que se compadeciese de ti para hacerte algo de esto, teniendo de ti misericordia; sino que fuiste arrojada sobre la faz del campo, con menosprecio de tu vida, en el día que naciste.

Orígenes de Jerusalén, son descritos del mismo modo que podemos aplicar a cualquier persona de cualquier raza, lo aplica el Señor a la ciudad santa, la cual es santa porque Él la hace santa, no porque nosotros la hagamos santa. Esta Jerusalén, es también una parábola de nuestra alma, la cual es tomada del mundo enemigo de Dios y santificada por Él, si creemos su Palabra.

6Y yo pasé junto a ti, y te vi sucia en tus sangres, y cuando estabas en tus sangres te dije: ¡Vive! Sí, te dije, cuando estabas en tus sangres: ¡Vive! 7Te hice multiplicar como la hierba del campo; y creciste y te hiciste grande, y llegaste a ser muy hermosa; tus pechos se habían formado, y tu pelo había crecido; pero estabas desnuda y descubierta. 8Y pasé yo otra vez junto a ti, y te miré, y he aquí que tu tiempo era tiempo de amores; y extendí mi manto sobre ti, y cubrí tu desnudez; y te di juramento y entré en pacto contigo, dice Yahweh el Señor, y fuiste mía. 9Te lavé con agua, y lavé tus sangres de encima de ti, y te ungí con aceite; 10y te vestí de bordado, te calcé de tejón, te ceñí de lino y te cubrí de seda. 11Te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus brazos y collar a tu cuello. 12Puse joyas en tu nariz, y zarcillos en tus orejas, y una hermosa diadema en tu cabeza. 13Así fuiste adornada de oro y de plata, y tu vestido era de lino fino, seda y bordado; comiste flor de harina de trigo, miel y aceite; y fuiste hermoseada en extremo, prosperaste hasta llegar a reinar. 14Y salió tu renombre entre las naciones a causa de tu hermosura; porque era perfecta, a causa de mi hermosura que yo puse sobre ti, dice Yahweh el Señor.

Esta es la descripción de una persona que se convierte al Señor, la cual es Señor prepara para ser su esposa. A continuación narra lo que hace el alma de aquel que no ama a Dios de todo su corazón.

15Pero confiaste en tu hermosura, y te prostituiste a causa de tu renombre, y derramaste tus fornicaciones a cuantos pasaron; suya eras. 16Y tomaste de tus vestidos, y te hiciste diversos lugares altos, y fornicaste sobre ellos; cosa semejante nunca había sucedido, ni sucederá más. 17Tomaste asimismo tus hermosas alhajas de oro y de plata que yo te había dado, y te hiciste imágenes de hombre y fornicaste con ellas; 18y tomaste tus vestidos de diversos colores y las cubriste; y mi aceite y mi incienso pusiste delante de ellas. 19Mi pan también, que yo te había dado, la flor de la harina, el aceite y la miel, con que yo te mantuve, pusiste delante de ellas para olor agradable; y fue así, dice Yahweh el Señor.

Origen Canaán, de Padre amorreo y madre hetea. El Señor la miró en su nacimiento cuando fue arrojada en el campo y la salvó, le dio vida, la cubrió, la vistió de reina con seda, lino, joyas y diadema, la sustentó con flor de harina de trigo, miel y aceite que son Palabra de Dios, amor y unción, y tras todo esto la amó. Ella es nuestra alma, por la cual dio Su vida en la cruz. Ella es la congregación de los santos preparada para las bodas del Cordero. Pero ella, en su religiosidad confió en su hermosura, perfecta a causa de la hermosura de Yahweh que puso sobre nosotros. Se prostituyó pues ella conviviéndose en la Babilonia de Apocalipsis 17 y18. Lo cual desde el ver. 15 al 19 se ve con claridad como usa todos los dones de Dios para su adulterio.

Las comparaciones con Roma y el Vaticano o Jerusalén y el Sanedrín aunque correctas, deben ser aplicadas a cada persona que conociendo a Dios, habiendo recibido a Cristo, se aparta de su amor verdadero y su misericordia, cegado por el conocimiento de la Ley y del Evangelio que son su hermosura, los cuales son de Dios, no nuestros. Hemos de orar para permanecer en humildad ante el Señor, y accesibles a los hermanos, haciéndonos a todos de todos para ganar a todos para Cristo: ...Por lo cual, siendo libre de todos, me he hecho siervo de todos para ganar a mayor número. Me he hecho a los judíos como judío, para ganar a los judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley) como sujeto a la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley; a los que están sin ley, como si yo estuviera sin ley (no estando yo sin ley de Dios, sino bajo la ley de Cristo), para ganar a los que están si ley. Me he hecho débil a los débiles, para ganar a los débiles; a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos. Y esto hago por causa del evangelio, para hacerme copartícipe de él... como dice nuestro hermano el apóstol Pablo en 1 Corintios 9, que acabamos de leer, en especial desde el versículo 19.

20Además de esto, tomaste tus hijos y tus hijas que habías dado a luz para mí, y los sacrificaste a ellas para que fuesen consumidos. ¿Eran poca cosa tus fornicaciones, 21para que degollases también a mis hijos y los ofrecieras a aquellas imágenes como ofrenda que el fuego consumía? 22Y con todas tus abominaciones y tus fornicaciones no te has acordado de los días de tu juventud, cuando estabas desnuda y descubierta, cuando estabas envuelta en tu sangre. 23Y sucedió que después de toda tu maldad (¡ay, ay de ti! dice Yahweh el Señor), 24te edificaste lugares altos, y te hiciste altar en todas las plazas. 25En toda cabeza de camino edificaste lugar alto, e hiciste abominable tu hermosura, y te ofreciste a cuantos pasaban, y multiplicaste tus fornicaciones. 26Y fornicaste con los hijos de Egipto, tus vecinos, gruesos de carnes; y aumentaste tus fornicaciones para enojarme. 27Por tanto, he aquí que yo extendí contra ti mi mano, y disminuí tu provisión ordinaria, y te entregué a la voluntad de las hijas de los filisteos, que te aborrecen, las cuales se avergüenzan de tu camino deshonesto. 28Fornicaste también con los asirios, por no haberte saciado; y fornicaste con ellos y tampoco te saciaste. 29Multiplicaste asimismo tu fornicación en la tierra de Canaán y de los caldeos, y tampoco con esto te saciaste. 30¡Cuán inconstante es tu corazón, dice Yahweh el Señor, habiendo hecho todas estas cosas, obras de una ramera desvergonzada, 31edificando tus lugares altos en toda cabeza de camino, y haciendo tus altares en todas las plazas! Y no fuiste semejante a ramera, en que menospreciaste la paga, 32sino como mujer adúltera, que en lugar de su marido recibe a ajenos. 33A todas las rameras les dan dones; mas tú diste tus dones a todos tus enamorados; y les diste presentes, para que de todas partes se llegasen a ti en tus fornicaciones. 34Y ha sucedido contigo, en tus fornicaciones, lo contrario de las demás mujeres: porque ninguno te ha solicitado para fornicar, y tú das la paga, en lugar de recibirla; por esto has sido diferente. 35Por tanto, ramera, oye palabra de Yahweh.

Los hijos e hijas, obviamente son los discípulos, las personas que creen en el evangelio de Cristo y se convierten a Dios. Estos son sacrificados por ella, la religiosidad Babilónica de una persona o de una institución, a sus ídolos, que de nuevo son sus ideas propias de como gobernar la Iglesia, o su propia relación con Dios. Ideas que adornan y visten con los vestidos que Dios ha concedido a Jerusalén, con joyas, revelaciones del Señor, con la Palabra de Dios, las buenas obras y la unción. De aquí salen tantas divisiones, denominaciones y ramas de la Cristiandad, de los Judíos, y de toda religión, porque todo esto procede de la antigüedad, de los orígenes de la mente humana, de Babel, la torre de Babel, la Babilonia. Este es el nombre del proyecto arquitectónico de la humanidad sobre la espiritualidad que en realidad es la anti-espiritual. Se trata de un proyecto con unos fundamentos de arena, de ideas vanas, de ídolos de hombre sin Dios. Por supuesto todos estos proyectos caen cuando Dios manda el viento de justicia. Todos hemos de aceptar el proyecto de Dios, el Arquitecto del alma y de la mente del hombre, la cual ha de edificarse en el fundamento inamovible y sólido que es Yahshua, Jesucristo. Como verán el asunto no es sencillo, el engañador se ha camuflado como un virus y se activa cuando encuentra cualquier debilidad espiritual a lo largo del crecimiento espiritual de la persona. Por ello, como dice la Escritura: ...peligramos a toda hora... 1 Corintios 15:30 y ...nadie sería salvo... Mateo 24:22.

El hombre se olvida de cómo estaba desnudo y abandonado antes de que el Señor le rescatase de su ..."vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres... estos padres son de dos tipos, los genéticos físicos y los espirituales.

El versículo 35 es el colmo del adulterio de Jerusalén donde el Señor la llama claramente ramera. Ha llegado a fornicar con todas las naciones, lo cual nos presenta a la mente humana probando todo tipo de moral, religión en busca de satisfacerse a si misma, pero se da cuenta de que cuanto mas busca mas hambre de conocimiento de la verdad tiene. Llega tan bajo que paga para que adulteren con ella, el hombre se esfuerza por pertenecer a los mas diversos grupos religiosos en su búsqueda mundana de la espiritualidad, lo cual le lleva a todo tipo de desequilibrios mentales y espirituales. El único que es la verdad es Cristo, el único que tiene Palabras de vida eterna es Jesús de Nazaret.

36Así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto han sido descubiertas tus desnudeces en tus fornicaciones, y tu confusión ha sido manifestada a tus enamorados, y a los ídolos de tus abominaciones, y en la sangre de tus hijos, los cuales les diste; 37por tanto, he aquí que yo reuniré a todos tus enamorados con los cuales tomaste placer, y a todos los que amaste, con todos los que aborreciste; y los reuniré alrededor de ti y les descubriré tu desnudez, y ellos verán toda tu desnudez. 38Y yo te juzgaré por las leyes de las adúlteras, y de las que derraman sangre; y traeré sobre ti sangre de ira y de celos. 39Y te entregaré en manos de ellos; y destruirán tus lugares altos, y derribarán tus altares, y te despojarán de tus ropas, se llevarán tus hermosas alhajas, y te dejarán desnuda y descubierta. 40Y harán subir contra ti muchedumbre de gente, y te apedrearán, y te atravesarán con sus espadas. 41Quemarán tus casas a fuego, y harán en ti juicios en presencia de muchas mujeres; y así haré que dejes de ser ramera, y que ceses de prodigar tus dones.

Otras religiones son muchas mujeres, y atravesarla con sus espadas simboliza con sus morales, con sus leyes.

42Y saciaré mi ira sobre ti, y se apartará de ti mi celo, y descansaré y no me enojaré más. 43Por cuanto no te acordaste de los días de tu juventud, y me provocaste a ira en todo esto, por eso, he aquí yo también traeré tu camino sobre tu cabeza, dice Yahweh el Señor; pues ni aun has pensado sobre toda tu lujuria. 44He aquí, todo el que usa de refranes te aplicará a ti el refrán que dice: Cual la madre, tal la hija. 45Hija eres tú de tu madre, que desechó a su marido y a sus hijos; y hermana eres tú de tus hermanas, que desecharon a sus maridos y a sus hijos; vuestra madre fue hetea, y vuestro padre amorreo. 46Y tu hermana mayor es Samaria, ella y sus hijas, que habitan al norte de ti; y tu hermana menor es Sodoma con sus hijas, la cual habita al sur de ti. 47Ni aun anduviste en sus caminos, ni hiciste según sus abominaciones; antes, como si esto fuera poco y muy poco, te corrompiste más que ellas en todos tus caminos.

La interpretación no puede ser otra: La madre es la mente humana que ha comido del fruto ofrecido por la serpiente en Edén. Desechó a su marido, el marido espiritual del hombre, que se compone de Adán y Eva, es el hombre su espíritu y mente, el marido que es el Señor nuestro Dios y a sus hijos, los hijos que nacen por la Palabra de Dios. Hermana de otras religiones adulteradas por el hombre que igualmente desechan a sus maridos y a sus hijos, los cuales no les importan, sólo que sigan sus tradiciones, sin indagar en la Verdad. Tu madre hetea y tu padre amorreo, simboliza que todos venimos de una misma carne, ninguna raza es superior a otra. Tu hermana mayor Samaria, es la capital del reino del norte, Israel, y sodoma es donde también nuestro Señor fue crucificado; sí Jerusalén es también sodoma por sus abominaciones, si la religión Judía, igual que la Católica y todas las demás han hecho abominación y han derramado sangre. Pero ella ha sido aún peor que todas ellas, no se ha conformado y ha empeorado su camino al infierno.

Del 48 al 60 se muestra la descripción del comportamiento de ella. 60Antes yo tendré memoria de mi pacto que concerté contigo en los días de tu juventud, y estableceré contigo un pacto sempiterno. 61Y te acordarás de tus caminos y te avergonzarás, cuando recibas a tus hermanas, las mayores que tú y las menores que tú, las cuales yo te daré por hijas, mas no por tu pacto, 62sino por mi pacto que yo confirmaré contigo; y sabrás que yo soy Yahweh; 63para que te acuerdes y te avergüences, y nunca más abras la boca, a causa de tu vergüenza, cuando yo perdone todo lo que hiciste, dice Yahweh el Señor.

Hemos visto la igualdad entre la madre y la hija. Si la madre de las rameras es Jerusalén, las hijas pasan por todas las denominaciones, tanto judías, como Cristianas como la Ortodoxa, la Católica, la Protestante, con todas sus denominaciones, etc. el resto de las religiones del mundo igualmente se prostituyen porque manan de la mente humana que, en el caso de la Biblia mezclan la Palabra de Dios con sus ídolos o ideas, y en el caso de otras sus propios ídolos para dominar al hombre.

 

CAPÍTULO 17

HUMILLACIÓN Y RESURGIMIENTO DE LA CASA DE DAVID

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, propón una figura, y compón una parábola a la casa de Israel. 3Y dirás: Así ha dicho Yahweh el Señor: Una gran águila, de grandes alas y de largos miembros, llena de plumas de diversos colores, vino al Líbano, y tomó el cogollo del cedro. 4Arrancó el principal de sus renuevos y lo llevó a tierra de mercaderes, y lo puso en una ciudad de comerciantes. 5Tomó también de la simiente de la tierra, y la puso en un campo bueno para sembrar, la plantó junto a aguas abundantes, la puso como un sauce. 6Y brotó, y se hizo una vid de mucho ramaje, de poca altura, y sus ramas miraban al águila, y sus raíces estaban debajo de ella; así que se hizo una vid, y arrojó sarmientos y echó mugrones. 7Había también otra gran águila, de grandes alas y de muchas plumas; y he aquí que esta vid juntó cerca de ella sus raíces, y extendió hacia ella sus ramas, para ser regada por ella por los surcos de su plantío. 8En un buen campo, junto a muchas aguas, fue plantada, para que hiciese ramas y diese fruto, y para que fuese vid robusta. 9Diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¿Será prosperada? ¿No arrancará sus raíces, y destruirá su fruto, y se secará? Todas sus hojas lozanas se secarán; y eso sin gran poder ni mucha gente para arrancarla de sus raíces. 10Y he aquí está plantada; ¿será prosperada? ¿No se secará del todo cuando el viento solano la toque? En los surcos de su verdor se secará.

A continuación el Señor explica esta parábola. Los líderes del pueblo de Dios son llevados cautivos a la religión falsa, Babilonia, y el hombre en lugar de acudir a Su Señor, acude al rey de Egipto, el mundo.

11Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 12Di ahora a la casa rebelde: ¿No habéis entendido qué significan estas cosas? Diles: He aquí que el rey de Babilonia vino a Jerusalén, y tomó a tu rey y a sus príncipes, y los llevó consigo a Babilonia. 13Tomó también a uno de la descendencia real e hizo pacto con él, y le hizo prestar juramento; y se llevó consigo a los poderosos de la tierra, 14para que el reino fuese abatido y no se levantase, a fin de que guardando el pacto, permaneciese en pie. 15Pero se rebeló contra él, enviando embajadores a Egipto para que le diese caballos y mucha gente. ¿Será prosperado, escapará el que estas cosas hizo? El que rompió el pacto, ¿podrá escapar? 16Vivo yo, dice Yahweh el Señor, que morirá en medio de Babilonia, en el lugar donde habita el rey que le hizo reinar, cuyo juramento menospreció, y cuyo pacto hecho con él rompió. 17Y ni con gran ejército ni con mucha compañía hará Faraón nada por él en la batalla, cuando se levanten vallados y se edifiquen torres para cortar muchas vidas. 18Por cuanto menospreció el juramento y quebrantó el pacto, cuando he aquí que había dado su mano, y ha hecho todas estas cosas, no escapará. 19Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Vivo yo, que el juramento mío que menospreció, y mi pacto que ha quebrantado, lo traeré sobre su misma cabeza. 20Extenderé sobre él mi red, y será preso en mi lazo, y lo haré venir a Babilonia, y allí entraré en juicio con él por su prevaricación con que contra mí se ha rebelado. 21Y todos sus fugitivos, con todas sus tropas, caerán a espada, y los que queden serán esparcidos a todos los vientos; y sabréis que yo Yahweh he hablado.

El hombre que menosprecia y quebranta el pacto con Dios, es llevado a juicio en Babilonia, su propia tierra de religión de tradición, de ídolos de sus ideas personales contrarias al Señor, por las cuales nadie puede se salvo.

22Así ha dicho Yahweh el Señor: Tomaré yo del cogollo de aquel alto cedro, y lo plantaré; del principal de sus renuevos cortaré un tallo, y lo plantaré sobre el monte alto y sublime. 23En el monte alto de Israel lo plantaré, y alzará ramas, y dará fruto, y se hará magnífico cedro; y habitarán debajo de él todas las aves de toda especie; a la sombra de sus ramas habitarán. 24Y sabrán todos los árboles del campo que yo Yahweh abatí el árbol sublime, levanté el árbol bajo, hice secar el árbol verde, e hice reverdecer el árbol seco. Yo Yahweh lo he dicho, y lo haré.

Concluye esta parábola de las dos águilas y la vid narrando la comparación de Jerusalén y el rey de Judá con un cedro del Líbano que es arrancado y llevado a Babilonia, y del mismo modo aquellos árboles que sean bajos pero que den frutos, las personas que sí obedecen a Dios, serán alzados y transformados en grandes árboles y plantados en el monte alto de Jerusalén, así como de la raíz del árbol de Judá, esto es Cristo, sería plantado uno en ese monte alto para reinar, a la sombra del Cual, todas las aves vendremos y moraremos bajo su sombra, la del Altísimo.

 

CAPÍTULO 18

El alma que pecare morirá porque es justicia de Dios

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2¿Qué pensáis vosotros, los que usáis este refrán sobre la tierra de Israel, que dice: Los padres comieron las uvas agrias, y los dientes de los hijos tienen la dentera? 3Vivo yo, dice Yahweh el Señor, que nunca más tendréis por qué usar este refrán en Israel. 4He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá. 5Y el hombre que fuere justo, e hiciere según el derecho y la justicia; 6que no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni violare la mujer de su prójimo, ni se llegare a la mujer menstruosa, 7ni oprimiere a ninguno; que al deudor devolviere su prenda, que no cometiere robo, y que diere de su pan al hambriento y cubriere al desnudo con vestido, 8que no prestare a interés ni tomare usura; que de la maldad retrajere su mano, e hiciere juicio verdadero entre hombre y hombre, 9en mis ordenanzas caminare, y guardare mis decretos para hacer rectamente, éste es justo; éste vivirá, dice Yahweh el Señor. 10Mas si engendrare hijo ladrón, derramador de sangre, o que haga alguna cosa de estas, 11y que no haga las otras, sino que comiere sobre los montes, o violare la mujer de su prójimo, 12al pobre y menesteroso oprimiere, cometiere robos, no devolviere la prenda, o alzare sus ojos a los ídolos e hiciere abominación, 13prestare a interés y tomare usura; ¿vivirá éste? No vivirá. Todas estas abominaciones hizo; de cierto morirá, su sangre será sobre él. 14Pero si éste engendrare hijo, el cual viere todos los pecados que su padre hizo, y viéndolos no hiciere según ellos; 15no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel; la mujer de su prójimo no violare, 16ni oprimiere a nadie, la prenda no retuviere, ni cometiere robos; al hambriento diere de su pan, y cubriere con vestido al desnudo; 17apartare su mano del pobre, interés y usura no recibiere; guardare mis decretos y anduviere en mis ordenanzas; éste no morirá por la maldad de su padre; de cierto vivirá. 18Su padre, por cuanto hizo agravio, despojó violentamente al hermano, e hizo en medio de su pueblo lo que no es bueno, he aquí que él morirá por su maldad. 19Y si dijereis: ¿Por qué el hijo no llevará el pecado de su padre? Porque el hijo hizo según el derecho y la justicia, guardó todos mis estatutos y los cumplió, de cierto vivirá. 20El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él.

El que pecare será el que muera, no morirán los hijos por los padres, aunque los hijos reciben la maldición por la obra de sus padres, pueden ellos arrepentirse y ser salvos. Todas las almas son mías, dice el Señor.

Se describe hasta el ver.9 el comportamiento del justo que, según el Señor, es el camino recto. De modo que si un hombre hiciere lo recto delante del Señor pero su hijo no obedeciera a Dios, este hijo recibirá el castigo, y si el hijo de este malo si hiciere conforme a la justicia del Señor, este vivirá y no recibirá la herencia del castigo de su padre.



El camino de Dios es justo

21Mas el impío, si se apartare de todos sus pecados que hizo, y guardare todos mis estatutos e hiciere según el derecho y la justicia, de cierto vivirá; no morirá. 22Todas las transgresiones que cometió, no le serán recordadas; en su justicia que hizo vivirá. 23¿Quiero yo la muerte del impío? dice Yahweh el Señor. ¿No vivirá, si se apartare de sus caminos? 24Mas si el justo se apartare de su justicia y cometiere maldad, e hiciere conforme a todas las abominaciones que el impío hizo, ¿vivirá él? Ninguna de las justicias que hizo le serán tenidas en cuenta; por su rebelión con que prevaricó, y por el pecado que cometió, por ello morirá. 25Y si dijereis: No es recto el camino del Señor; oíd ahora, casa de Israel: ¿No es recto mi camino? ¿no son vuestros caminos torcidos? 26Apartándose el justo de su justicia, y haciendo iniquidad, él morirá por ello; por la iniquidad que hizo, morirá. 27Y apartándose el impío de su impiedad que hizo, y haciendo según el derecho y la justicia, hará vivir su alma. 28Porque miró y se apartó de todas sus transgresiones que había cometido, de cierto vivirá; no morirá. 29Si aún dijere la casa de Israel: No es recto el camino del Señor; ¿no son rectos mis caminos, casa de Israel? Ciertamente, vuestros caminos no son rectos. 30Por tanto, yo os juzgaré a cada uno según sus caminos, oh casa de Israel, dice Yahweh el Señor. Convertíos, y apartaos de todas vuestras transgresiones, y no os será la iniquidad causa de ruina. 31Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis, casa de Israel? 32Porque no quiero la muerte del que muere, dice Yahweh el Señor; convertíos, pues, y viviréis.

El Señor dice: ...¿quiero yo la muerte del impío?... no vivirá si se arrepintiere de su mal camino. Esto nos lleva a amar a nuestros enemigos, como nos enseña el Maestro, porque quizá el impío al oír de nosotros el Evangelio, o al recibir de  nosotros un trato bueno, cuando el que nos dio un mal trato, se arrepienta. De igual modo si el justo que hizo todo tipo de buenas obras se apartare y comenzare a obrar impíamente, será cortado del libro de la vida.

La conclusión de nuevo está estrechamente ligada al estudio sobre la salvación por obras o sin ellas. Los que hacen las obras del Señor, estos recibirán a Cristo porque creen a Dios. Los que no creen a Dios no harán la obra de Dios de corazón sino por la Ley.

La conclusión y el centro de este libro está resumida en este capítulo. Así  aunque la Palabra nos muestra que el hombre que cumpliere los 613 mandamientos de la Ley de Dios vivirá por ellos, el resultado es que no hay hombre sobre la tierra, no lo ha habido ni lo habrá que los cumpla, por lo tanto todos morirán. Entonces ¿cuál es el plan de salvación de Dios?. Precisamente viniendo en Su Hijo Jesucristo, cumpliendo en Él los 613 mandamientos, cumpliendo algo aún mayor, la misericordia de Dios, siendo el Justo, el heredero del Padre, murió por nosotros llevando la culpa de nuestro incumplimiento de esos 613 mandamientos por cuyo incumplimiento viene la muerte, y fue muerto por ello. Pero al Señor, el Señor y dador de la vida, la muerte no tienen potestad sobre Él, de modo que los que están en Él también heredan vida eterna por Su obra.

 

CAPÍTULO 19

Lamentación sobre los príncipes de Israel

1Y tú, levanta endecha sobre los príncipes de Israel. 2Dirás: ¡Cómo se echó entre los leones tu madre la leona! Entre los leoncillos crió sus cachorros, 3e hizo subir uno de sus cachorros; vino a ser leoncillo, y aprendió a arrebatar la presa, y a devorar hombres. 4Y las naciones oyeron de él; fue tomado en la trampa de ellas, y lo llevaron con grillos a la tierra de Egipto. 5Viendo ella que había esperado mucho tiempo, y que se perdía su esperanza, tomó otro de sus cachorros, y lo puso por leoncillo.

La leona madre, es Judá de quien salen y son enviados dos leoncillos, uno es Joacaz y el otro Jeconías, de la casa de David, de Judá. Por sus infidelidades a Dios son llevados, uno con grillos de esclavitud al mundo, a Egipto, como estuvieron sus padres en tiempos de Moisés, y el otro a Babilonia. Esos grillos son en realidad la confianza que ponen los hombres en los sistemas de la sociedad, las formas y los pensamientos bien vistos en la sociedad, tanto religiosa como del mundo que son contrarios a los pensamientos de Dios, pero tras ellos se esconden principados y potestades. Dice el texto que es una trampa. Nótese que esto se hará dos veces, porque el hombre que se empeña en dominar por su propio proyecto religioso ha de ser atado por Dios en dos planos, el mundo y la religión que da a luz hijos leoncillos, príncipes, ancianos, líderes religiosos que devoran hombres.

6Y él andaba entre los leones; se hizo leoncillo, aprendió a arrebatar la presa, devoró hombres. 7Saqueó fortalezas, y asoló ciudades; y la tierra fue desolada, y cuanto había en ella, al estruendo de sus rugidos. 8Arremetieron contra él las gentes de las provincias de alrededor, y extendieron sobre él su red, y en el foso fue apresado. 9Y lo pusieron en una jaula y lo llevaron con cadenas, y lo llevaron al rey de Babilonia; lo pusieron en las fortalezas, para que su voz no se oyese más sobre los montes de Israel.

De nuevo prueba la madre, esa mente humana, que se echa entre los leones con otro de sus hijos, pero éste destruye su propia tierra, devora hombres, es un virus espiritual para las almas de los hombres de su pueblo, al sonido de sus rugidos simboliza su imposición con su propia ley, la cual seca el alma de los que aman al Señor, por ello el Señor le envía a las naciones de alrededor y le apresaron, lo llevaron a Babilonia para que sufra de lo mismo que ha hecho sufrir a su pueblo, de la esclavitud a una ley de hierro mezclada con levadura. Con cadenas de tradiciones, mandamientos de hombre, idolatrías, etc. Sí, en el caso de Israel y aquí de Judá, sus príncipes espirituales, han usado la Ley de Dios para matar hombres, han mezclado los ídolos, sus ideas, sus tradiciones y las del mundo y lo han hecho autoridad a la que someter a todos, y no han tenido humildad y misericordia, la cual triunfa sobre el juicio, no han llevado a la oveja perniquebrada a cuestas, ni a la cansada, sólo saben condenar con el instrumento de la Ley de Dios o de hombre, por lo cual se han convertido en Acusador, significado del nombre Satanás. Los hijos de Dios que son príncipes del pueblo de Dios, no devoran almas, las enseñan en el Camino, en el amor del Señor.

En tiempos de los dos testamentos encontramos predicadores y hermanos fieles al Señor y aquellos que usan el nombre del Padre y del Hijo para dominar las almas y matarlas, quienes esto hacen son los falsos profetas de los que ya hemos sido advertidos en el Cap. 13. La cuestión es ¿Cómo vamos a cambiar el mal concepto que tienen del Cristianismo aquellos que lo han conocido por manos del engañador, y no conocen el verdadero Evangelio de Cristo, que es para todas las naciones de la tierra, y que no pertenece a Occidente, sino también a Oriente, al Norte y al Sur, a toda tribu y étnia, las cuales han de abrazar al Salvador de los hombres, y abandonar su propias ideas de religión, sus ídolos y falsos profetas?

10Tu madre fue como una vid en medio de la viña, plantada junto a las aguas, dando fruto y echando vástagos a causa de las muchas aguas. 11Y ella tuvo varas fuertes para cetros de reyes; y se elevó su estatura por encima entre las ramas, y fue vista por causa de su altura y la multitud de sus sarmientos. 12Pero fue arrancada con ira, derribada en tierra, y el viento solano secó su fruto; sus ramas fuertes fueron quebradas y se secaron; las consumió el fuego. 13Y ahora está plantada en el desierto, en tierra de sequedad y de aridez. 14Y ha salido fuego de la vara de sus ramas, que ha consumido su fruto, y no ha quedado en ella vara fuerte para cetro de rey. Endecha es esta, y de endecha servirá.

Tu madre, la religión, en este caso Jerusalén con la Ley de Dios, es como una vid plantada en medio de una viña, es como todas las ciudades, pero cuando la santificó Yahweh, quedó plantada junto a muchas aguas lo cual produjo varas fuertes para cetros de reyes, esto es, la Ley de Dios, lo cual le dio mayor estatura que a las demás morales de las naciones, pero se ensoberbeció el pueblo de Israel por tener la Ley de Dios, del mismo modo que se envanecen muchos Cristianos por su conocimiento de las Escrituras, y no se cuidan de ser santos. No cuidan de no mezclar su mente con la del mundo, por lo que entró la levadura en la doctrina que profesaban y fue arrancada y derribada, el viento solano de parte de Dios secó su fruto, sus ramas fuertes, su descendencia quebrados y la consumió el fuego del infierno. Esto es lo que está reservado a los pastores y profetas que no cuidan de su santificación, mezclando sus propias ideas o ídolos con la Palabra del Señor haciendo que las ovejas del rebaño de Dios se envenenen y mueran; el Señor antes que esto acontezca, quita a los príncipes y pastores contaminados, soberbios e impíos y los echa lejos del pueblo, de la Iglesia. Cada uno debe comprobar siempre en su vida su relación con Dios, pasar su vida por el filtro del Espíritu Santo y de la Palabra de Dios, y por sus frutos los conoceréis. A los que hacen escándalo en medio de la congregación y causan divisiones ...después de una y otra amonestación, deséchalo, sabiendo que el tal se ha pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio...Tito 3:10-11.

La misericordia de Dios hace que esta vid sea plantada en el desierto, sin dar fruto, sin agua, para que el día que se arrepienta pueda volver a ser plantada en la viña del Señor, la viña de las almas y de las congregaciones santas.

 

CAPÍTULO 20

Modo de proceder de Dios con Israel

1Aconteció en el año séptimo, en el mes quinto, a los diez días del mes, que vinieron algunos de los ancianos de Israel a consultar a Yahweh, y se sentaron delante de mí. 2Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 3Hijo de hombre, habla a los ancianos de Israel, y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¿A consultarme venís vosotros? Vivo yo, que no os responderé, dice Yahweh el Señor. 4¿Quieres tú juzgarlos? ¿Los quieres juzgar tú, hijo de hombre? Hazles conocer las abominaciones de sus padres, 5y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: El día que escogí a Israel, y que alcé mi mano para jurar a la descendencia de la casa de Jacob, cuando me di a conocer a ellos en la tierra de Egipto, cuando alcé mi mano y les juré diciendo: Yo soy Yahweh vuestro Dios; 6aquel día que les alcé mi mano, jurando así que los sacaría de la tierra de Egipto a la tierra que les había provisto, que fluye leche y miel, la cual es la más hermosa de todas las tierras;

Los ancianos de Israel, que estaban apartados de Yahweh, vinieron a consultarle por el profeta, pero la respuesta que hallaron del Señor fue que no les respondería. En el ver. 31 el Señor les recuerda que haciendo pasar a sus hijos por el fuego contaminaron sus almas con sus ídolos, lo cual simboliza que los padres espirituales hacen pasar a sus hijos por el fuego, pues los crían en levadura, aunque usen la Palabra de Dios, como por ejemplo la rama Católica, que mezcla un poco de Palabra de Dios con sus propios ídolos, no solo físicos con los que adulteran sino que han puestos sus propias ideas y tradiciones, anteponiéndolos a la Biblia, cambiando los diez mandamientos de la Ley de Dios (Éxodo 20 y Deuteronomio 5) compruebenlos Uds. mismos y compárenlos con el Catecismo; y no predican a Cristo como único mediador y camino al Padre, como predican los apóstoles del Señor, no haciendo caso al Señor, y no se arrepienten, no cambian. Por lo tanto cuando pregunten al Señor, no le responderá.

7entonces les dije: Cada uno eche de sí las abominaciones de delante de sus ojos, y no os contaminéis con los ídolos de Egipto. Yo soy Yahweh vuestro Dios. 8Mas ellos se rebelaron contra mí, y no quisieron obedecerme; no echó de sí cada uno las abominaciones de delante de sus ojos, ni dejaron los ídolos de Egipto; y dije que derramaría mi ira sobre ellos, para cumplir mi enojo en ellos en medio de la tierra de Egipto. 9Con todo, a causa de mi nombre, para que no se infamase ante los ojos de las naciones en medio de las cuales estaban, en cuyos ojos fui conocido, actué para sacarlos de la tierra de Egipto. 10Los saqué de la tierra de Egipto, y los traje al desierto, 11y les di mis estatutos, y les hice conocer mis decretos, por los cuales el hombre que los cumpliere vivirá. 12Y les di también mis días de reposo, para que fuesen por señal entre mí y ellos, para que supiesen que yo soy Yahweh que los santifico. 13Mas se rebeló contra mí la casa de Israel en el desierto; no anduvieron en mis estatutos, y desecharon mis decretos, por los cuales el hombre que los cumpliere, vivirá; y mis días de reposo profanaron en gran manera; dije, por tanto, que derramaría sobre ellos mi ira en el desierto para exterminarlos. 14Pero actué a causa de mi nombre, para que no se infamase a la vista de las naciones ante cuyos ojos los había sacado. 15También yo les alcé mi mano en el desierto, jurando que no los traería a la tierra que les había dado, que fluye leche y miel, la cual es la más hermosa de todas las tierras; 16porque desecharon mis decretos, y no anduvieron en mis estatutos, y mis días de reposo profanaron, porque tras sus ídolos iba su corazón. 17Con todo, los perdonó mi ojo, pues no los maté, ni los exterminé en el desierto; 18antes dije en el desierto a sus hijos: No andéis en los estatutos de vuestros padres, ni guardéis sus leyes, ni os contaminéis con sus ídolos. 19Yo soy Yahweh vuestro Dios; andad en mis estatutos, y guardad mis preceptos, y ponedlos por obra; 20y santificad mis días de reposo, y sean por señal entre mí y vosotros, para que sepáis que yo soy Yahweh vuestro Dios. 21Mas los hijos se rebelaron contra mí; no anduvieron en mis estatutos, ni guardaron mis decretos para ponerlos por obra, por los cuales el hombre que los cumpliere vivirá; profanaron mis días de reposo. Dije entonces que derramaría mi ira sobre ellos, para cumplir mi enojo en ellos en el desierto.

Insta el Señor a echar cada uno fuera sus abominaciones y no contaminarse con los ídolos de Egipto, como hacen todos los gobiernos del mundo, creando una macro sociedad que es una gran Babel. El Señor por lo tanto los saca de Egipto y los lleva al desierto y les muestra allí sus estatutos, los aparta del mundo, de esa Babel para que puedan ver; este es el primer paso para salir del mundo. Mas se reveló contra mí la casa de Israel, una vez más. Aquellos que quieran romper con lo que les han dado que no es de Dios, les dice Yahweh: ...No andéis en los estatutos de vuestros padres, (que son los pastores y maestros del pueblo de Dios y de la Iglesia por el mundo), ni guardéis "sus" leyes, ni os contaminéis con sus ídolos... Mas los hijos se revelaron contra mi, dice el Señor en el Ver. 21, de nuevo se obcecan en pecar.

22Mas retraje mi mano a causa de mi nombre, para que no se infamase a la vista de las naciones ante cuyos ojos los había sacado. 23También les alcé yo mi mano en el desierto, jurando que los esparciría entre las naciones, y que los dispersaría por las tierras, 24porque no pusieron por obra mis decretos, sino que desecharon mis estatutos y profanaron mis días de reposo, y tras los ídolos de sus padres se les fueron los ojos. 25Por eso yo también les di estatutos que no eran buenos, y decretos por los cuales no podrían vivir. 26Y los contaminé en sus ofrendas cuando hacían pasar por el fuego a todo primogénito, para desolarlos y hacerles saber que yo soy Yahweh.

Por eso yo también les di estatutos que no eran buenos, y decretos por los cuales no podrían vivir. Terrible la situación a la que llega el hombre ciego por las tradiciones o por su propia visión de Dios, al cual quiere hacer a su entendimiento.

27Por tanto, hijo de hombre, habla a la casa de Israel, y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor:... ...31Porque ofreciendo vuestras ofrendas, haciendo pasar vuestros hijos por el fuego, os habéis contaminado con todos vuestros ídolos hasta hoy; ¿y he de responderos yo, casa de Israel? Vivo yo, dice Yahweh el Señor, que no os responderé. 32Y no ha de ser lo que habéis pensado. Porque vosotros decís: Seamos como las naciones, como las demás familias de la tierra, que sirven al palo y a la piedra. 33Vivo yo, dice Yahweh el Señor, que con mano fuerte y brazo extendido, y enojo derramado, he de reinar sobre vosotros; 34y os sacaré de entre los pueblos, y os reuniré de las tierras en que estáis esparcidos, con mano fuerte y brazo extendido, y enojo derramado; 35y os traeré al desierto de los pueblos, y allí litigaré con vosotros cara a cara. 36Como litigué con vuestros padres en el desierto de la tierra de Egipto, así litigaré con vosotros, dice Yahweh el Señor. 37Os haré pasar bajo la vara, y os haré entrar en los vínculos del pacto; 38y apartaré de entre vosotros a los rebeldes, y a los que se rebelaron contra mí; de la tierra de sus peregrinaciones los sacaré, mas a la tierra de Israel no entrarán; y sabréis que yo soy Yahweh.

Debido a la imposibilidad de cambiar el corazón del hombre Dios actúa y nos promete que: Ver. 34, ...os sacaré de entre los pueblos y os reuniré de las tierras en que estáis esparcidos, con mano fuerte y brazo extendido y enojo derramado; y os traeré al desierto de los pueblos, y allí litigaré con vosotros cara a cara. Ver. 37 Os haré pasar bajo la vara, y os haré entrar en los vínculos del pacto; y apartaré de entre vosotros a los rebeldes...

39Y a vosotros, oh casa de Israel, así ha dicho Yahweh el Señor: Andad cada uno tras sus ídolos, y servidles, si es que a mí no me obedecéis; pero no profanéis más mi santo nombre con vuestras ofrendas y con vuestros ídolos. 40Pero en mi santo monte, en el alto monte de Israel, dice Yahweh el Señor, allí me servirá toda la casa de Israel, toda ella en la tierra; allí los aceptaré, y allí demandaré vuestras ofrendas, y las primicias de vuestros dones, con todas vuestras cosas consagradas. 41Como incienso agradable os aceptaré, cuando os haya sacado de entre los pueblos, y os haya congregado de entre las tierras en que estáis esparcidos; y seré santificado en vosotros a los ojos de las naciones. 42Y sabréis que yo soy Yahweh, cuando os haya traído a la tierra de Israel, la tierra por la cual alcé mi mano jurando que la daría a vuestros padres. 43Y allí os acordaréis de vuestros caminos, y de todos vuestros hechos en que os contaminasteis; y os aborreceréis a vosotros mismos a causa de todos vuestros pecados que cometisteis. 44Y sabréis que yo soy Yahweh, cuando haga con vosotros por amor de mi nombre, no según vuestros caminos malos ni según vuestras perversas obras, oh casa de Israel, dice Yahweh el Señor.

Ver. 40 En mi santo monte alto de Israel me servirá toda la casa de Israel, y ese monte no es donde el pozo de la mujer Samaritana ni en Jerusalén donde adoraremos al Padre, sino en espíritu y en verdad, ese es el monte alto, ver Juan 4:21-23. Como incienso agradable os aceptaré dice el Señor, y os aborreceréis a vosotros mismos a causa de vuestros pecados, como insta Jesús en Lucas 14;26: ...el que no aborrece su propia vida, no puede ser mi discípulo...

Profecía contra el Neguev

45Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 46Hijo de hombre, pon tu rostro hacia el sur, derrama tu palabra hacia la parte austral, profetiza contra el bosque del Neguev. 47Y dirás al bosque del Neguev: Oye la palabra de Yahweh: Así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí que yo enciendo en ti fuego, el cual consumirá en ti todo árbol verde y todo árbol seco; no se apagará la llama del fuego; y serán quemados en ella todos los rostros, desde el sur hasta el norte. 48Y verá toda carne que yo Yahweh lo encendí; no se apagará. 49Y dije: ¡Ah, Señor yahweh! ellos dicen de mí: ¿No profiere éste parábolas?

Jesús dijo: ...Fuego vine a echar en la tierra: ¿y que quiero si ya se ha encendido?... Lucas 12:49.

El bosque del Neguev simboliza la nación de Israel en sequía del alma, pues seco es lo que significa este nombre. A este bosque prende fuego el Señor el cual consumirá a todo árbol verde, la casa de Israel. Toda carne verá que el juicio del fuego lo envió el Señor, pero ellos dicen que esta exhortación es una parábola, del mismo modo que nos dicen muchos cuando se les anuncia su situación ante Dios. No tardan en acontecer los juicios de Dios. Del mismo modo que aquí habla de Israel, también todas las naciones, todas las personan serán pasadas por el fuego de purificación espiritual del Señor, como dicen en Zacarías 13:9.

 

CAPÍTULO 21

La espada afilada de Yahweh

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu rostro contra Jerusalén, y derrama palabra sobre los santuarios, y profetiza contra la tierra de Israel. 3Dirás a la tierra de Israel: Así ha dicho Yahweh: He aquí que yo estoy contra ti, y sacaré mi espada de su vaina, y cortaré de ti al justo y al impío. 4Y por cuanto he de cortar de ti al justo y al impío, por tanto, mi espada saldrá de su vaina contra toda carne, desde el sur hasta el norte. 5Y sabrá toda carne que yo Yahweh saqué mi espada de su vaina; no la envainaré más. 6Y tú, hijo de hombre, gime con quebrantamiento de tus lomos y con amargura; gime delante de los ojos de ellos. 7Y cuando te dijeren: ¿Por qué gimes tú? dirás: Por una noticia que cuando llegue hará que desfallezca todo corazón, y toda mano se debilitará, y se angustiará todo espíritu, y toda rodilla será débil como el agua; he aquí que viene, y se hará, dice Yahweh el Señor. 8Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 9Hijo de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho Yahweh el Señor: Di: La espada, la espada está afilada, y también pulida. 10Para degollar víctimas está afilada, pulida está para que relumbre. ¿Hemos de alegrarnos? Al cetro de mi hijo ha despreciado como a un palo cualquiera. 11Y la dio a pulir para tenerla a mano; la espada está afilada, y está pulida para entregarla en mano del matador. 12Clama y lamenta, oh hijo de hombre; porque ésta será sobre mi pueblo, será ella sobre todos los príncipes de Israel; caerán ellos a espada juntamente con mi pueblo; hiere, pues, tu muslo; 13porque está probado. ¿Y qué, si la espada desprecia aun al cetro? El no será más, dice Yahweh el Señor.

Cortará de Jerusalén al justo y al impío. Jerusalén simboliza la congregación de los santos, dentro de ellas hay justos e impíos. Los justos son los que tratan de cumplir la Ley de Dios, los que por las obras se justifican, y los impíos los que no tienen misericordia de los demás y se justifican a si mismos. El trasfondo puede llegar a ser igual. En realidad lo que el Señor nos quiere decir es que ante su espada afilada, ante la Ley de Dios, nadie puede justificarse, porque si bien en la Torá dice claramente que el que cumpliere todos Sus mandamientos vivirá, también nos enseña Pablo, que podríamos decir que era, maestro, fariseo, conocedor de la Ley y apóstol de Jesucristo por la gracia de Dios, que todos ofendemos muchas veces. Concluimos que así como en el juicio de Dios narrado en Apocalipsis 20, los que se salvan no son los que por sus obras se salvan, sino los inscritos en el libro de la vida del Cordero, los que han venido a Dios de todas las naciones y han comprendido humildemente que no podemos ser perfectos por nuestras propias fuerzas, y que si fallamos, y si otros fallan, es propio de la naturaleza humana, por lo que en Cristo tenemos la fuente de la vida y la fuerza para vivir.

No sirva esto como excusa para pecar, sino sirva para entender que el hombre justo es el que es justificado por la sangre de Jesucristo, y esto reciben todos los que humilde corazón se esfuerzan por ser justos pero entienden su debilidad y la de su prójimo, hayan conocido el Evangelio o no. Sí, todos se encontrarán cara a cara con Cristo, los que ya Le conocemos Le abrazaremos, los que no le han conocido, en esperanza le recibirán, pues vivieron esperando el plan de salvación de Dios.

Al cetro de mi hijo ha despreciado como a palo cualquiera, no han recibido la Ley de Cristo de poner sus vidas por sus hermanos, porque sólo miran justificarse a si mismos y no tienen tiempo para la débil y la que tropieza, son impíos.

La espada desprecia al cetro es que la Ley desprecia al reino que no está establecido en la justicia de Dios. Todo rey que no reine con la Ley de Dios, será cortado.


14Tú, pues, hijo de hombre, profetiza, y bate una mano contra otra, y duplíquese y triplíquese el furor de la espada homicida; esta es la espada de la gran matanza que los traspasará, 15para que el corazón desmaye, y los estragos se multipliquen; en todas las puertas de ellos he puesto espanto de espada. ¡Ah! dispuesta está para que relumbre, y preparada para degollar. 16Corta a la derecha, hiere a la izquierda, adonde quiera que te vuelvas. 17Y yo también batiré mi mano contra mi mano, y haré reposar mi ira. Yo Yahweh he hablado. 18Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 19Tú, hijo de hombre, traza dos caminos por donde venga la espada del rey de Babilonia; de una misma tierra salgan ambos; y pon una señal al comienzo de cada camino, que indique la ciudad adonde va.

Esta es la gran espada de la matanza que los traspasará, la Ley de Dios, que matará sus morales, sus mentes y les dejará sin argumentos en el día del juicio, y aún hoy vienen grandes catástrofes por causa del juicio, no solo a Israel, sino a todas las naciones, porque Cristo dijo: ...no he venido a traer paz, sino espada... Mateo 10:34.

Corta a derecha, hiere a izquierda, esto es lo que encuentran en la Palabra de Dios todos aquellos que vienen a leerla para juzgar lo que Dios dice, sus mentes son dejadas sin entendimiento, la letra los mata, aunque el Espíritu nos vivifica, está en nosotros comer la Biblia con humildad o para probar su sabor, el pan del cielo es Cristo, debemos comer de este pan, pues Él es el verdadero pan del cielo.

20El camino señalarás por donde venga la espada a Rabá de los hijos de Amón, y a Judá contra Jerusalén, la ciudad fortificada. 21Porque el rey de Babilonia se ha detenido en una encrucijada, al principio de los dos caminos, para usar de adivinación; ha sacudido las saetas, consultó a sus ídolos, miró el hígado. 22La adivinación señaló a su mano derecha, sobre Jerusalén, para dar la orden de ataque, para dar comienzo a la matanza, para levantar la voz en grito de guerra, para poner arietes contra las puertas, para levantar vallados, y edificar torres de sitio. 23Mas para ellos esto será como adivinación mentirosa, ya que les ha hecho solemnes juramentos; pero él trae a la memoria la maldad de ellos, para apresarlos. 24Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto habéis hecho traer a la memoria vuestras maldades, manifestando vuestras traiciones, y descubriendo vuestros pecados en todas vuestras obras; por cuanto habéis venido en memoria, seréis entregados en su mano. 25Y tú, profano e impío príncipe de Israel, cuyo día ha llegado ya, el tiempo de la consumación de la maldad, 26así ha dicho Yahweh el Señor: Depón la tiara, quita la corona; esto no será más así; sea exaltado lo bajo, y humillado lo alto. 27A ruina, a ruina, a ruina lo reduciré, y esto no será más, hasta que venga aquel cuyo es el derecho, y yo se lo entregaré.

El rey de Babilonia trae a memoria la maldad de ellos para apresarlos, lo mismo que hace el acusador en un juicio, el fiscal acusa, pero el abogado defiende, los que no tienen a Cristo no tienen abogado. Son entregados en manos del enemigo.

ESPADA TAMBIÉN PARA AMÓN

28Y tú, hijo de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho Yahweh el Señor acerca de los hijos de Amón, y de su oprobio. Dirás, pues: La espada, la espada está desenvainada para degollar; para consumir está pulida con resplandor. 29Te profetizan vanidad, te adivinan mentira, para que la emplees sobre los cuellos de los malos sentenciados a muerte, cuyo día vino en el tiempo de la consumación de la maldad. 30¿La volveré a su vaina? En el lugar donde te criaste, en la tierra donde has vivido, te juzgaré, 31y derramaré sobre ti mi ira; el fuego de mi enojo haré encender sobre ti, y te entregaré en mano de hombres temerarios, artífices de destrucción. 32Serás pasto del fuego, se empapará la tierra de tu sangre; no habrá más memoria de ti, porque yo Yahweh he hablado.

Sobre Amón, la cual es atacada igualmente que Jerusalén porque se han hecho igualmente abominables, y en esto se representan y ponen al mismo nivel a Judíos y a Gentiles. Los Judíos y los Amonitas llegaron a cohabitar juntos, contaminándose con ellos. Amón y Moab los hijos que tuvieron las dos hijas de Lot tras embriagarlo, dos ideas, proyectos, ídolos de religión, su alma se secó porque miró atrás a Sodoma, es la estirpe de la esclavitud a la religión.

 

CAPÍTULO 22

Los pecados de Jerusalén

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Tú, hijo de hombre, ¿no juzgarás tú, no juzgarás tú a la ciudad derramadora de sangre, y le mostrarás todas sus abominaciones? 3Dirás, pues: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ciudad derramadora de sangre en medio de sí, para que venga su hora, y que hizo ídolos contra sí misma para contaminarse! 4En tu sangre que derramaste has pecado, y te has contaminado en tus ídolos que hiciste; y has hecho acercar tu día, y has llegado al término de tus años; por tanto, te he dado en oprobio a las naciones, y en escarnio a todas las tierras. 5Las que están cerca de ti y las que están lejos se reirán de ti, amancillada de nombre, y de grande turbación. 6He aquí que los príncipes de Israel, cada uno según su poder, se esfuerzan en derramar sangre.

¿No juzgarás tu a la ciudad refiriéndose a Jerusalén y le mostrarás sus abominaciones? pues es parte del ministerio del atalaya de Israel, el ministerio de un discípulo, juzgar las almas para exhortarles y predicarles el Evangelio, y a los que ya lo conocen pero se desvían, mostrarles sus abominaciones para que cambien su camino y no se pierdan ellos, ni contaminen a otros.

7Al padre y a la madre despreciaron en ti; al extranjero trataron con violencia en medio de ti; al huérfano y a la viuda despojaron en ti.

Al padre y a la madre despreciaron en ti; al extranjero trataron con violencia en medio de ti; al huérfano y a la viuda despojaron en ti, todo lo contrario a la religión verdadera y sin mancha de Santiago 1:27. Mis santuarios son las almas de todos estos donde el Señor espera para su relación íntima y espiritual con cada una de las almas. Los días de reposo profanados simbolizan a aquellos que no han descansado en Cristo, tanto para la salvación de sus almas como para todo lo demás que pre-ocupa a las personas, incluidas, como no, a las Cristianas. ...Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar... Mateo 11:28. Yahshua es el Shabbath, el que está en Cristo vive en día de reposo, en sábado, porque la obra en Él está hecha y el Señor descansa de convertir a esta alma, mientras tanto la sustenta para la venida de Su reino.

8Mis santuarios menospreciaste, y mis días de reposo has profanado. 9Calumniadores hubo en ti para derramar sangre; y sobre los montes comieron en ti; hicieron en medio de ti perversidades. 10La desnudez del padre descubrieron en ti, y en ti hicieron violencia a la que estaba inmunda por su menstruo. 11Cada uno hizo abominación con la mujer de su prójimo, cada uno contaminó pervertidamente a su nuera, y cada uno violó en ti a su hermana, hija de su padre. 12Precio recibieron en ti para derramar sangre; interés y usura tomaste, y a tus prójimos defraudaste con violencia; te olvidaste de mí, dice Yahweh el Señor.

Esta es la descripción de como aquellos que son calumniadores tratan las almas de su prójimo, almas llamadas: desnudez de sus padres, violencia a la que estaba en su menstruo, abominación, nuera, hermana violada, todas estas son las formas en que se puede dañar al alma de nuestro prójimo, de modo que los abominables pueden desnudar a aquellos que les fueron maestros, hacer violencia al hermano que peca, a los hermanos de otras congregaciones, a sus propios hermanos de coyuntura, etc. La falta de orden en la Iglesia es responsabilidad de los pastores, pues ellos son los que han sido levantados para dar sus vidas por ellas, si son verdaderos, por lo tanto que toda alma ore por los que presiden en la congregación para que sean ungidos, porque falsos hermanos andan encubiertamente para destruir.


...18Hijo de hombre, la casa de Israel se me ha convertido en escoria; todos ellos son bronce y estaño y hierro y plomo en medio del horno; y en escorias de plata se convirtieron. 19Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto todos vosotros os habéis convertido en escorias, por tanto, he aquí que yo os reuniré en medio de Jerusalén. 20Como quien junta plata y bronce y hierro y plomo y estaño en medio del horno, para encender fuego en él para fundirlos, así os juntaré en mi furor y en mi ira, y os pondré allí, y os fundiré... ... 26Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y de mis días de reposo apartaron sus ojos, y yo he sido profanado en medio de ellos...

El Señor acaba su reprensión llamando a Israel escoria, aplicable a la Iglesia también, y a sus miembros piezas de metal que puestos en medio de Jerusalén para ser fundidos. Clamor de arrepentimiento para ser librados de lo que podemos llamar el infierno en el ver. 21 y 22.

Sus sacerdotes violaron Mi ley, dice Yahweh, suena familiar, de nuevo he de recordar que el lector compare los 10 Mandamientos de la Biblia con los del catecismo católico y vea como han violado la Ley de Yahweh, porque dice que no hacen diferencia entre lo santo y lo profano. Al extranjero oprimen, porque olvidan que ellos también fueron extranjeros en Egipto, y todos somos extranjeros al Señor hasta que nos convertimos. El resto hasta el fin del capítulo describe el comportamiento despreciable de un pueblo corrupto, el cual recuerda a la sociedad en la que vivimos, por ello no es de extrañar que vengan juicios como vemos diariamente en las noticias.

 

CAPÍTULO 23

Las dos hermanas

1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, hubo dos mujeres, hijas de una madre, 3las cuales fornicaron en Egipto; en su juventud fornicaron. Allí fueron apretados sus pechos, allí fueron estrujados sus pechos virginales. 4Y se llamaban, la mayor, Ahola, y su hermana, Aholiba; las cuales llegaron a ser mías, y dieron a luz hijos e hijas. Y se llamaron: Samaria, Ahola; y Jerusalén, Aholiba... ...11Y lo vio su hermana Aholiba, y enloqueció de lujuria más que ella; y sus fornicaciones fueron más que las fornicaciones de su hermana. 12Se enamoró de los hijos de los asirios sus vecinos, gobernadores y capitanes, vestidos de ropas y armas excelentes, jinetes que iban a caballo, todos ellos jóvenes codiciables. 13Y vi que se había contaminado; un mismo camino era el de ambas. 14Y aumentó sus fornicaciones; pues cuando vio a hombres pintados en la pared, imágenes de caldeos pintadas de color, 15ceñidos por sus lomos con talabartes, y tiaras de colores en sus cabezas, teniendo todos ellos apariencia de capitanes, a la manera de los hombres de Babilonia, de Caldea, tierra de su nacimiento, 16se enamoró de ellos a primera vista, y les envió mensajeros a la tierra de los caldeos. 17Así, pues, se llegaron a ella los hombres de Babilonia en su lecho de amores, y la contaminaron, y ella también se contaminó con ellos, y su alma se hastió de ellos... ...22Por tanto, Aholiba, así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí que yo suscitaré contra ti a tus amantes, de los cuales se hastió tu alma, y les haré venir contra ti en derredor; 23los de Babilonia, y todos los caldeos, los de Pecod, Soa y Coa, y todos los de Asiria con ellos; jóvenes codiciables, gobernadores y capitanes, nobles y varones de renombre, que montan a caballo todos ellos.

Las dos hermanas fornicarias en Egipto, nos dice que son Samaria y Jerusalén, las capitales de los dos reinos del norte Israel (las 10 tribus) y del sur Judá. Ahola y Aholiba. Tabernáculo en ella y Mi tabernáculo en ella, en Jerusalén, significan estos nombres.

24Y vendrán contra ti carros, carretas y ruedas, y multitud de pueblos. Escudos, paveses y yelmos pondrán contra ti en derredor; y yo pondré delante de ellos el juicio, y por sus leyes te juzgarán... ... 30Estas cosas se harán contigo porque fornicaste en pos de las naciones, con las cuales te contaminaste en sus ídolos. 31En el camino de tu hermana anduviste; yo, pues, pondré su cáliz en tu mano... ...36Y me dijo Yahweh: Hijo de hombre, ¿no juzgarás tú a Ahola y a Aholiba, y les denunciarás sus abominaciones? 37Porque han adulterado, y hay sangre en sus manos, y han fornicado con sus ídolos; y aun a sus hijos que habían dado a luz para mí, hicieron pasar por el fuego, quemándolos. 38Aun esto más me hicieron: contaminaron mi santuario en aquel día, y profanaron mis días de reposo... ...46Por lo que así ha dicho Yahweh el Señor: Yo haré subir contra ellas tropas, las entregaré a turbación y a rapiña, 47y las turbas las apedrearán, y las atravesarán con sus espadas; matarán a sus hijos y a sus hijas, y sus casas consumirán con fuego. 48Y haré cesar la lujuria de la tierra, y escarmentarán todas las mujeres, y no harán según vuestras perversidades. 49Y sobre vosotras pondrán vuestras perversidades, y pagaréis los pecados de vuestra idolatría; y sabréis que yo soy Yahweh el Señor.

Este capítulo es semejante a las advertencias de juicio dadas por Cristo en Mateo 24 y en Apocalipsis 16:16 sobre Armagedón. También el ver. 24 dice: ...Y vendrán contra ti carros, carretas y ruedas, y multitud de pueblos. Escudos, paveses y yelmos pondrán contra ti en derredor; y yo pondré delante de ellos el juicio, y por sus leyes te juzgarán... Esto es lo que ocurrió en el año 70 d.C. con la batalla de Tito, y es lo que está profetizado como Armagedón, hasta que reciban al Mesías Yahshua y lo proclamen a las naciones, lo cual ya comienza por los Mesiánicos.

Del mismo modo no se dan cuenta hoy como antaño, que no pueden contaminarse con las naciones, con sus ideas sin Dios, en un ecumenismo anti-Cristo. Ver. 30.

Estas dos hermanas bien pueden ser la Judía y la Católica, la primera bebe en el cáliz de la segunda. Ver 36 nos pregunta el Señor si juzgaremos a estas dos hermanas o nos quedaremos callados, si no saldremos de ellas, pues claro, si queremos salir del engaño.

...Por lo que así ha dicho Yahweh el Señor: Yo haré subir contra ellas tropas, las entregaré a turbación y a rapiña, y las turbas las apedrearán... Vers 46 y 47. Si Ud. ve las noticias internacionales sobre Palestina, los niños Palestinos apedrean diariamente a los tanques israelíes.

 

CAPÍTULO 24


Parábola de la olla hirviente

1Vino a mí palabra de Yahweh en el año noveno, en el mes décimo, a los diez días del mes, diciendo: 2Hijo de hombre, escribe la fecha de este día; el rey de Babilonia puso sitio a Jerusalén este mismo día. 3Y habla por parábola a la casa rebelde, y diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: Pon una olla, ponla, y echa también en ella agua; 4junta sus piezas de carne en ella; todas buenas piezas, pierna y espalda; llénala de huesos escogidos. 5Toma una oveja escogida, y también enciende los huesos debajo de ella; haz que hierva bien; cuece también sus huesos dentro de ella. 6Pues así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ay de la ciudad de sangres, de la olla herrumbrosa cuya herrumbre no ha sido quitada! Por sus piezas, por sus piezas sácala, sin echar suerte sobre ella. 7Porque su sangre está en medio de ella; sobre una piedra alisada la ha derramado; no la derramó sobre la tierra para que fuese cubierta con polvo. 8Habiendo, pues, hecho subir la ira para hacer venganza, yo pondré su sangre sobre la dura piedra, para que no sea cubierta. 9Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ay de la ciudad de sangres! Pues también haré yo gran hoguera, 10multiplicando la leña, y encendiendo el fuego para consumir la carne y hacer la salsa; y los huesos serán quemados. 11Asentando después la olla vacía sobre sus brasas, para que se caldee, y se queme su fondo, y se funda en ella su suciedad, y se consuma su herrumbre. 12En vano se cansó, y no salió de ella su mucha herrumbre. Sólo en fuego será su herrumbre consumida...

La olla con herrumbre representa sus pecados, y de nuevo y en la misma línea de este profeta, a Jerusalén y a nuestra alma con la mente. Ella fue limpiada por el Señor pero el alma de aquellos que son abominables no quiso limpiarse, no aceptaron la salvación de Cristo con su propia Sangre, prefirieron su propia justicia, por la cual nadie se salará. Su desnudez es patente igualmente que sus pecados, no obstante se empeñan en quedarse en la muerte.

 

Muerte de la esposa de Ezequiel

15Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 16Hijo de hombre, he aquí que yo te quito de golpe el deleite de tus ojos; no endeches, ni llores, ni corran tus lágrimas. 17Reprime el suspirar, no hagas luto de mortuorios; ata tu turbante sobre ti, y pon tus zapatos en tus pies, y no te cubras con rebozo, ni comas pan de enlutados. 18Hablé al pueblo por la mañana, y a la tarde murió mi mujer; y a la mañana hice como me fue mandado. 19Y me dijo el pueblo: ¿No nos enseñarás qué significan para nosotros estas cosas que haces? 20Y yo les dije: La palabra de Yahweh vino a mí, diciendo: 21Di a la casa de Israel: Así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí yo profano mi santuario, la gloria de vuestro poderío, el deseo de vuestros ojos y el deleite de vuestra alma; y vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis caerán a espada. 22Y haréis de la manera que yo hice; no os cubriréis con rebozo, ni comeréis pan de hombres en luto. 23Vuestros turbantes estarán sobre vuestras cabezas, y vuestros zapatos en vuestros pies; no endecharéis ni lloraréis, sino que os consumiréis a causa de vuestras maldades, y gemiréis unos con otros. 24Ezequiel, pues, os será por señal; según todas las cosas que él hizo, haréis; cuando esto ocurra, entonces sabréis que yo soy Yahweh el Señor. 25Y tú, hijo de hombre, el día que yo arrebate a ellos su fortaleza, el gozo de su gloria, el deleite de sus ojos y el anhelo de sus almas, y también sus hijos y sus hijas, 26ese día vendrá a ti uno que haya escapado para traer las noticias. 27En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el fugitivo, y hablarás, y no estarás más mudo; y les serás por señal, y sabrán que yo soy Yahweh.

Muere la esposa de Ezequiel, la esposa del profeta. Esta muerte es una parábola de la muerte de la esposa del Señor, Su pueblo, la Iglesia, los hijos de Dios por Yahshua. También es la muerte de una iglesia o de una congregación, que también es esposa del Señor, y nuestra, que cae muerta por sus abominaciones, por apartarse del camino del Señor y de Su Palabra, por lo cual los miembros son esparcidos y les es derribada su Jerusalén. Muchos hermanos que caminan en Cristo, muchas veces anteponen sus propias ideas, ídolos, a la voluntad del Señor, no se perderán por esto, pero son apartados de la congregación, por un tiempo hasta que reconozcan su error, que es levadura que contamina al resto de hermanos; cuando esto hacen los ancianos de la iglesia, la tal iglesia se cae.

Sirve de anuncio y anticipo de la destrucción de la fortaleza en la que confían ellos, la ciudad de Jerusalén, sus almas con sus ideas propias y su propia moral. Yo te quito de golpe el deleite de tus ojos, dice el Señor, del mismo modo que Él se queda sin el deleite de los suyos porque Su esposa se obceca en morir al Espíritu. No hagas lamentación por ella del mismo modo que Dios no la hará por Jerusalén destruida, porque: ...derribad este templo y Yo en tres días lo levantaré..., porque el templo es Cristo y Cristo en nosotros. Vers hasta el 26.

Ver. 27 Cuando haya venido el mensajero que te informe de la destrucción de las almas, de la destrucción de Jerusalén, cuando veas a un hombre destruido por causa del juicio del Señor porque no hizo la voluntad de Dios, cuando veas a un hermano que ya no sigue el Camino de Dios al cual ya le exhortaste y amonestaste, por el cual has orado, por el cual has sufrido, y no ha cambiado su vida, hablarás con el fugitivo mensajero y no estarás mas mudo. Esta es la situación en la que somos puestos cuando el pueblo de Dios se empeña en seguir su propio camino después de una y otra amonestación; finalmente, una vez esta situación pase les serás por señal, y sabrán que Yo soy Yahweh. Dice el Señor de los ejércitos.

 

CONCLUSIÓN:

Jerusalén, el alma humana, donde Dios construye el templo, para que le adoren en espíritu y en verdad, es invadida por el diablo y su ideas contrarias, para engañar al hombre y hacerle morir al Espíritu. El hombre ha de nacer de nuevo, este nacimiento simboliza la nueva Jerusalén que desciende del cielo con el proyecto de Dios. El hombre no debe construir su propia Jerusalén con sus ideas y proyectos porque el resultado es una Babel y no una Jerusalén. El alma del hombre ha de dejar su mente y dar paso a la mente de Cristo, la cual tiene la verdad. Dios nos enseña por medio de Ezequiel la lucha que lleva por nosotros, que por obcecamiento somos, nacemos, en cautiverio, por la enseñanza de nuestros padres genéticos y espirituales. Él nos llama del cautiverio y de la invasión de los ejércitos del mundo y sus ideas contrarias a Dios, mediante profetas y hermanos, que nos predican el Evangelio de Cristo, el mensaje de la salvación de Dios, para que nos esforcemos en cumplir sus mandamientos y aprendamos a amar con amor de Dios tanto a Él como a nuestro prójimo, con el objetivo de convertirnos en la esposa del Cordero para la eternidad, a la que accedemos por la resurrección o por la transformación en el arrebatamientos, según le toque a cada uno en el tiempo de la venida del Reino de Dios, cuando Cristo venga con sus santos y todo ojo Le vea. Apocalipsis 1:7.

Mi recuerdo especial para Ezequiel, y las gracias al Señor por poner su vida como ejemplo en nuestras vidas con este libro que lleva su nombre, por la labor que tuvo que hacer, nada placentera. Mi oración por aquellos Ezequieles con los que comparto ministerio en la Iglesia, la santa y pura esposa del Cordero, de la cual hemos de sentirnos bendecidos de pertenecer por la gracia de Dios en Cristo, que nos rescató de nuestro cautiverio de Babilonia. La petición al Padre en el nombre de Su Hijo Yahshua, Yeshúa, Jesucristo, para que reúna a todos los hermanos verdaderos y que aparte a los falsos, para que se caigan ya todas las denominaciones, no en un ecumenismo tolerante con toda doctrina falsa, sino con una santificación de los Cristianos, para que alabemos su nombre y para que cuando esto ocurra sepa el otro pueblo de Israel, el físico, que oramos por ellos y por la paz de Jerusalén porque cuando llegue, ellos proclamarán al salvador Yahshua, Jesucristo a las naciones y vendrá el Reino de Dios.

Termina el juicio contra Judíos e Israel y comienza el juicio contra gentiles desde el en Cáp. 25 tras la muerte de la esposa del profeta. Segunda de las tres partes de esta presentación de Ezequiel.

 

 

 

  • Ud. quiere conocer a Dios, pero sabe que el camino no es por la religión organizada, ni por las sectas, ni por la sociedad. El mundo ha fracasado. ...Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son... San Juan 17:9. Oración de Jesús.
  • Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre: Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz. Profecía de Isaías 9:6.
  • Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi. Palabras de Jesucristo. Evangelio según San Juan 14:6. 
  • Si de verdad busca Ud. a Dios, comience hoy una nueva vida, de la verdadera mano de Dios. El Evangelio es el mensaje para todas las naciones, sin importar la raza, la procedencia ni la cultura. Dios es el Salvador de aquellos de la humanidad que le abren su corazón.

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