EZEQUIEL
SACERDOTE Y
PROFETA - SEGUNDA PARTE CAP. 25 AL 39
JUICIOS Y ESPERANZA DE RESTAURACIÓN PARA JUDÍOS Y
GENTILES
La segunda parte del estudio del libro de
Ezequiel nos muestra el juicio de Dios sobre las naciones que se alegran por el
castigo que recibe Israel, y además lo agravan de su propia mano en sus planes
de venganza. Este comportamiento lleva al Señor a castigar fuertemente a las
naciones vecinas. Si bien el castigo del pueblo de Dios, (en la literalidad, el
pueblo de Israel, y en lo espiritual, la Iglesia que se compone de Judíos y
Gentiles que han nacido de nuevo de lo alto y han recibido al Mesías Yahshua,
Jesucristo como su salvador, quien pagó por todos en la cruz), es justo debido a la
desobediencia y obcecación de seguir en sus propios caminos, el objetivo de Dios
con ello es la restauración de todos los que son pueblo suyo, físico o
espiritual, en esta segunda parte entramos a ver que Dios, como no podría ser de
otro modo, advierte a las naciones que rodean a Israel, advirtiéndoles
para que también ellos se arrepientan y abran su corazón convirtiéndose de
verdad, en espíritu, en pueblo de Dios.
El juicio de siete naciones gentiles: Ammón, Moab, Edom, Filistea,
Tiro, Sidón y Egipto, todas ellas con las que ha tratado Israel durante la
historia; naciones de la época que simbolizan todas las naciones del mundo, cada
una de ellas simboliza una cualidad de la civilización gentil, el mundo, del
mismo modo que hoy vemos el G7; antes también había un G7, por decirlo en
términos de nuestro tiempo.
Pero, sin duda
alguna, la revelación espiritual
para la construcción personal de
nuestro templo interior la
encontramos si vemos a estas 7
naciones gentiles como reflejo
de las 7 actitudes del hombre
sin Dios, la cuales estudiaremos
a continuación para
identificarlas y poder luchar
contra ellas, y descubriremos
que en realidad son 6 que
parecen 7. 6 es el número del
mundo y 7 el de Dios, ambos
representan lo acabado y
perfecto de cada uno de ellos,
el sexto día se hizo al hombre,
y el séptimo el descanso, el
Shabbat eterno y espiritual.
Seguidamente la
restauración de Israel como anuncio de la reunión de los dos reinos, de nuevo en
uno, simbolizada en la parábola del valle de los huesos secos,
y posteriormente el regreso a la tierra de Israel, lo cual se cumplió ya la
primera vez antes de Cristo, y en 1948 en nuestra era, y el regreso a Jerusalén con la
construcción del templo y sus ordenanzas, que también se cumplió con el templo
de Herodes; pero esta es una cuestión que habría de ser espiritual, en el alma
del hombre, lo cual vino a anunciar el Mesías, pero el pueblo Judío sigue en la
esperanza de la construcción del templo y sus ordenanzas descrito
desde el Cap. 40 donde comenzará la
tercera y última parte del estudio profético - espiritual de este libro de la
Biblia.
Finaliza esta
segunda parte con otra, incluso
mas fascinante, exposición
apocalíptica del juicio contra
el rey Gog en Magog, lo cual es
una profecía tanto personal,
como contra la sociedad sin Dios
y anticipo del juicio final.
TEXTO BÍBLICO:
Profecía contra Amón
CAPÍTULO
25
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu
rostro hacia los hijos de Amón, y profetiza contra ellos. 3Y
dirás a los hijos de Amón: Oíd palabra de Yahweh el Señor. Así
dice Yahweh el Señor: Por cuanto dijiste: ¡Ea, bien!, cuando
mi santuario era profanado, y la tierra de Israel era
asolada, y llevada en cautiverio la casa de Judá; 4por
tanto, he aquí yo te entrego por heredad a los orientales, y
pondrán en ti sus apriscos y plantarán en ti sus tiendas; ellos
comerán tus sementeras, y beberán tu leche. 5Y pondré a Rabá por
habitación de camellos, y a los hijos de Amón por majada de
ovejas; y sabréis que yo soy Yahweh. 6Porque así ha dicho Yahweh
el Señor: Por cuanto batiste tus manos, y golpeaste con tu pie,
y te gozaste en el alma con todo tu menosprecio para la tierra
de Israel, 7por tanto, he aquí yo extenderé mi mano contra ti, y
te entregaré a las naciones para ser saqueada; te cortaré de
entre los pueblos, y te destruiré de entre las tierras; te
exterminaré, y sabrás que yo soy Yahweh.
Tal y como hemos visto a
través del enfoque de la introducción, el comportamiento del
hombre sin Dios le lleva a convertirse en enemigo de Dios, a
alegrarse en las miserias de los juicios de su prójimo, aquí
pueblo de Dios. El hombre no se da cuenta de que todos seremos
juzgados y de que en realidad, al final, todo hombre es
potencialmente pueblo de Dios, y que Dios no hace acepción de
personas. Por lo tanto Amón simboliza el espíritu contrario a
Israel de Dios, sea físico o espiritual, la Iglesia. Lo
reconocemos en el odio de Ismael hacia Isaac, y en el imperio
Romano contra los Cristianos.
Profecía contra Moab
8Así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto dijo Moab y Seir:
He aquí la casa de Judá es como todas las naciones; 9por
tanto, he aquí yo abro el lado de Moab desde las ciudades,
desde sus ciudades que están en su confín, las tierras deseables
de Bet-jesimot, Baal-meón y Quiriataim, 10a los hijos
del oriente contra los hijos de Amón; y la entregaré por
heredad, para que no haya más memoria de los hijos de Amón
entre las naciones. 11También en Moab haré juicios, y
sabrán que yo soy Yahweh.
Es aquí, en Moab, donde vemos
el mismo comportamiento que en Amón, y no es de extrañar pues
son hermanos de padre: Lot. Éste tuvo dos hijos, uno con
cada una de sus hijas en la cueva, al escapar de Sodoma. Ambos
son las dos ideas de religión de Lot, al cual ya se le secó el
alma (simbolizado en la estatua de sal de su esposa, cuando miró
atrás).
Estos dos pueblos, ideas para
nosotros, en el campo espiritual, hay que luchar contra ellas,
porque son el símbolo de nuestro apego a lo anterior, a lo
conocido, aunque malo, aunque sin Dios, pero conocido. El miedo
a lo desconocido aunque sea de parte de Dios, de este modo el
diablo gana una batalla importante al impedir al hombre obedecer
a Dios usando el temor, pero la Palabra nos habla de que donde
hay amor, no hay temor.
Profecía contra Edom
12Así ha dicho Yahweh el Señor: Por lo que hizo Edom, tomando
venganza de la casa de Judá, pues delinquieron en
extremo, y se vengaron de ellos; 13por tanto, así ha dicho
Yahweh el Señor: Yo también extenderé mi mano sobre Edom, y
cortaré de ella hombres y bestias, y la asolaré; desde Temán
hasta Dedán caerán a espada. 14Y pondré mi venganza
contra Edom en manos de mi pueblo Israel, y harán en Edom
según mi enojo y conforme a mi ira; y conocerán mi venganza,
dice Yahweh el Señor.
En Edom nos encontramos la
actitud de odio por venganza, y este ejecutado contra Israel que
pasa de un sentimiento o enemistad a la fase de acción enemiga.
Edom es la tierra de los hijos de Esaú, hermano de Jacob, (a
Jacob amé, mas a Esaú aborrecí) que en un tiempo fueron
aliados de Israel y Judá en contra de Moab pero que se revelaron
en otro tiempo de otro reinado.
Profecía contra los filisteos
15Así ha dicho Yahweh el Señor: Por lo que hicieron los
filisteos con venganza, cuando se vengaron con despecho de
ánimo, destruyendo por antiguas enemistades; 16por tanto,
así ha dicho Yahweh: He aquí yo extiendo mi mano contra los
filisteos, y cortaré a los cereteos, y destruiré el resto que
queda en la costa del mar. 17Y haré en ellos grandes venganzas
con reprensiones de ira; y sabrán que yo soy Yahweh, cuando haga
mi venganza en ellos.
Filisteos o cereteos, nación de Goliat
(rencorosos pues destruyen por antiguas enemistades) el
Señor destruye a los que esto hacen. Por muy
fuertes que sean, como el famoso gigante, la fe en Dios y Su
protección siempre nos librará de nuestros propios enemigos,
nuestros miedos, nuestras limitaciones, nuestros Goliat.
Todo aquello infranqueable para nosotros pero que está en el
plan de Dios para nuestras vidas, lo vence Dios por nosotros
si tenemos fe, y lanzamos la piedra en la frente o mente de
aquellos que por antiguas enemistades nos aborrecen. Jesús
nos enseña a no tener en cuenta el pecado que hagan contra
nosotros, si piden perdón debemos perdonar hasta setenta
veces siete.
Profecía contra Tiro
CAPÍTULO 26
1Aconteció en el undécimo año, en el día primero del mes, que vino a mí palabra
de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, por cuanto dijo Tiro contra Jerusalén:
Ea,
bien; quebrantada está la que era puerta de las naciones; a mí se volvió; yo
seré llena, y ella desierta; 3por tanto, así ha dicho
Yahweh el Señor: He aquí
yo estoy contra ti, oh Tiro, y haré subir contra ti muchas naciones, como el mar
hace subir sus olas. 4Y demolerán los muros de Tiro, y derribarán sus torres;
y
barreré de ella hasta su polvo, y la dejaré como una peña lisa. 5Tendedero de
redes será en medio del mar, porque yo he hablado, dice Yahweh el Señor; y será
saqueada por las naciones. 6Y sus hijas que están en el campo serán muertas a
espada; y sabrán que yo soy Yahweh. 7Porque así ha dicho
Yahweh el Señor: He aquí que del norte traigo yo contra Tiro a Nabucodonosor rey
de Babilonia, rey de reyes, con caballos y carros y jinetes, y tropas y mucho
pueblo. 8Matará a espada a tus hijas que están en el campo, y pondrá contra ti
torres de sitio, y levantará contra ti baluarte, y escudo afirmará contra ti. 9Y
pondrá contra ti arietes, contra tus muros, y tus torres destruirá con hachas.
10Por la multitud de sus caballos te cubrirá el polvo de ellos; con el estruendo
de su caballería y de las ruedas y de los carros, temblarán tus muros, cuando
entre por tus puertas como por portillos de ciudad destruida. 11Con los cascos
de sus caballos hollará todas tus calles; a tu pueblo matará a filo de espada, y
tus fuertes columnas caerán a tierra. 12Y robarán tus riquezas y saquearán tus
mercaderías; arruinarán tus muros, y tus casas preciosas destruirán; y pondrán
tus piedras y tu madera y tu polvo en medio de las aguas. 13Y haré cesar el
estrépito de tus canciones, y no se oirá más el son de tus cítaras. 14Y te
pondré como una peña lisa; tendedero de redes serás, y nunca más serás
edificada; porque yo Yahweh he hablado, dice
Yahweh el Señor.
15Así ha dicho Yahweh el Señor a Tiro: ¿No se estremecerán las costas al
estruendo de tu caída, cuando griten los heridos, cuando se haga la matanza en
medio de ti? 16Entonces todos los príncipes del mar descenderán de sus tronos, y
se quitarán sus mantos, y desnudarán sus ropas bordadas; de espanto se vestirán,
se sentarán sobre la tierra, y temblarán a cada momento, y estarán atónitos
sobre ti. 17Y levantarán sobre ti endechas, y te dirán: ¿Cómo pereciste tú,
poblada por gente de mar, ciudad que era alabada, que era fuerte en el mar, ella
y sus habitantes, que infundían terror a todos los que la rodeaban? 18Ahora se
estremecerán las islas en el día de tu caída; sí, las islas que están en el mar
se espantarán a causa de tu fin. 19Porque así ha dicho
Yahweh el Señor: Yo te convertiré en ciudad asolada, como las ciudades que no se
habitan; haré subir sobre ti el abismo, y las muchas aguas te cubrirán. 20Y te
haré descender con los que descienden al sepulcro, con los pueblos de otros
siglos, y te pondré en las profundidades de la tierra, como los desiertos
antiguos, con los que descienden al sepulcro, para que nunca más seas poblada; y
daré gloria en la tierra de los vivientes. 21Te convertiré en espanto, y dejarás
de ser; serás buscada, y nunca más serás hallada, dice
Yahweh el Señor.
Tiro, llamada puerta de las naciones, Dios está contra ella y la
castiga con Babilonia, es decir, Dios entrega al hombre a la
esclavitud religiosa, porque él se había hecho esclavo del
mundo. v8 matará a tus hijas (ideas, proyectos)
v19 hará subir el
abismo contra ella, la mente-alma que no tiene a
Dios. Conclusión: Tiro
es el proyecto del hombre
derribado por Dios. Vea también el estudio sobre
Europa/Tiro.
Tiro es en el hombre la
actitud de compararse siempre con los bienes de este mundo, para
así identificar las bendiciones de Dios. Para identificar esta
actitud, hay un nombre ideal: evangelio de la prosperidad, muy
típico en las sociedades protestantes donde se reclama el diezmo
para que Dios nos prospere económicamente, lo cual es correcto y
de Dios, pero una gran parte de la Iglesia en el mundo, y esto
es lo triste de la actitud Tiro, piensan que cuando un hermano
no tiene éxito y prosperidad económica es porque no es bendecido
por Dios, y esto no es correcto. Si leen el párrafo de Tiro verán que este es el
principio de la actitud por la cual Dios traerá ruina y
destrucción al hombre, entregándolo a Babilonia en esclavitud
religiosa y muerte espiritual, por su actitud contra Jerusalén,
el alma del discípulo de Cristo. Por lo tanto por medio de este
estudio queda hecho un llamamiento al amor a los hermanos sin
mirar su situación económica, y a la humildad.
CAPÍTULO 27
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Tú, hijo de hombre,
levanta endechas sobre Tiro. 3Dirás a Tiro, que está asentada a
las orillas del mar, la que trafica con los pueblos de muchas
costas: Así ha dicho Yahweh el Señor: Tiro, tú has dicho: Yo soy
de perfecta hermosura. 4En el corazón de los mares están tus
confines; los que te edificaron completaron tu belleza. 5De
hayas del monte Senir te fabricaron todo el maderaje; tomaron
cedros del Líbano para hacerte el mástil. 6De encinas de Basán
hicieron tus remos; tus bancos de pino de las costas de Quitim,
incrustados de marfil. 7De lino fino bordado de Egipto era tu
cortina, para que te sirviese de vela; de azul y púrpura de las
costas de Elisa era tu pabellón. 8Los moradores de Sidón y de
Arvad fueron tus remeros; tus sabios, oh Tiro, estaban en ti;
ellos fueron tus pilotos. 9Los ancianos de Gebal y sus más
hábiles obreros calafateaban tus junturas; todas las naves del
mar y los remeros de ellas fueron a ti para negociar, para
participar de tus negocios. 10Persas y
los de Lud y Fut fueron en tu ejército tus hombres de guerra;
escudos y yelmos colgaron en ti; ellos te dieron tu esplendor.
11Y los hijos de Arvad con tu ejército estuvieron sobre tus
muros alrededor, y los gamadeos en tus torres; sus escudos
colgaron sobre tus muros alrededor; ellos completaron tu
hermosura. 12Tarsis comerciaba contigo
por la abundancia de todas tus riquezas; con plata, hierro,
estaño y plomo comerciaba en tus ferias. 13Javán, Tubal y Mesec
comerciaban también contigo; con hombres y con utensilios de
bronce comerciaban en tus ferias. 14Los de la casa de Togarma,
con caballos y corceles de guerra y mulos, comerciaban en tu
mercado. 15Los hijos de Dedán traficaban contigo; muchas costas
tomaban mercadería de tu mano; colmillos de marfil y ébano te
dieron por sus pagos. 16Edom traficaba contigo por la multitud
de tus productos; con perlas, púrpura, vestidos bordados, linos
finos, corales y rubíes venía a tus ferias. 17Judá y la tierra
de Israel comerciaban contigo; con trigos de Minit y Panag,
miel, aceite y resina negociaban en tus mercados. 18Damasco
comerciaba contigo por tus muchos productos, por la abundancia
de toda riqueza; con vino de Helbón y lana blanca negociaban.
19Asimismo Dan y el errante Javán vinieron a tus ferias, para
negociar en tu mercado con hierro labrado, mirra destilada y
caña aromática. 20Dedán comerciaba contigo en paños preciosos
para carros. 21Arabia y todos los príncipes de Cedar traficaban
contigo en corderos y carneros y machos cabríos; en estas cosas
fueron tus mercaderes. 22Los mercaderes de Sabá y de Raama
fueron también tus mercaderes; con lo principal de toda
especiería, y toda piedra preciosa, y oro, vinieron a tus
ferias. 23Harán, Cane, Edén, y los mercaderes de Sabá, de Asiria
y de Quilmad, contrataban contigo. 24Estos mercaderes tuyos
negociaban contigo en varias cosas; en mantos de azul y
bordados, y en cajas de ropas preciosas, enlazadas con cordones,
y en madera de cedro. 25Las naves de
Tarsis eran como tus caravanas que traían tus mercancías; así
llegaste a ser opulenta, te multiplicaste en gran manera en
medio de los mares. 26En muchas aguas te engolfaron tus remeros;
viento solano te quebrantó en medio de los mares. 27Tus
riquezas, tus mercaderías, tu tráfico, tus remeros, tus pilotos,
tus calafateadores y los agentes de tus negocios, y todos tus
hombres de guerra que hay en ti, con toda tu compañía que en
medio de ti se halla, caerán en medio de los mares el día de tu
caída. 28Al estrépito de las voces de tus marineros temblarán
las costas. 29Descenderán de sus naves todos los que toman remo;
remeros y todos los pilotos del mar se quedarán en tierra, 30y
harán oír su voz sobre ti, y gritarán amargamente, y echarán
polvo sobre sus cabezas, y se revolcarán en ceniza. 31Se raerán
por ti los cabellos, se ceñirán de cilicio, y endecharán por ti
endechas amargas, con amargura del alma. 32Y levantarán sobre ti
endechas en sus lamentaciones, y endecharán sobre ti, diciendo:
¿Quién como Tiro, como la destruida en medio del mar? 33Cuando
tus mercaderías salían de las naves, saciabas a muchos pueblos;
a los reyes de la tierra enriqueciste con la multitud de tus
riquezas y de tu comercio. 34En el tiempo en que seas
quebrantada por los mares en lo profundo de las aguas, tu
comercio y toda tu compañía caerán en medio de ti. 35Todos los
moradores de las costas se maravillarán sobre ti, y sus reyes
temblarán de espanto; demudarán sus rostros. 36Los mercaderes en
los pueblos silbarán contra ti; vendrás a ser espanto, y para
siempre dejarás de ser.
Tiro, pues, es una institución
que domina la mente humana. v3 De perfecta hermosura cree la humanidad que
es su proyecto. Después describe las características de las
naciones con las cuales se ha hecho el proyecto, parece hoy día
la comunidad internacional del comercio, mas
la ONU, USA, UE, la
bestia económica; hasta el
v27 que describe la destrucción de todo esto.
Los grandes centros comerciales que hoy en día
existen por todo el mundo, con cadenas de marcas
internacionales, todo un entramado, red, telaraña, web, del
negocio y el comercio en la que confía el hombre. El petróleo,
la bolsa, y otros agentes económicos son los pilares del mundo
de la macro economía global. Todo esto se caerá, el hombre que
conoce a Dios se da cuenta de toda la maldad que se deja atrás
para llevar adelante este barco Tiro, del comercio: se deja sin
recursos a países, mientras les dan armas y alimentan conflictos
étnicos para entretenerlos; se expanden enfermedades de
laboratorio para aniquilar pueblos por el mismo motivo, se deja
morir de hambre a millones de niños para que el ciudadano del
mundo "desarrollado" consuma y no se preocupe de lo que hay detrás.
CAPÍTULO 28
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, di
al
príncipe de Tiro: Así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto se
enalteció tu corazón, y dijiste: Yo soy un dios, en el trono de
Dios estoy sentado en medio de los mares
(siendo tú hombre y no
Dios), y has puesto tu corazón como corazón de Dios; 3he aquí
que tú eres más sabio que Daniel; no hay secreto que te sea
oculto. 4Con tu sabiduría y con tu prudencia has acumulado
riquezas, y has adquirido oro y plata en tus tesoros. 5Con la
grandeza de tu sabiduría en tus contrataciones has multiplicado
tus riquezas; y a causa de tus riquezas se ha enaltecido tu
corazón. 6Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto
pusiste tu corazón como corazón de Dios, 7por tanto, he aquí yo
traigo sobre ti extranjeros, los fuertes de las naciones, que
desenvainarán sus espadas contra la hermosura de tu sabiduría, y
mancharán tu esplendor. 8Al sepulcro te harán descender, y
morirás con la muerte de los que mueren en medio de los mares.
9¿Hablarás delante del que te mate, diciendo: Yo soy Dios?
Tú,
hombre eres, y no Dios, en la mano de tu matador. 10De muerte de
incircuncisos morirás por mano de extranjeros; porque yo he
hablado, dice Yahweh el Señor. 11Vino a
mí palabra de Yahweh, diciendo: 12Hijo de hombre, levanta
endechas sobre el rey de Tiro, y dile: Así ha dicho
Yahweh el
Señor:
Descripción de Satanás,
Luci-fer: Dijiste: yo soy dios y en el trono de Dios estoy sentado,
siendo tu hombre y no Dios y has puesto tu corazón como
corazón de Dios. Este es el anti-Cristo.
v12 Descripción de
Satanás: 10 piedras preciosas, v12. Descripción que se
aplica a los santos que caen del camino de Cristo.
Tú eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y
acabado de hermosura. 13En Edén, en el huerto de Dios estuviste;
de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio,
jaspe, crisólito, berilo y ónice; de zafiro, carbunclo,
esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas
estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. 14Tú,
querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de
Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te
paseabas. 15Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que
fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad. 16A causa de la
multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y
pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de
entre las piedras del fuego, oh querubín protector. 17Se
enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu
sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojaré por tierra;
delante de los reyes te pondré para que miren en ti. 18Con la
multitud de tus maldades y con la iniquidad de tus
contrataciones profanaste tu santuario; yo, pues, saqué fuego de
en medio de ti, el cual te consumió, y te puse en ceniza sobre
la tierra a los ojos de todos los que te miran. 19Todos los que
te conocieron de entre los pueblos se maravillarán sobre ti;
espanto serás, y para siempre dejarás de ser.
El que engaña a
todas las naciones, todos se asombrarán cuando vean que
habían confiado en él, y que era en realidad él quien estaba
detrás del proyecto e idea en la que la humanidad había
creído y aceptado como proyecto propio, siendo del
engañador, y le verán descender al abismo y dejará de ser.
Profecía contra Sidón
20Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 21Hijo de hombre,
pon
tu rostro hacia Sidón, y profetiza contra ella, 22y dirás: Así
ha dicho Yahweh el Señor: He aquí yo estoy contra ti, oh Sidón,
y en medio de ti seré glorificado; y sabrán que yo soy
Yahweh,
cuando haga en ella juicios, y en ella me santifique. 23Enviaré
a ella pestilencia y sangre en sus calles, y caerán muertos en
medio de ella, con espada contra ella por todos lados; y sabrán
que yo soy Yahweh. 24Y nunca más será a
la casa de Israel espina desgarradora, ni aguijón que le dé
dolor, en medio de cuantos la rodean y la menosprecian; y sabrán
que yo soy Yahweh. 25Así ha dicho
Yahweh
el Señor: Cuando recoja a la casa de Israel de los pueblos entre
los cuales está esparcida, entonces me santificaré en ellos ante
los ojos de las naciones, y habitarán en su tierra, la cual di a
mi siervo Jacob. 26Y habitarán en ella seguros, y edificarán
casas, y plantarán viñas, y vivirán confiadamente, cuando yo
haga juicios en todos los que los despojan en sus alrededores; y
sabrán que yo soy Yahweh su Dios.
Hemos visto en el quinto
comportamiento, en Tiro, que el príncipe de ese proyecto, el
dominador de ese comportamiento en la humanidad es el mismo
diablo, el cual es descrito como ángel protector, que por su
envanecimiento cayó de su dignidad. El hombre puede tener la
misma actitud y quedarse en la soberbia, o puede arrepentirse y
no confiar en el mundo, para hacerlo en Dios, que vendrá en Su
reino.
Del mismo modo Sidón, que
aunque durante un tiempo estuvo sometida bajo Tiro, se convirtió
en toda una autoridad comercial también. Se dice de ella que era
espina desgarradora y aguijón que le daba dolor. Al parecer
también eran Fenicios, pueblo limítrofe que atormentaban. Sidón
es también el primogénito de Canaan, la tierra donde habitaría
Israel. Son por lo tanto parientes. Esto es la actitud de
despreciar a los parientes cuando predicamos el Evangelio, no
somos profetas en nuestra propia tierra.
Profecías contra Egipto
CAPÍTULO 29
1En el año décimo, en el mes décimo, a los doce días del mes,
vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu
rostro contra Faraón rey de Egipto, y profetiza contra él y
contra todo Egipto. 3Habla, y di: Así ha dicho
Yahweh el Señor:
He aquí yo estoy contra ti, Faraón rey de Egipto, el gran dragón
que yace en medio de sus ríos, el cual dijo: Mío es el Nilo,
pues yo lo hice. 4Yo, pues, pondré garfios en tus quijadas, y
pegaré los peces de tus ríos a tus escamas, y te sacaré de en
medio de tus ríos, y todos los peces de tus ríos saldrán pegados
a tus escamas. 5Y te dejaré en el desierto a ti y a todos los
peces de tus ríos; sobre la faz del campo caerás; no serás
recogido, ni serás juntado; a las fieras de la tierra y a las
aves del cielo te he dado por comida. 6Y
sabrán todos los moradores de Egipto que yo soy
Yahweh, por
cuanto fueron báculo de caña a la casa de Israel. 7Cuando te
tomaron con la mano, te quebraste, y les rompiste todo el
hombro; y cuando se apoyaron en ti, te quebraste, y les rompiste
sus lomos enteramente. 8Por tanto, así ha
dicho Yahweh el Señor: He aquí que yo traigo contra ti espada, y
cortaré de ti hombres y bestias. 9Y la tierra de Egipto será
asolada y desierta, y sabrán que yo soy
Yahweh; por cuanto dijo:
El Nilo es mío, y yo lo hice. 10Por tanto, he aquí yo estoy
contra ti, y contra tus ríos; y pondré la tierra de Egipto en
desolación, en la soledad del desierto, desde Migdol hasta
Sevene, hasta el límite de Etiopía. 11No pasará por ella pie de
hombre, ni pie de animal pasará por ella, ni será habitada, por
cuarenta años. 12Y pondré a la tierra de Egipto en soledad entre
las tierras asoladas, y sus ciudades entre las ciudades
destruidas estarán desoladas por cuarenta años; y esparciré a
Egipto entre las naciones, y lo dispersaré por las
tierras.13Porque así ha dicho Yahweh el Señor:
Al fin de
cuarenta años recogeré a Egipto de entre los pueblos entre los
cuales fueren esparcidos; 14y volveré a traer los cautivos de
Egipto, y los llevaré a la tierra de Patros, a la tierra de su
origen; y allí serán un reino despreciable. 15En comparación con
los otros reinos será humilde; nunca más se alzará sobre las
naciones; porque yo los disminuiré, para que no vuelvan a tener
dominio sobre las naciones. 16Y no será ya más para la casa de
Israel apoyo de confianza, que les haga recordar el pecado de
mirar en pos de ellos; y sabrán que yo soy
Yahweh el Señor.
17Aconteció en el año veintisiete en el mes primero, el
día primero del mes, que vino a mí palabra de
Yahweh, diciendo:
18Hijo de hombre, Nabucodonosor rey de Babilonia hizo a su
ejército prestar un arduo servicio contra Tiro. Toda cabeza ha
quedado calva, y toda espalda desollada; y ni para él ni para su
ejército hubo paga de Tiro, por el servicio que prestó contra
ella. 19Por tanto, así ha dicho Yahweh el Señor;
He aquí que yo
doy a Nabucodonosor, rey de Babilonia, la tierra de Egipto; y él
tomará sus riquezas, y recogerá sus despojos, y arrebatará
botín, y habrá paga para su ejército. 20Por su trabajo con que
sirvió contra ella le he dado la tierra de Egipto; porque
trabajaron para mí, dice Yahweh el Señor.
21En aquel tiempo haré retoñar el poder de la casa de Israel. Y
abriré tu boca en medio de ellos, y sabrán que yo soy
Yahweh.
Egipto simboliza el carácter definitivo del hombre sin Dios,
la confianza en si mismo del hombre como si fuera dios, ya que
Faraón se consideraba dios mismo.
Faraón rey de Egipto es
descrito en
la Palabra como el gran dragón, el diablo,
rey
del mundo. v4 Sus
ríos,
gente y doctrinas paganas se
secarán y sus peces morirán.
Su proyecto es destruido,
como el de todos los que
confían en el mundo.
v14 los
volverá a su tierra (tras la
ocupación Árabe y de
Alejandro magno) y será una
nación despreciable. Hoy ya
no son los dominadores sino
meros mediadores históricos.
Volverán a la tierra de Patros. Es una
contraposición con Israel,
la Iglesia que será traída a
su presencia y defendida del
mal, y Egipto, será llevado
a mala tierra y serán
despreciables,
v16 y ya no
serán para la casa de
Israel, la Iglesia, la mente
del hombre que es santo, de
apoyo nunca más, (no mirar
atrás como Lot) no debe
confiar el hombre en su
pasada experiencia sin Dios,
no debe confiar en el mundo.
CAPÍTULO 30
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre,
profetiza, y di: Así ha dicho Yahweh el Señor: Lamentad: ¡Ay de
aquel día! 3Porque cerca está el día, cerca está el día de
Yahweh; día de nublado,
día de castigo de las naciones será. 4Y
vendrá espada a Egipto, y habrá miedo en Etiopía, cuando caigan
heridos en Egipto; y tomarán sus riquezas, y serán destruidos
sus fundamentos. 5Etiopía, Fut, Lud, toda Arabia, Libia, y los
hijos de las tierras aliadas, caerán con ellos a filo de espada.
6Así ha dicho Yahweh: También caerán los que sostienen a Egipto,
y la altivez de su poderío caerá; desde Migdol hasta Sevene
caerán en él a filo de espada, dice Yahweh el Señor. 7Y serán
asolados entre las tierras asoladas, y sus ciudades serán entre
las ciudades desiertas. 8Y sabrán que yo soy
Yahweh, cuando
ponga fuego a Egipto, y sean quebrantados todos sus ayudadores.
9En aquel tiempo saldrán mensajeros de delante de mí en naves,
para espantar a Etiopía la confiada, y tendrán espanto como en
el día de Egipto; porque he aquí viene.
10Así ha dicho Yahweh el Señor: Destruiré las riquezas de Egipto
por mano de Nabucodonosor rey de Babilonia. 11El, y con él su
pueblo, los más fuertes de las naciones, serán traídos para
destruir la tierra; y desenvainarán sus espadas sobre Egipto, y
llenarán de muertos la tierra. 12Y secaré los ríos, y entregaré
la tierra en manos de malos, y por mano de extranjeros destruiré
la tierra y cuanto en ella hay. Yo Yahweh he hablado.
13Así ha dicho Yahweh el Señor: Destruiré también las
imágenes, y destruiré los ídolos de Menfis; y no habrá más
príncipe de la tierra de Egipto, y en la tierra de Egipto pondré
temor. 14Asolaré a Patros, y pondré fuego a Zoán, y haré juicios
en Tebas. 15Y derramaré mi ira sobre Sin, fortaleza de Egipto, y
exterminaré a la multitud de Tebas. 16Y pondré fuego a Egipto;
Sin tendrá gran dolor, y Tebas será destrozada, y Menfis tendrá
continuas angustias. 17Los jóvenes de Avén y de Pibeset caerán a
filo de espada, y las mujeres irán en cautiverio. 18Y en Tafnes
se oscurecerá el día, cuando quebrante yo allí el poder de
Egipto, y cesará en ella la soberbia de su poderío; tiniebla la
cubrirá, y los moradores de sus aldeas irán en cautiverio.
19Haré, pues, juicios en Egipto, y sabrán que yo soy
Yahweh.
20Aconteció en el año undécimo, en el mes primero, a los
siete días del mes, que vino a mí palabra de
Yahweh, diciendo:
21Hijo de hombre, he quebrado el brazo de Faraón rey de Egipto;
y he aquí que no ha sido vendado poniéndole medicinas, ni
poniéndole faja para ligarlo, a fin de fortalecerlo para que
pueda sostener la espada. 22Por tanto, así ha dicho
Yahweh el
Señor: Heme aquí contra Faraón rey de Egipto, y quebraré sus
brazos, el fuerte y el fracturado, y haré que la espada se le
caiga de la mano. 23Y esparciré a los egipcios entre las
naciones, y los dispersaré por las tierras. 24Y fortaleceré los
brazos del rey de Babilonia, y pondré mi espada en su mano; mas
quebraré los brazos de Faraón, y delante de aquél gemirá con
gemidos de herido de muerte. 25Fortaleceré, pues, los brazos del
rey de Babilonia, y los brazos de Faraón caerán; y sabrán que yo
soy Yahweh, cuando yo ponga mi espada en la mano del rey de
Babilonia, y él la extienda contra la tierra de Egipto. 26Y
esparciré a los egipcios entre las naciones, y los dispersaré
por las tierras; y sabrán que yo soy Yahweh.
Resumen del castigo de todas
las naciones, especialmente
las que han participado en
la historia de Israel,
paralelismo de lo que ellas
significan contra la
Iglesia. También habla de la
caída a espada (guerra) de
las naciones árabes, puede
ser la última guerra de
occidente contra ellos.
Desde Migdol hasta Sevene
caerán a filo de espada.
v9Etiopía la confiada,
dicen que
tienen
el Arca del
pacto (pero serán
destruidos)
v13 destruirá las
imágenes e ídolos, sus ideas
y su falsos dioses, la
idolatría de la mente sin
Dios. Menfis.
v20 el brazo de Faraón
ya no puede sostener la
espada, su ley del mundo, su
fuerza religiosa, etc, todo
cae. v24 El Señor pondría la
espada Suya en el brazo fortalecido por
el del rey
de Babilonia, y
el rey la
extenderá contra el rey de
Egipto. La Ley de Dios vence
a la ley del hombre el cual
será esparcido por el mundo,
como hoy hay millones en el
mundo con su propia ley y
fracasan.
CAPÍTULO 31
1Aconteció en el año undécimo, en el mes tercero, el día primero
del mes, que vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de
hombre, di a Faraón rey de Egipto, y a su pueblo: ¿A quién te
comparaste en tu grandeza? 3He aquí era el asirio cedro en el
Líbano, de hermosas ramas, de frondoso ramaje y de grande
altura, y su copa estaba entre densas ramas. 4Las aguas lo
hicieron crecer, lo encumbró el abismo; sus ríos corrían
alrededor de su pie, y a todos los árboles del campo enviaba sus
corrientes. 5Por tanto, se encumbró su altura sobre todos los
árboles del campo, y se multiplicaron sus ramas, y a causa de
las muchas aguas se alargó su ramaje que había echado. 6En sus
ramas hacían nido todas las aves del cielo, y debajo de su
ramaje parían todas las bestias del campo, y a su sombra
habitaban muchas naciones. 7Se hizo, pues, hermoso en su
grandeza con la extensión de sus ramas; porque su raíz estaba
junto a muchas aguas. 8Los cedros no lo cubrieron
en el huerto
de Dios; las hayas no fueron semejantes a sus ramas, ni los
castaños fueron semejantes a su ramaje; ningún árbol en el
huerto de Dios fue semejante a él en su hermosura. 9Lo hice
hermoso con la multitud de sus ramas; y todos los árboles del
Edén, que estaban en el huerto de Dios, tuvieron de él envidia.
10Por tanto, así dijo Yahweh el Señor:
Ya que por ser
encumbrado en altura, y haber levantado su cumbre entre densas
ramas, su corazón se elevó con su altura, 11yo lo entregaré en
manos del poderoso de las naciones, que de cierto le tratará
según su maldad. Yo lo he desechado. 12Y lo destruirán
extranjeros, los poderosos de las naciones, y lo derribarán; sus
ramas caerán sobre los montes y por todos los valles, y por
todos los arroyos de la tierra será quebrado su ramaje; y se
irán de su sombra todos los pueblos de la tierra, y lo dejarán.
13Sobre su ruina habitarán todas las aves del cielo, y sobre sus
ramas estarán todas las bestias del campo, 14para que no se
exalten en su altura todos los árboles que crecen junto a las
aguas, ni levanten su copa entre la espesura, ni confíen en su
altura todos los que beben aguas; porque todos están destinados
a muerte, a lo profundo de la tierra, entre los hijos de los
hombres, con los que descienden a la fosa.
15Así ha dicho Yahweh el Señor: El día que descendió al Seol, hice hacer luto, hice cubrir por él el abismo, y detuve
sus ríos, y las muchas aguas fueron detenidas; al Líbano cubrí
de tinieblas por él, y todos los árboles del campo se
desmayaron. 16Del estruendo de su caída hice temblar a las
naciones, cuando las hice descender al Seol con todos los que
descienden a la sepultura; y todos los árboles escogidos del
Edén, y los mejores del Líbano, todos los que beben aguas,
fueron consolados en lo profundo de la tierra. 17También ellos
descendieron con él al Seol, con los muertos a espada, los que
fueron su brazo, los que estuvieron a su sombra en medio de las
naciones. 18¿A quién te has comparado así en gloria y en
grandeza entre los árboles del Edén? Pues derribado serás con
los árboles del Edén en lo profundo de la tierra; entre los
incircuncisos yacerás, con los muertos a espada.
Este es Faraón y todo su pueblo, dice
Yahweh el Señor.
v8 El
mayor de los árboles, el de
la fruta prohibida no fue
cubierto en el huerto de
Dios (Edén) ningún árbol fue
semejante a él en Eden, (es
árbol del conocimiento del
bien y del mal y Cristo, los
dos son el mismo árbol en en
centro del huerto de Dios)
depende de como el hombre
venga a Dios, Él le da el
conocimiento que produce la
muerte, o el Espíritu que
emana de la sangre de
Cristo, en el
arrepentimiento de la
reconciliación de la
relación con Dios. v10
Caída del hombre que ha
confiado en el conocimiento,
como muchos líderes de la
Iglesia, pastores etc. (advertencia
para todos) v16 todos los
árboles escogidos del Edén,
y del Líbano, fueron
consolados en lo profundo de
la tierra. v18 Este es
Faraón
(idea del hombre) que cae al
Seol y todo el pueblo que ha
confiado en él, el este
proyecto del mundo del
hombre sin Dios.
CAPÍTULO 32
1Aconteció en el año duodécimo, en el mes duodécimo, el día
primero del mes, que vino a mí palabra de Yahweh, diciendo:
2Hijo de hombre, levanta endechas sobre Faraón rey de Egipto, y
dile: A leoncillo de naciones eres semejante, y eres como el
dragón en los mares; pues secabas tus ríos, y enturbiabas las
aguas con tus pies,
Enturbia las aguas pisándolas con el calzado de
su evangelio de confusión del mundo. La Palabra es clara a este
respecto, todos los que prediquen un evangelio diferente sean
anatema: ...Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os
anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado,
sea anatema... Gálatas 1:8. El proyecto del mundo con su falsa
promesa de vida, sin Dios es un falso evangelio procedente de la
mente del dragón de los mares, el diablo.
y hollabas sus riberas. 3Así ha dicho
Yahweh
el Señor: Yo extenderé sobre ti mi red con reunión de muchos
pueblos, y te harán subir con mi red. 4Y te dejaré en tierra, te
echaré sobre la faz del campo, y haré posar sobre ti todas las
aves del cielo, y saciaré de ti a las fieras de toda la tierra.
5Pondré tus carnes sobre los montes, y llenaré los valles de tus
cadáveres. 6Y regaré de tu sangre la tierra donde nadas, hasta
los montes; y los arroyos se llenarán de ti. 7Y cuando te haya
extinguido, cubriré los cielos, y haré entenebrecer sus
estrellas; el sol cubriré con nublado, y la luna no hará
resplandecer su luz. 8Haré entenebrecer todos los astros
brillantes del cielo por ti, y pondré tinieblas sobre tu tierra,
dice Yahweh el Señor. 9Y entristeceré el
corazón de muchos pueblos, cuando lleve al cautiverio a los
tuyos entre las naciones, por las tierras que no conociste. 10Y
dejaré atónitos por ti a muchos pueblos, y sus reyes tendrán
horror grande a causa de ti, cuando haga resplandecer mi espada
delante de sus rostros; y todos se sobresaltarán en sus ánimos a
cada momento en el día de tu caída. 11Porque así ha dicho
Yahweh
el Señor: La espada del rey de Babilonia vendrá sobre ti.
Dios es claro y reiteradas
veces habla al hombre de este modo durante el ministerio de este
profeta: si el hombre quiere seguir su proyecto mundano, Dios le
entrega a la esclavitud de la religión de los hombres. De modo
que la verdadera religión de amistad personal con Dios queda
cerrada a los que Le aborrecen. Sin embargo es el estatus ideal
en el que el hombre debe caminar a lo largo de la peregrinación
por la tierra, precisamente en esa relación de amistad y amor
con Dios. Y este es el objetivo del diablo, quitarle al hombre y
a Dios esa relación.
12Con
espadas de fuertes haré caer tu pueblo; todos ellos serán los
poderosos de las naciones; y destruirán la soberbia de Egipto, y
toda su multitud será deshecha. 13Todas sus bestias destruiré de
sobre las muchas aguas; ni más las enturbiará pie de hombre, ni
pezuña de bestia las enturbiará. 14Entonces haré asentarse sus
aguas, y haré correr sus ríos como aceite, dice
Yahweh el Señor.
15Cuando asuele la tierra de Egipto, y la tierra quede despojada
de todo cuanto en ella hay, cuando mate a todos los que en ella
moran, sabrán que yo soy Yahweh. 16Esta es la endecha, y la
cantarán; las hijas de las naciones la cantarán; endecharán
sobre Egipto y sobre toda su multitud, dice
Yahweh el Señor.
17Aconteció en el año duodécimo, a los quince días del
mes, que vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 18Hijo de
hombre, endecha sobre la multitud de Egipto, y despéñalo a él, y
a las hijas de las naciones poderosas, a lo profundo de la
tierra, con los que descienden a la sepultura. 19Porque eres tan
hermoso, desciende, y yace con los incircuncisos. 20Entre los
muertos a espada caerá; a la espada es entregado; traedlo a él y
a todos sus pueblos. 21De en medio del Seol hablarán a él los
fuertes de los fuertes, con los que le ayudaron, que
descendieron y yacen con los incircuncisos muertos a espada.
22Allí está Asiria con toda su multitud; en derredor de
él están sus sepulcros; todos ellos cayeron muertos a espada.
23Sus sepulcros fueron puestos a los lados de la fosa, y su
gente está por los alrededores de su sepulcro; todos ellos
cayeron muertos a espada, los cuales sembraron el terror en la
tierra de los vivientes. 24Allí Elam, y toda su multitud por los alrededores de su
sepulcro; todos ellos cayeron muertos a espada, los cuales
descendieron incircuncisos a lo más profundo de la tierra,
porque sembraron su terror en la tierra de los vivientes, mas
llevaron su confusión con los que descienden al sepulcro. 25En
medio de los muertos le pusieron lecho con toda su multitud; a
sus alrededores están sus sepulcros; todos ellos incircuncisos,
muertos a espada, porque fue puesto su espanto en la tierra de
los vivientes, mas llevaron su confusión con los que descienden
al sepulcro; él fue puesto en medio de los muertos.
26Allí Mesec y Tubal, y toda su multitud; sus sepulcros
en sus alrededores; todos ellos incircuncisos, muertos a espada,
porque habían sembrado su terror en la tierra de los vivientes.
27Y no yacerán con los fuertes de los incircuncisos que cayeron,
los cuales descendieron al Seol con sus armas de guerra, y sus
espadas puestas debajo de sus cabezas; mas sus pecados estarán
sobre sus huesos, por cuanto fueron terror de fuertes en la
tierra de los vivientes. 28Tú, pues, serás quebrantado entre los
incircuncisos, y yacerás con los muertos a espada.
29Allí Edom, sus reyes y todos sus príncipes, los cuales
con su poderío fueron puestos con los muertos a espada; ellos
yacerán con los incircuncisos, y con los que descienden al
sepulcro. 30Allí los príncipes del norte,
todos ellos, y todos los sidonios, que con su terror
descendieron con los muertos, avergonzados de su poderío, yacen
también incircuncisos con los muertos a espada, y comparten su
confusión con los que descienden al sepulcro.
31A éstos verá Faraón, y se consolará sobre toda su
multitud; Faraón muerto a espada, y todo su ejército, dice
Yahweh el Señor. 32Porque puse mi terror en la tierra de los
vivientes, también Faraón y toda su multitud yacerán entre los
incircuncisos con los muertos a espada, dice
Yahweh el Señor.
La incircuncisión a la que se
refiere Yahweh es la del corazón en arrepentimiento y en la fe
de Jesús. Todos los pueblos, todas las naciones, incluida
Israel, es nación incircuncisa si no se circuncidan el corazón
espiritualmente, esto es, dejan la impiedad y tienen
misericordia y amor de amigos y de enemigos, como nos ha
enseñado el Maestro. Tarea ésta difícil, por no decir imposible,
la cual lo es, si no se tiene el Espíritu de Dios. El hombre
natural no puede amar a sus enemigos, ni siquiera a sus amigos,
ni a sus seres queridos, porque el amor humano no es como el
amor de Dios. Esto es el resumen de este texto.
En definitiva lo que Dios
quiere que reciba el hombre es un corazón como el Suyo, de modo
que el hombre pueda amar del mismo modo que lo hace Dios. Como
podrá darse cuanta, si esto hiciese la humanidad, la tierra
sería el reino de Dios.
El
mundo se oscurecerá dentro
de la atmósfera,
posiblemente dentro de
nuestra propia atmósfera
debido al mal estado en que
se encuentra ya.
EL ATALAYA DE ISRAEL
CAPÍTULO 33
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, habla a
los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre
la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su
territorio y lo pusiere por atalaya, 3y él viere venir la espada
sobre la tierra, y tocare trompeta y avisare al pueblo,
4cualquiera que oyere el sonido de la trompeta y no se
apercibiere, y viniendo la espada lo hiriere, su sangre será
sobre su cabeza. 5El sonido de la trompeta oyó, y no se
apercibió; su sangre será sobre él; mas el que se apercibiere
librará su vida. 6Pero si el atalaya viere venir la espada y no
tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la
espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su
pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya.
7A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a
la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los
amonestarás de mi parte. 8Cuando yo dijere al impío: Impío, de
cierto morirás; si tú no hablares para que se guarde el impío de
su camino, el impío morirá por su pecado, pero su sangre yo la
demandaré de tu mano. 9Y si tú avisares al impío de su camino
para que se aparte de él, y él no se apartare de su camino, él
morirá por su pecado, pero tú libraste tu vida.
Idéntico mensaje que en el
anterior pasaje donde habla del Atalaya de Israel, pero debemos
fijarnos que en esta ocasión dice que el propio pueblo que
recibe el castigo pone por Atalaya a un hombre que ellos
tomaren. Este será el que oirá la Palabra de la boca de Dios y
amonestará a Su pueblo de Su parte. Mas nos vale, pues que a
aquellos que nos tengan por profetas y nos pregunten sobre su
situación espiritual, les advirtamos y amonestemos. De este modo
su sangre no será demandada de nuestra mano, en caso que el impío
se arrepienta, no lo demandará Dios de nuestra mano.
JUSTICIA De Dios
10Tú, pues, hijo de hombre, di a la casa de Israel: Vosotros
habéis hablado así, diciendo: Nuestras rebeliones y nuestros
pecados están sobre nosotros, y a causa de ellos somos
consumidos; ¿cómo, pues, viviremos? 11Diles:
Vivo yo, dice Yahweh el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se
vuelva el impío de su camino,
y que viva. Volveos, volveos de
vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de Israel?
12Y tú, hijo de hombre, di a los hijos de tu pueblo: La justicia
del justo no lo librará el día que se rebelare; y la impiedad
del impío no le será estorbo el día que se volviere de su
impiedad; y el justo no podrá vivir por su justicia el día que
pecare. 13Cuando yo dijere al justo: De cierto vivirás, y él
confiado en su justicia hiciere iniquidad, todas sus justicias
no serán recordadas, sino que morirá por su iniquidad que hizo.
14Y cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; si él se
convirtiere de su pecado, e hiciere según el derecho y la
justicia, 15si el impío restituyere la prenda, devolviere lo que
hubiere robado, y caminare en los estatutos de la vida, no
haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá. 16No se le
recordará ninguno de sus pecados que había cometido; hizo según
el derecho y la justicia; vivirá ciertamente.
17Luego dirán los hijos de tu pueblo: No es recto el
camino del Señor; el camino de ellos es el que no es recto.
18Cuando el justo se apartare de su justicia, e hiciere
iniquidad, morirá por ello. 19Y cuando el impío se apartare de
su impiedad, e hiciere según el derecho y la justicia, vivirá
por ello. 20Y dijisteis: No es recto el camino del Señor. Yo os
juzgaré, oh casa de Israel, a cada uno conforme a sus caminos.
Cuando Yahweh nos habla de Su
justicia podemos ver que ciertamente es justo y que Su corazón
lleva gran sufrimiento por la humanidad, que da al hombre
oportunidades de salvar su alma, que está esperando el
arrepentimiento, el cambio de la mente del hombre para
perdonarlo y recibirlo, para presentarle al salvador que Él ha
previsto, a Su propio Hijo unigénito al cual ha sacrificado por
nosotros como cordero redentor.
Si bien el hombre probará su
fe por sus obras, este texto es sin duda alguna un buen
complemento para la doctrina de la salvación por la fe, con las
obras como consecuencia de esa fe. Pero el hombre no puede
salvarse por haber acumulado una serie de buenas acciones, o por
el cumplimiento de la ley, porque no puede, por ello necesita al
Salvador.
Nuevas de la caída de Jerusalén
21Aconteció en el año duodécimo de nuestro cautiverio, en el mes
décimo, a los cinco días del mes, que vino a mí un fugitivo de
Jerusalén, diciendo: La ciudad ha sido conquistada. 22Y la mano
de Yahweh había sido sobre mí la tarde antes de llegar el
fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la
mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado.
23Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 24Hijo de hombre, los
que habitan aquellos lugares asolados en la tierra de Israel
hablan diciendo: Abraham era uno, y poseyó la tierra; pues
nosotros somos muchos; a nosotros nos es dada la tierra en
posesión. 25Por tanto, diles: Así ha dicho
Yahweh el Señor:
¿Comeréis con sangre, y a vuestros ídolos alzaréis vuestros
ojos, y derramaréis sangre, y poseeréis vosotros la tierra?
26Estuvisteis sobre vuestras espadas, hicisteis abominación, y
contaminasteis cada cual a la mujer de su prójimo; ¿y habréis de
poseer la tierra? 27Les dirás así: Así ha dicho
Yahweh el Señor:
Vivo yo, que los que están en aquellos lugares asolados caerán a
espada, y al que está sobre la faz del campo entregaré a las
fieras para que lo devoren; y los que están en las fortalezas y
en las cuevas, de pestilencia morirán.
El hombre en su necedad
piensa que por la tradición y la herencia religiosa puede
justificarse, y que Dios no le tomará en cuenta su
desobediencia. El hombre que es pecador será perseguido, no
tiene donde esconderse del juicio de Dios, tarde o temprano
todos son alcanzados por la mano de Yahweh, según Él determine.
28Y convertiré la tierra
en desierto y en soledad, y cesará la soberbia de su poderío; y
los montes de Israel serán asolados hasta que no haya quien
pase. 29Y sabrán que yo soy Yahweh, cuando convierta la tierra
en soledad y desierto, por todas las abominaciones que han
hecho. 30Y tú, hijo de hombre, los hijos
de tu pueblo se mofan de ti junto a las paredes y a las puertas
de las casas, y habla el uno con el otro, cada uno con su
hermano, diciendo: Venid ahora, y oíd qué palabra viene de
Yahweh. 31Y vendrán a ti como viene el pueblo, y estarán delante
de ti como pueblo mío, y oirán tus palabras, y no las pondrán
por obra; antes hacen halagos con sus bocas, y el corazón de
ellos anda en pos de su avaricia. 32Y he aquí que tú eres a
ellos como cantor de amores, hermoso de voz y que canta bien; y
oirán tus palabras, pero no las pondrán por obra. 33Pero cuando
ello viniere (y viene ya), sabrán que hubo profeta entre ellos.
Efectivamente la actitud de
la sociedad es la avaricia. Oirán nuestras palabras, palabras
del Evangelio por amor a ellos, ponemos nuestras vidas para
dedicarla a ellos, pero ellos no pondrán la Palabra por obra.
Pero sabrán que hubo profeta entre ellos. No obstante no nos
sirve de consuelo que se pierda nuestro prójimo, pero esta es la
justicia. No obstante tenemos una buena herramienta, la oración.
Con ella podemos hacer que muchos que no creen, cambien sus
vidas.
Profecía contra los pastores de Israel
CAPÍTULO 34
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre,
profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los
pastores: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¡Ay de los pastores de
Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los
pastores a los rebaños? 3Coméis la grosura, y os vestís de la
lana; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas.
4No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma;
no
vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la
descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis
enseñoreado de ellas con dureza y con violencia. 5Y andan
errantes por falta de pastor, y son presa de todas las fieras
del campo, y se han dispersado. 6Anduvieron perdidas mis ovejas
por todos los montes, y en todo collado alto; y en toda la faz
de la tierra fueron esparcidas mis ovejas, y no hubo quien las
buscase, ni quien preguntase por ellas.
7Por tanto, pastores, oíd palabra de Yahweh: 8Vivo yo, ha dicho
Yahweh el Señor, que por cuanto mi rebaño fue para ser robado, y
mis ovejas fueron para ser presa de todas las fieras del campo,
sin pastor; ni mis pastores buscaron mis ovejas, sino que los
pastores se apacentaron a sí mismos, y no apacentaron mis
ovejas; 9por tanto, oh pastores, oíd palabra de
Yahweh. 10Así ha
dicho Yahweh el Señor: He aquí, yo estoy contra los pastores; y
demandaré mis ovejas de su mano, y les haré dejar de apacentar
las ovejas; ni los pastores se apacentarán más a sí mismos, pues
yo libraré mis ovejas de sus bocas, y no les serán más por
comida. 11Porque así ha dicho
Yahweh el
Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas,
y las
reconoceré. 12Como reconoce su rebaño el pastor el día que está
en medio de sus ovejas esparcidas, así reconoceré mis ovejas, y
las libraré de todos los lugares en que fueron esparcidas el día
del nublado y de la oscuridad. 13Y yo las sacaré de los pueblos,
y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia tierra, y
las apacentaré en los montes de Israel, por las riberas, y en
todos los lugares habitados del país. 14En buenos pastos las
apacentaré, y en los altos montes de Israel estará su aprisco;
allí dormirán en buen redil, y en pastos suculentos serán
apacentadas sobre los montes de Israel. 15Yo apacentaré mis
ovejas, y yo les daré aprisco, dice Yahweh el Señor. 16Yo
buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada;
vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil;
mas a la
engordada y a la fuerte destruiré; las apacentaré con justicia.
17Mas en cuanto a vosotras, ovejas mías, así ha dicho
Yahweh el Señor: He aquí yo juzgo entre oveja y oveja, entre
carneros y machos cabríos. 18¿Os es poco que comáis los buenos
pastos, sino que también holláis con vuestros pies lo que de
vuestros pastos queda; y que bebiendo las aguas claras,
enturbiáis además con vuestros pies las que quedan? 19Y mis
ovejas comen lo hollado de vuestros pies, y beben lo que con
vuestros pies habéis enturbiado. 20Por
tanto, así les dice Yahweh el Señor: He aquí yo, yo juzgaré
entre la oveja engordada y la oveja flaca, 21por cuanto
empujasteis con el costado y con el hombro, y acorneasteis con
vuestros cuernos a todas las débiles, hasta que las echasteis y
las dispersasteis. 22Yo salvaré a mis ovejas, y nunca más serán
para rapiña; y juzgaré entre oveja y oveja. 23Y levantaré sobre
ellas a un pastor, y él las apacentará; a mi siervo David, él
las apacentará, y él les será por pastor. 24Yo
Yahweh les seré
por Dios, y mi siervo David príncipe en medio de ellos. Yo
Yahweh he hablado. 25Y estableceré con
ellos pacto de paz, y quitaré de la tierra las fieras; y
habitarán en el desierto con seguridad, y dormirán en los
bosques. 26Y daré bendición a ellas y a los alrededores de mi
collado, y haré descender la lluvia en su tiempo; lluvias de
bendición serán. 27Y el árbol del campo dará su fruto, y la
tierra dará su fruto, y estarán sobre su tierra con seguridad; y
sabrán que yo soy Yahweh, cuando rompa las coyundas de su yugo,
y los libre de mano de los que se sirven de ellos. 28No serán
más por despojo de las naciones, ni las fieras de la tierra las
devorarán; sino que habitarán con seguridad, y no habrá quien
las espante. 29Y levantaré para ellos una planta de renombre, y
no serán ya más consumidos de hambre en la tierra, ni ya más
serán avergonzados por las naciones. 30Y sabrán que yo
Yahweh su
Dios estoy con ellos, y ellos son mi pueblo, la casa de Israel,
dice Yahweh el Señor. 31Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi
pasto, hombres sois, y yo vuestro Dios, dice
Yahweh el Señor.
Este texto sobre los pastores
de la Iglesia que no caminan en santidad, creo que habla por si
solo, si aplicamos las partes subrayadas a los pastores de las
diferentes congregaciones y ramas de la Cristiandad, el lector
seguro que reconoce estos comportamientos en algunos de sus
líderes. Como podemos ver, Dios mismo apacienta a Su pueblo sin
pastores si es necesario.
Profecía contra el Monte Seir
CAPÍTULO 35
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu
rostro hacia el monte de Seir, y profetiza contra él, 3y dile:
Así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí yo estoy contra ti, oh
monte de Seir, y extenderé mi mano contra ti, y te convertiré en
desierto y en soledad. 4A tus ciudades asolaré, y tú serás
asolado; y sabrás que yo soy Yahweh. 5Por cuanto tuviste
enemistad perpetua, y entregaste a los hijos de Israel al poder
de la espada en el tiempo de su aflicción, en el tiempo
extremadamente malo, 6por tanto, vivo yo, dice
Yahweh el Señor,
que a sangre te destinaré, y sangre te perseguirá; y porque la
sangre no aborreciste, sangre te perseguirá. 7Y convertiré al
monte de Seir en desierto y en soledad, y cortaré de él al que
vaya y al que venga. 8Y llenaré sus montes de sus muertos; en
tus collados, en tus valles y en todos tus arroyos, caerán
muertos a espada. 9Yo te pondré en asolamiento perpetuo, y tus
ciudades nunca más se restaurarán; y sabréis que yo soy
Yahweh.
10Por cuanto dijiste: Las dos naciones y las dos tierras
serán mías, y tomaré posesión de ellas; estando allí
Yahweh;
11por tanto, vivo yo, dice Yahweh el Señor, yo haré conforme a
tu ira, y conforme a tu celo con que procediste, a causa de tus
enemistades con ellos; y seré conocido en ellos, cuando te
juzgue. 12Y sabrás que yo Yahweh he oído todas tus injurias que
proferiste contra los montes de Israel, diciendo: Destruidos
son, nos han sido dados para que los devoremos. 13Y os
engrandecisteis contra mí con vuestra boca, y multiplicasteis
contra mí vuestras palabras. Yo lo oí. 14Así ha dicho
Yahweh el
Señor: Para que toda la tierra se regocije, yo te haré una
desolación. 15Como te alegraste sobre la heredad de la casa de
Israel, porque fue asolada, así te haré a ti; asolado será el
monte de Seir, y todo Edom, todo él; y sabrán que yo soy
Yahweh.
Terrible corazón impío el de
este pueblo que representa una actitud diabólica al regocijarse
en la aflicción de Israel. Del mismo modo los romanos se mofaban
del Señor cuando estaba en la Cruz. Estas almas son dejadas y
asoladas. Esto es lo que Dios manda a aquellos que son impíos y
se alegran del mal de su prójimo.
Restauración futura de Israel
CAPÍTULO 36
1Tú, hijo de hombre, profetiza a los montes de Israel, y di:
Montes de Israel, oíd palabra de Yahweh. 2Así ha dicho
Yahweh el
Señor: Por cuanto el enemigo dijo de vosotros: ¡Ea!
también las
alturas eternas nos han sido dadas por heredad; 3profetiza, por
tanto, y di: Así ha dicho Yahweh el Señor: Por cuanto os
asolaron y os tragaron de todas partes, para que fueseis heredad
de las otras naciones, y se os ha hecho caer en boca de
habladores y ser el oprobio de los pueblos, 4por tanto, montes
de Israel, oíd palabra de Yahweh el Señor: Así ha dicho
Yahweh
el Señor a los montes y a los collados, a los arroyos y a los
valles, a las ruinas y asolamientos y a las ciudades
desamparadas, que fueron puestas por botín y escarnio de las
otras naciones alrededor; 5por eso, así ha dicho
Yahweh el
Señor: He hablado por cierto en el fuego de mi celo contra las
demás naciones, y contra todo Edom, que se disputaron mi tierra
por heredad con alegría, de todo corazón y con enconamiento de
ánimo, para que sus expulsados fuesen presa suya. 6Por tanto,
profetiza sobre la tierra de Israel, y di a los montes y a los
collados, y a los arroyos y a los valles: Así ha dicho
Yahweh el
Señor: He aquí, en mi celo y en mi furor he hablado, por cuanto
habéis llevado el oprobio de las naciones. 7Por lo cual así ha
dicho Yahweh el Señor: Yo he alzado mi mano, he jurado que las
naciones que están a vuestro alrededor han de llevar su afrenta.
8Mas vosotros, oh montes de Israel, daréis vuestras
ramas, y llevaréis vuestro fruto para mi pueblo Israel; porque
cerca están para venir. 9Porque he aquí, yo estoy por vosotros,
y a vosotros me volveré, y seréis labrados y sembrados. 10Y haré
multiplicar sobre vosotros hombres, a toda la casa de Israel,
toda ella; y las ciudades serán habitadas, y edificadas las
ruinas. 11Multiplicaré sobre vosotros hombres y ganado, y serán
multiplicados y crecerán; y os haré morar como solíais
antiguamente, y os haré mayor bien que en vuestros principios; y
sabréis que yo soy Yahweh. 12Y haré andar hombres sobre
vosotros, a mi pueblo Israel; y tomarán posesión de ti, y les
serás por heredad, y nunca más les matarás los hijos. 13Así ha
dicho Yahweh el Señor: Por cuanto dicen de vosotros: Comedora de
hombres, y matadora de los hijos de tu nación has sido; 14por
tanto, no devorarás más hombres, y nunca más matarás a los hijos
de tu nación, dice Yahweh el Señor. 15Y nunca más te haré oír
injuria de naciones, ni más llevarás denuestos de pueblos,
ni
harás más morir a los hijos de tu nación, dice
Yahweh el Señor.
16Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 17Hijo de
hombre, mientras la casa de Israel moraba en su tierra, la
contaminó con sus caminos y con sus obras; como inmundicia de
menstruosa fue su camino delante de mí. 18Y derramé mi ira sobre
ellos por la sangre que derramaron sobre la tierra; porque con
sus ídolos la contaminaron. 19Les esparcí por las naciones, y
fueron dispersados por las tierras; conforme a sus caminos y
conforme a sus obras les juzgué. 20Y cuando llegaron a las
naciones adonde fueron, profanaron mi santo nombre, diciéndose
de ellos: Estos son pueblo de Yahweh, y de la tierra de él han
salido. 21Pero he tenido dolor al ver mi santo nombre profanado
por la casa de Israel entre las naciones adonde fueron.
22Por tanto, di a la casa de Israel: Así ha dicho
Yahweh
el Señor: No lo hago por vosotros, oh casa de Israel, sino por
causa de mi santo nombre, el cual profanasteis vosotros entre
las naciones adonde habéis llegado. 23Y santificaré mi grande
nombre, profanado entre las naciones, el cual profanasteis
vosotros en medio de ellas; y sabrán las naciones que yo soy
Yahweh, dice Yahweh el Señor, cuando sea santificado en vosotros
delante de sus ojos. 24Y yo os tomaré de las naciones, y os
recogeré de todas las tierras, y os traeré a vuestro país.
Las alturas eternas, son los
montes de Israel, los cuales las otras naciones han despreciado.
El templo de Dios también en otos pasajes es despreciado por los
reyes del mundo, pero es que también los propios Israelitas o
Judíos despreciaron la santidad del Señor lo cual está cumplido
en la persona de Jesucristo, a quien despreciaron, azotaron,
escupieron y mataron en la cruz.
Aquel que es el templo del
Espíritu Santo fue masacrado por las naciones tanto Judía como
Gentil de los romanos.
Cumplido en 1948 físicamente,
y hoy en día muchos mesiánicos son reunidos en congregación
aceptando y proclamando al Mesías de todas las naciones, el
Señor Yahshua, Jesucristo, conforme a la profecía Bíblica.
25Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de
todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os
limpiaré. 26Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo
dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de
piedra, y os daré un corazón de carne. 27Y pondré dentro de
vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y
guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. 28Habitaréis en
la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por
pueblo, y yo seré a vosotros por Dios. 29Y os guardaré de todas
vuestras inmundicias; y llamaré al trigo, y lo multiplicaré, y
no os daré hambre. 30Multiplicaré asimismo el fruto de los
árboles, y el fruto de los campos, para que nunca más recibáis
oprobio de hambre entre las naciones. 31Y os acordaréis de
vuestros malos caminos, y de vuestras obras que no fueron
buenas; y os avergonzaréis de vosotros mismos por vuestras
iniquidades y por vuestras abominaciones. 32No lo hago por
vosotros, dice Yahweh el Señor, sabedlo bien; avergonzaos y
cubríos de confusión por vuestras iniquidades, casa de Israel.
33Así ha dicho Yahweh el Señor: El día que os limpie de
todas vuestras iniquidades, haré también que sean habitadas las
ciudades, y las ruinas serán reedificadas. 34Y la tierra asolada
será labrada, en lugar de haber permanecido asolada a ojos de
todos los que pasaron. 35Y dirán: Esta tierra que era asolada ha
venido a ser como huerto del Edén; y
estas ciudades que eran
desiertas y asoladas y arruinadas, están fortificadas y
habitadas. 36Y las naciones que queden en vuestros alrededores
sabrán que yo reedifiqué lo que estaba derribado, y planté lo
que estaba desolado; yo Yahweh he hablado, y lo haré.
37Así ha dicho Yahweh el Señor: Aún seré solicitado por
la casa de Israel, para hacerles esto; multiplicaré los hombres
como se multiplican los rebaños. 38Como las ovejas consagradas,
como las ovejas de Jerusalén en sus fiestas solemnes, así las
ciudades desiertas serán llenas de rebaños de hombres; y sabrán
que yo soy Yahweh.
v25 la sangre de Cristo y el
agua del costado es el agua de este texto. v26 simboliza el
nuevo nacimiento del Espíritu. v28 es la descripción del reino
de Dios.
EL
VALLE DE LOS HUESOS SECOS
CAPÍTULO
37
LEVANTAOS DE ENTRE LOS MUERTOS Y OS
ALUMBRARÁ CRISTO
Este corto pasaje de la Biblia
nos muestra el tremendo mensaje que Dios nos enseña sobre la profecía de la
resurrección de los muertos físicos y espirituales. Ezequiel se encuentra ante la
tesitura de profetizar al espíritu de los cuatro vientos, el espíritu que trae
la vida sobre la muerte, de parte de Dios. Esto es posible por la obra de
Cristo, aunque en el tiempo de este profeta aún no había muerto y resucitado
Cristo, aunque si en la eternidad; nos es presentado aquí, pues, el poder de Su obra en la Cruz, la cual cubre todo el
tiempo de la humanidad, porque Él se ofreció por los hombres ...antes de la fundación del
mundo... 1Pedro 1:20.
Del mismo modo veremos en el
texto Bíblico como los muertos al espíritu de Dios, reciben vida de entre el
mundo para salir a flote y nacer de nuevo, con la predicación del Evangelio. Hay
una tercera acción espiritual representada en este estudio Bíblico, y es que hay
muertos al espíritu que antes vivieron, esto es, hermanos que engañados por el
diablo cayeron del Camino; pues bien a estos también les es anunciada la vida de
nuevo si aceptan volver a Cristo, para estos es urgente antes de su muerte,
porque ...hoy vienen a pedirte tu alma... Lucas 12:20.
1 La
mano de Yahweh vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de
Yahweh, y me puso en medio
de un valle que estaba lleno de huesos. 2Y me hizo pasar cerca de ellos por
todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto
secos en gran manera.
Situación en la que se encuentra cualquier
persona de Dios que se preocupa por su prójimo y que normalmente conversa con
Dios acerca de la situación de ellos. Entonces, Dios nos lleva a ver el
valle, que es la zona plana, el camino fácil, a ver a las personas que andan
en el camino de la sociedad. Este valle, mundo, está lleno de huesos, o sea
de almas muertas al Espíritu de Dios. Y he aquí que son muchos, y secos en
gran manera, del agua viva que da Cristo.
3Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y
dije: Señor Yahweh, tú lo sabes. 4Me dijo entonces: Profetiza sobre estos
huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Yahweh. 5Así ha dicho
Yahweh
el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis.
6Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os
cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy
Yahweh.
A continuación nos pregunta el Señor
que si tenemos fe en que éstos creerán. Entonces nos pide que les
prediquemos el Evangelio de la Salvación para que, creyendo, Dios ponga en
ellos espíritu de vida, o sea, Espíritu de Vida, que Jesús entre en ellos y
haga morada en ellos. Y los tendones son las coyunturas entre los que aman a
Dios y Él, y los hermanos, y la carne que en el cuerpo es la que lo sustenta,
aquí es para que tengamos consistencia espiritual, y la piel es
espiritualmente la unción del Espíritu Santo. Es esta cobertura una
bendición permanente que Dios pone sobre los que le piden que Él sea su
Señor y esposo para siempre. Y sabréis que yo soy Yahweh,
que Y o soy es que Es con vosotros siempre.
7Profeticé, pues, como me fue mandado; y
hubo un ruido mientras
yo profetizaba, y he aquí un temblor; y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso.
8Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por
encima de ellos; pero no había en ellos espíritu. 9Y me dijo: Profetiza al
espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho
Yahweh el Señor:
Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. 10Y
profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron
sobre sus pies; un ejército grande en extremo.
He aquí la culminación del predicador, cualquiera que se
preste a predicar va a recibir la instrucción de pedir al Espíritu Santo
que fluya de los cuatro vientos, que son en realidad las bases del fundamento
sobre el que se sustenta la vida, representado por los cuatro puntos
cardinales que son las bases de la estabilidad de la tierra,
tierra alma, y alma que ha de hacerse tierra prometida por el Evangelio. Cuando se
predica y se ve que los que oyen no cambian radicalmente, no debemos desmayar
y dudar que la Palabra volverá vacía, sino invocar al Espíritu Santo y
darle la gloria a Él para que llene las almas de los que no conocen a Dios,
cuando tengan en sus mentes, el programa del Evangelio, para que haga en ellos
morada eterna y templo de Dios. Y estuvieron sobre sus pies, que son el
Evangelio Eterno, un gran ejercito, una gran congregación de discípulos de
Cristo, un pueblo de reyes y sacerdotes para Dios, una nación santa. 1Pedro
2:9.
11Me dijo luego: Hijo de hombre, todos estos huesos son la casa de Israel. He
aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra esperanza, y somos del
todo destruidos. 12Por tanto, profetiza, y diles: Así ha dicho
Yahweh el
Señor: He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré subir de vuestras
sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel. 13Y sabréis que yo soy
Yahweh, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas,
pueblo mío.
14Y pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra
tierra; y sabréis que yo Yahweh hablé, y lo hice, dice
Yahweh.
Responden hombres y mujeres, hastiados de la vida: perdimos
la fe, estábamos destruidos y esclavos del mundo y sin esperanza. Benditos
son los pies de los que traen la Paz, la Paz de Cristo, el Evangelio y el
alimento sólido para que ya no desmayéis jamás, para que los vuestros vean
en vosotros la luz de la lámpara encendida con el aceite de la unción de
Cristo. Id al Señor casa de Israel, todos los que amáis al Cordero de Dios,
su majestad el Rey de reyes, Jesús de
Nazaret.
La reunión de Judá e Israel
15Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 16Hijo de hombre, toma
ahora un palo, y escribe en él: Para Judá, y para los hijos de
Israel sus compañeros. Toma después otro palo, y escribe en él:
Para José, palo de Efraín, y para toda la casa de Israel sus
compañeros.
El hermano que los salva
en el mundo es José, y el hermano que los salva espiritualmente
es Judá, Cristo.
17Júntalos luego el uno con el otro, para que sean
uno solo, y serán uno solo en tu mano. 18Y cuando te pregunten
los hijos de tu pueblo, diciendo: ¿No nos enseñarás qué te
propones con eso?, 19diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: He
aquí, yo tomo el palo de José que está en la mano de Efraín, y a
las tribus de Israel sus compañeros, y los pondré con el palo de
Judá, y los haré un solo palo, y serán uno en mi mano. 20Y los
palos sobre que escribas estarán en tu mano delante de sus ojos,
21y les dirás: Así ha dicho Yahweh el Señor: He aquí, yo tomo a
los hijos de Israel de entre las naciones a las cuales fueron, y
los recogeré de todas partes, y los traeré a su tierra; 22y los
haré una nación en la tierra, en los montes de Israel, y un rey
será a todos ellos por rey; y nunca más serán dos naciones, ni
nunca más serán divididos en dos reinos. 23Ni se contaminarán ya
más con sus ídolos, con sus abominaciones y con todas sus
rebeliones; y los salvaré de todas sus rebeliones con las cuales
pecaron, y los limpiaré; y me serán por pueblo, y yo a ellos por
Dios. 24Mi siervo David será rey sobre
ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis
preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán por obra.
25Habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual
habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos, sus hijos y
los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será
príncipe de ellos para siempre. 26Y haré con ellos pacto de paz,
pacto perpetuo será con ellos; y los estableceré y los
multiplicaré, y pondré mi santuario entre ellos para siempre.
27Estará en medio de ellos mi tabernáculo, y seré a ellos por
Dios, y ellos me serán por pueblo. 28Y sabrán las naciones que
yo Yahweh santifico a Israel, estando mi santuario en medio de
ellos para siempre.
Profecía de la restauración
del reino de Israel, espiritual, Judíos y Gentiles de todas las
naciones que reciban al Mesías, aquí simbolizado por David,
(Cristo es llamado Hijo de David) que
reinará eternamente sobre el pueblo de Dios. También es la
restauración de tener la presencia de Dios, al poner Él Su
tabernáculo en medio de nosotros.
Profecía contra Gog
CAPÍTULO 38
1Vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: 2Hijo de hombre, pon tu
rostro contra Gog en tierra de Magog, príncipe soberano de Mesec
y Tubal, y profetiza contra él, 3y di: Así ha dicho
Yahweh el
Señor: He aquí, yo estoy contra ti, oh Gog, príncipe soberano de
Mesec y Tubal. 4Y te quebrantaré, y pondré garfios en tus
quijadas, y te sacaré a ti y a todo tu ejército, caballos y
jinetes, de todo en todo equipados, gran multitud con paveses y
escudos, teniendo todos ellos espadas; 5Persia, Cus y Fut con
ellos; todos ellos con escudo y yelmo; 6Gomer, y todas sus
tropas; la casa de Togarma, de los confines del norte, y todas
sus tropas; muchos pueblos contigo.
7Prepárate y apercíbete, tú y toda tu multitud que se ha reunido
a ti, y sé tú su guarda. 8De aquí a muchos días serás visitado;
al cabo de años vendrás a la tierra salvada de la espada,
recogida de muchos pueblos, a los montes de Israel, que siempre
fueron una desolación; mas fue sacada de las naciones, y todos
ellos morarán confiadamente. 9Subirás tú, y vendrás como
tempestad; como nublado para cubrir la tierra serás tú y todas
tus tropas, y muchos pueblos contigo.
10Así ha dicho Yahweh el Señor: En aquel día subirán palabras en
tu corazón, y concebirás mal pensamiento, 11y dirás: Subiré
contra una tierra indefensa, iré contra gentes tranquilas que
habitan confiadamente; todas ellas habitan sin muros, y no
tienen cerrojos ni puertas; 12para arrebatar despojos y para
tomar botín, para poner tus manos sobre las tierras desiertas ya
pobladas, y sobre el pueblo recogido de entre las naciones, que
se hace de ganado y posesiones, que mora en la parte central de
la tierra. 13Sabá y Dedán, y los mercaderes de Tarsis y todos
sus príncipes, te dirán: ¿Has venido a arrebatar despojos? ¿Has
reunido tu multitud para tomar botín, para quitar plata y oro,
para tomar ganados y posesiones, para tomar grandes despojos?
14Por tanto, profetiza, hijo de hombre, y di a Gog: Así
ha dicho Yahweh el Señor: En aquel tiempo, cuando mi pueblo
Israel habite con seguridad, ¿no lo sabrás tú? 15Vendrás de tu
lugar, de las regiones del norte, tú y muchos pueblos contigo,
todos ellos a caballo, gran multitud y poderoso ejército, 16y
subirás contra mi pueblo Israel como nublado para cubrir la
tierra; será al cabo de los días; y te traeré sobre mi tierra,
para que las naciones me conozcan, cuando sea santificado en ti, oh Gog, delante de sus ojos. 17Así ha
dicho Yahweh el Señor: ¿No eres tú aquel de quien hablé yo en
tiempos pasados por mis siervos los profetas de Israel, los
cuales profetizaron en aquellos tiempos que yo te había de traer
sobre ellos? 18En aquel tiempo, cuando venga Gog contra la
tierra de Israel, dijo Yahweh el Señor, subirá mi ira y mi
enojo. 19Porque he hablado en mi celo, y en el fuego de mi ira:
Que en aquel tiempo habrá gran temblor sobre la tierra de
Israel; 20que los peces del mar, las aves del cielo, las bestias
del campo y toda serpiente que se arrastra sobre la tierra, y
todos los hombres que están sobre la faz de la tierra, temblarán
ante mi presencia; y se desmoronarán los montes, y los vallados
caerán, y todo muro caerá a tierra. 21Y en todos mis montes
llamaré contra él la espada, dice Yahweh el Señor; la espada de
cada cual será contra su hermano. 22Y yo litigaré contra él con
pestilencia y con sangre; y haré llover sobre él, sobre
sus
tropas y sobre los muchos pueblos que están con él, impetuosa
lluvia, y piedras de granizo, fuego y azufre. 23Y seré
engrandecido y santificado, y seré conocido ante los ojos de
muchas naciones; y sabrán que yo soy Yahweh.
Gog de Magog, representa el
reino del mundo sobre los hombres, las naciones sin Dios. El
texto es comparable a la batalla de Armagedón en
Apocalipsis 16:16.
Todas las naciones vendrán
para luchar contra Israel, y entonces el Señor es quien saldrá
victorioso.
Apocalipsis 20:7 al 10 nos
narra la profecía del último tiempo cuando Satanás sea suelto de
su prisión tras el tiempo simbólico de 1000 años, el día del
Señor (...pues para el Señor un día es como 1000 años, y 1000
años como un día) y engañe a las naciones, a Gog y a Magog para
reunirlos para la batalla, cuando el Señor vendrá con sus
ejércitos y vencerá a las naciones.
Gog es pues aquél hombre que
será engañado por el diablo para utilizarle en la región humana,
y entregarlo engañado a la batalla donde perezca, siendo enemigo
de Dios.
CAPÍTULO 39
1Tú pues, hijo de hombre, profetiza contra Gog, y di: Así ha
dicho Yahweh el Señor: He aquí yo estoy contra ti, oh Gog,
príncipe soberano de Mesec y Tubal. 2Y te quebrantaré, y te
conduciré y te haré subir de las partes del norte, y te traeré
sobre los montes de Israel; 3y sacaré tu arco de tu mano
izquierda, y derribaré tus saetas de tu mano derecha. 4Sobre los
montes de Israel caerás tú y todas tus tropas, y los pueblos que
fueron contigo; a aves de rapiña de toda especie, y a las fieras
del campo, te he dado por comida. 5Sobre la faz del campo
caerás; porque yo he hablado, dice Yahweh el Señor. 6Y enviaré
fuego sobre Magog, y sobre los que moran con seguridad en las
costas; y sabrán que yo soy Yahweh. 7Y
haré notorio mi santo nombre en medio de mi pueblo Israel, y
nunca más dejaré profanar mi santo nombre; y sabrán las naciones
que yo soy Yahweh, el Santo en Israel. 8He aquí viene, y se
cumplirá, dice Yahweh el Señor; este es el día del cual he
hablado. 9Y los moradores de las ciudades
de Israel saldrán, y encenderán y quemarán armas, escudos,
paveses, arcos y saetas, dardos de mano y lanzas; y los quemarán
en el fuego por siete años. 10No traerán leña del campo, ni
cortarán de los bosques, sino quemarán las armas en el fuego; y
despojarán a sus despojadores, y robarán a los que les robaron,
dice Yahweh el Señor. 11En aquel tiempo
yo daré a Gog lugar para sepultura allí en Israel, el valle de
los que pasan al oriente del mar; y obstruirá el paso a los
transeúntes, pues allí enterrarán a Gog y a toda su multitud; y
lo llamarán el Valle de Hamón-gog. 12Y la casa de Israel los
estará enterrando por siete meses, para limpiar la tierra. 13Los
enterrará todo el pueblo de la tierra; y será para ellos célebre
el día en que yo sea glorificado, dice Yahweh el Señor. 14Y
tomarán hombres a jornal que vayan por el país con los que
viajen, para enterrar a los que queden sobre la faz de la
tierra, a fin de limpiarla; al cabo de siete meses harán el
reconocimiento. 15Y pasarán los que irán por el país, y el que
vea los huesos de algún hombre pondrá junto a ellos una señal,
hasta que los entierren los sepultureros en el valle de Hamón-gog.
16Y también el nombre de la ciudad será Hamona; y limpiarán la
tierra. 17Y tú, hijo de hombre, así ha
dicho Yahweh el Señor: Di a las aves de toda especie, y a toda
fiera del campo: Juntaos, y venid; reuníos de todas partes a mi
víctima que sacrifico para vosotros, un sacrificio grande sobre
los montes de Israel; y comeréis carne y beberéis sangre.
18Comeréis carne de fuertes, y beberéis sangre de príncipes de
la tierra; de carneros, de corderos, de machos cabríos, de
bueyes y de toros, engordados todos en Basán. 19Comeréis grosura
hasta saciaros, y beberéis hasta embriagaros de sangre de las
víctimas que para vosotros sacrifiqué. 20Y os saciaréis sobre mi
mesa, de caballos y de jinetes fuertes y de todos los hombres de
guerra, dice Yahweh el Señor. 21Y pondré
mi gloria entre las naciones, y todas las naciones verán mi
juicio que habré hecho, y mi mano que sobre ellos puse. 22Y de
aquel día en adelante sabrá la casa de Israel que yo soy
Yahweh
su Dios. 23Y sabrán las naciones que la casa de Israel fue
llevada cautiva por su pecado, por cuanto se rebelaron contra
mí, y yo escondí de ellos mi rostro, y los entregué en manos de
sus enemigos, y cayeron todos a espada. 24Conforme a su
inmundicia y conforme a sus rebeliones hice con ellos, y de
ellos escondí mi rostro. 25Por tanto, así
ha dicho Yahweh el Señor: Ahora volveré la cautividad de Jacob,
y tendré misericordia de toda la casa de Israel, y me mostraré
celoso por mi santo nombre. 26Y ellos sentirán su vergüenza, y
toda su rebelión con que prevaricaron contra mí, cuando habiten
en su tierra con seguridad, y no haya quien los espante;
27cuando los saque de entre los pueblos, y los reúna de la
tierra de sus enemigos, y sea santificado en ellos ante los ojos
de muchas naciones. 28Y sabrán que yo soy Yahweh su Dios, cuando
después de haberlos llevado al cautiverio entre las naciones,
los reúna sobre su tierra, sin dejar allí a ninguno de ellos.
29Ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de
mi Espíritu sobre la casa de Israel, dice Yahweh el Señor.
Mesec y Tubal eran naciones
que comerciaban con esclavos. Esto representa en Gog, la
esclavitud diabólica a la tiene sometido el demonio a todo
hombre que no ama a Dios y obedece Su Palabra. Esclavitud esta
que se adueña del hombre por la carne, por la parte animal, pero
también por la mente, por el conocimiento que envanece y pierde
al hombre, engañándole para que piense que es autónomo.
El sacrificio grande en los
montes de Israel es nada menos que la muerte en la Cruz de
nuestro Señor, para que seamos salvos. Dice el Señor que no
dejará a ninguno de ellos, de aquellos que crean en el Señor, en
el Evangelio del Mesías.
Dios tiene que forzar la
salvación del hombre porque no somos amigos suyos por
naturaleza, Él se da a nosotros por amor de nosotros y ha de
cambiar nuestros corazones y nuestras mentes para que podamos
tener una relación de amistad personal y de amor con Él. La
situación ideal que una vez tuvo el hombre en el huerto del
Edén.
Al final el Señor
misericordioso, hace el encontradizo con el hombre para que
pueda derramas Su Espíritu sobre nuestras almas, dice Yahweh el
Señor.
CONCLUSIÓN:
Dios nos muestra
el comportamiento humano a lo largo de la historia, y siempre el
hombre cae en lo mismo error o pecado: no ha considerado su
relación con Dios. El hombre, tanto del Israel literal como de
las naciones, no ha conocido a su Dios Yahweh mediante Cristo
Yahshua. Finalmente nos muestra que toda la estructura del
enemigo incluyendo la descripción de este, es un fracaso. Sin
Dios no existe la paz, ni de espíritu ni de vida, ni un proyecto
que sea de bendición. En la tercera y última parte de este libro
veremos el proyecto de Dios para la construcción del templo y su
aplicación al alma de hombre.
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